Tractatus oecologico-politicus post Covid-19

Autor: Javier Medina

Índice

Aviso a caminantes

Primera parte: Teorética

Energía: el diseño conceptual

El algoritmo hierogámico sacrificial

La noción de Holoarquía

La noción de Toroide

La noción de Crianza

Masa: las configuraciones concretas

La Forma Jaqi: el gobierno de sí mismo

La Forma Ayllu: el gobierno de la casa

La Forma Estado: el gobierno de la nación

La Forma Oikos: el gobierno de la naturaleza

Segunda parte: Pragmática

Energía: el diseño conceptual

La Vía Bosónica

La Vía creativa

La Vía Fermiónica

La Vía transformativa

Masa: las configuraciones concretas

Co-inspirar con amigos

Cultivar el propio huerto

Cocinar los propios alimentos

Comer en familia

Las disposiciones intangibles

No hagas suposiciones

No tomes nada personalmente

Se impecable en tus palabras

Haz siempre lo mejor posible

Tercera parte: Moralejas

Semillas para pensar después de la Cuarentena global

Locus elocutionis


Aviso a caminantes

1. El título, Tractaus oecológico-políticus, es una referencia y un homenaje a dos tratados que me han marcado intelectualmente: al Tractatus theologicopoliticus, de Baruj Spinoza y al Tractatus logicophilosophicus de Ludwig Wittgenstein. Dos Marranos, uno sefardí y otro ashkenazí.

Lo que mento con la noción de ecológico subsume las ideas spinozistas de deus sive natura, así como de natura naturans  y natura naturata. Su rompedora crítica exegética a la Torah, con lo importante y decisiva que fue para la Modernidad, a estas alturas, ya es irrelevante. No necesito hacerme ateo o agnóstico o libertino para aceptar que Moisés, Abraham, Jesús… son arquetipos literarios que recrean a figuras legendarias sumerias y, sobre todo, egipcias. No pasa nada. Ya no vivimos en tiempos ontológicos. Su resonancia simbólico-emocional, sin embargo, sigue siendo decisiva para mí y para la historia de Occidente y, por sus repercusiones políticas y tecnológicas, para el resto de la humanidad[1]. Los seres de papel y tinta (energía/onda) son tan reales como los de carne y hueso (masa/partícula), como lo volvió  a recordar el Marrano Miguel de Cervantes Saavedra, con esos seres maravillosos y entrañables que son Don Quijote y Sancho Panza.

Lo que debo a Wittgenstein es mucho, no solo la relación entre juegos de lenguaje y energía sino un talante más general y más hondo que lo formuló muy bien (y lo comparto plenamente) en el borrador del prólogo a sus Investigaciones filosóficas. Dice así: Este libro ha sido escrito para quienes se acercan amistosamente al espíritu con el que fue escrito. Creo que este espíritu es distinto al de la gran corriente de la civilización europea y americana. El espíritu de esta civilización, cuya expresión es la industria, la arquitectura, la música, el fascismo y el socialismo de nuestra época, es ajeno y antipático al autor. (…). Pero la energía sigue siendo energía y así aun cuando el teatro que nos ofrece esta época no sea el del devenir de una gran obra cultural, en la que los mejores colaboran hacia el mismo gran fin, sino el teatro menos imponente de una masa, cuyos mejores sólo aspiran a fines privados, no debemos olvidar que esto no depende del teatro. Para mí es muy claro que la desaparición de una cultura no significa la desaparición del valor humano, sino sólo de algunos medios de expresión de este valor. Con todo, sigue en pie el hecho de que veo sin simpatía la corriente de la civilización europea, sin comprensión por sus fines, en caso de que tenga algunos. Así, pues, en verdad escribo para amigos diseminados por todos los rincones del mundo[2]. Yo, en realidad, no se para quién escribo, pero escribo y, en ello, me siento un judío, libre de la metáfora y del mito, pero tampoco en contra suya.

