DIARIO del Círculo Achocalla: Otro peligro amenaza al medio ambiente

Respecto a la soya transgénica pasó lo que era de esperar: Algunas malezas se volvieron resistentes contra el glifosato, el componente principal de Round-Up, el insecticida que acompaña a la soya transgénica. Esta soya tiene un gen implantado, que le hace resistente contra el Round-Up. De esta manera se puede sembrar y luego aplicar el Round-Up. Con este método todas las plantas mueren menos la soya, y ésta puede entonces crecer sin ningún competidor del agua y nutrientes.

Pero como se ha dicho, ahora resulta que también algunas malezas se han vuelto resistentes contra el glifosato del Round-Up. Claro que la industria de herbicidas ya está buscando otra solución en su carrera contra la naturaleza. Y la solución más práctica es el herbicida 2,4 D. Este es un herbicida muy potente y muy tóxico. Se ha utilizado este herbicida en la guerra contra Vietnam muy conocido como agente naranja para desfoliar a los árboles. También los efectos sobre los seres humanos son conocidos y horrendos. Después de tres generaciones siguen los nacimientos de niños deformes y cada vez más mujeres son estériles.

La industria ya produce soya resistente contra este herbicida y pidió a los organismos competentes en EE.UU la aprobación de estas plantas para la siembra.

En los próximos meses se espera la decisión respecto a esta solicitud. Y si la respuesta es positiva – como todo el mundo prevé – el 2,4 D se aplicará en grandes cantidades. Los países del tercer mundo deberían estar atentos para que no se de licencia a este nuevo tipo de soya transgénica. Pero lamentablemente también para nuestros gobiernos valen más los intereses de la agroindustria, que la salud de la población y la protección del medio ambiente.

También te podría gustar...