2. En el lapso de mi vida, la caída de Evo Morales provoca un segundo momento en el que los jóvenes se politizan. El primer momento estuvo marcado por el paradigma newtoniano, que priorizaba la masa; las revoluciones en blanco y negro, tendientes más bien hacia lo violento y sacrificial. Éste segundo momento está signado por el paradigma cuántico que prioriza energía; las revoluciones de colores, tendiendo más bien hacia lo pacífico y hierogámico. Hay un cambio de voltaje. La inercia, sin embargo, si no tomamos conciencia, nos va a empujar a seguir pensando y actuando en modo masa. Lo cual sería una pena para todos pero, sobre todo, para los jóvenes. No debiéramos, como sociedad, permitirnos una nueva equivocación. Hay lecciones aprendidas que tenemos la obligación intelectual de pasarlas a la siguiente generación: transmitir la tradición, pero no mecánicamente, sino yapándole lo aprendido en el camino, como valor añadido. Luego, tu trabajo será, suave lector, recibirla: qabbalah y digerirla. Es preciso enfrentar la ley de inercia, que también opera a nivel intelectual. Eso implica, pues, en este caso, repensar lo Político en un bucle de mayor complejidad. De esto va, desconocido lector, este texto que tienes en las manos.

3. En el lapso de mi vida, la Cuarentena sanitario-política global, lograda en un santiamén, es el primer evento en el que, de la noche a la mañana, se produce un golpe de timón y un frenazo tan radical y absoluto que, para sorpresa mía, alumbra con nueva luz y una nueva pertinencia la propuesta de rediseño de lo Político que me puse a escribir para la generación de los Pititas que, antes de tres meses, ya les volaron el protagonismo político. Como otrora los campesinos, los mineros y los fabriles, ellos también: los jóvenes, sirvieron de Escalera para que las familias de siempre, por interpósitas personas, se volvieran a trepar al poder. El ex asesor de prensa de la Embajada, antes de su cierre, ahora es el secretario privado y escribidor de los discursos de la Presidenta interina. ¡Vaya vuelco!  Entre estos dos episodios se inscribe y escribe este texto.

4. Pensar, es habérselas con palabras; escribir es habérselas con sustantivos abstractos, con conceptos. Es esencializar, platónicamente, el mundo y, a saber, inevitablemente; aunque este gesto luciferino no debiera ser inexorable. Debemos relativizarlo, cuánticamente. Ahora sabemos que, solo pensar, no es lo mejor, para uno mismo, para las mujeres y para la naturaleza. Hay que aprender también a sentir: pensar y sentir, intuir y festejar. Es preciso activar, al mismo tiempo, nuestros dos lóbulos cerebrales. Al intentar este ejercicio, los conceptos se disuelven  y vuelven a ser palabras, es decir, plurívocas. Estalla la oralidad. Los conceptos, por su parte: por diseño, buscan la univocidad y precisan de la escritura. Esa tensión es indispensable.

Voy a intentar, pues, algo arriesgado: escribir: univocidad, es decir, activar la función Partícula y, al mismo tiempo, activar también la función Onda, es decir, la plurivocidad en su grado básico: cultivar lo que, inapropiadamente, he llamado un quantum conceptual: un paquete de nociones opuestas/complementarias; es decir, tener en cuenta, en el mismo hálito, el envés y el revés, de las palabras y las cosas.

Espero no ser oscuro y, al mismo tiempo, debo ser breve. Soy consciente que, a quienes me quiero dirigir, están en la onda del smartphone. Soy también consciente que nací a la cultura arropado por libros, cuadernos y lápices. Sé que lo que quiero comunicarles, no se los podré ofrecer, como me hubiera gustado, como una canción, un paso de baile, tampoco como una pintura, un video, un textil o un ritual. Al apthapi político, al convite ciudadano, que nos convocan las circunstancias, sólo puedo llevar, de momento, un texto escrito: un chuñito puthi.

5. Escribo en un momento en el que la Tierra, un espacio finito, se está incendiando e inundando, calentando y enfriando, exacerbadamente, y en el que el Mundo está haciendo volar por los aires su mayor logro civilizatorio: el Estado de Derecho y, dentro suyo: su dinamizador más eficaz: el pensamiento crítico, debido a la locura de un sistema económico, basado en la escasez y el miedo[3], que no puede detenerse, so riesgo de implosionar.

Estamos metidos en una trampa que, pareciera, está tocando fondo, otra vez. En la larga historia de nuestro planeta, ya han sucedido, por lo menos, cinco grandes Extinciones. Todo pareciera indicar que corremos hacia una sexta. Ahora bien, también es preciso parar mientes en el hecho de que, el sistema Gaia, se auto regenera en nuevos bucles de complejidad, creatividad y novedad; eso sí, en temporalidades que no son humanas y a juzgar, por ya demasiados vestigios hallados que no encajan en la historia oficial, tampoco seríamos la primera Humanidad que se ha ido o está yéndose al garete.

6. Parece ser que, los seres humanos, somos capaces de marcar pequeñas bifurcaciones a la Deriva natural de la vida. Unas pueden ser más benéficas que maléficas o viceversa. Con el monoteísmo patriarcal, la humanidad que hace masa crítica, ha enfatizado las energías fermiónicas y los resultados globales, ahora, son, más bien, catastróficos, tanto en Naturaleza: depredación, como en Sociedad: desigualdad y la perspectiva tecnológica: el Transhumanismo, me tinka mal. Sobre el eclipse del matriarcado previo, solo podemos imaginar conjeturas razonables. Siguiendo los automatismos lógicos, empero, ahora, cabría proponer el Tercero incluido de ambas polaridades, como un nuevo bucle en la evolución humana. En circunstancias semejantes, Joaquín de Fiori, ya propuso lo que llamó la Era del Espíritu Santo. Dicho en los términos de hoy, sugeriría que apostemos, puesto que no podremos cambiar los ingredientes, porque las energías de la Polaridad positiva, las energías bosónicas del amor, la empatía, la colaboración, hagan masa crítica. Esa es la bifurcación posible, hoy.

La política es el dominio que tiene que ayudar a que estas energías bosónicas: hierogámicas, del matriarcado, hagan masa crítica sobre las energías fermiónicas: sacrificiales del patriarcado y a que volvamos a aprender el arte de la Alquimia: a dosificar los ingredientes. La vida buena es el camino del medio: la Senda Dorada de Maimónides. ¿Cómo saber, empero, si vamos bien? Don Juan Matus[4], el δαίμων, daimon, de la era cuántica, nos recomienda que auscultemos si ese camino tiene corazón o no. Si sentimos que lo tiene, vamos bien. Hoy por hoy, empero, todo indica que estamos perdidos, como personas y como  humanidad. Para salir del atolladero actual debemos pensar/sentir/compartir/festejar en un holón de Consciencia más complejo. Esa es mi sugerencia.

Con pocas palabras: éste es el cambio de eje de rotación político que debemos propiciar para ir, pari passu, con el cambio de eje de rotación magnético del planeta Tierra.

Sopocachi, 22 de marzo de 2020

Primera parte: Teorética

Energía: el diseño conceptual

El algoritmo hierogámico sacrificial

La palabra Algoritmo la defino enseguida. El adjetivo hierogámico, etimológicamente, proviene de la composición hierós- ἱερός, que significa sagrado y -gamos γάμος, que significa unión, enganche o boda. Hierosgamos es un concepto teológico para aludir a la existencia de matrimonios sagrados o bodas simbólicas: es decir, Conjunciones especiales: biológicas, humanas, sociales, astrales. Jung la utiliza en su psicología profunda[5]. El equivalente homeomórfico aymara sería aniña, de donde provienen Ayni y Ayllu: economía y sociedad.

El adjetivo sacrificial, etimológicamente, proviene del latín sacratus, participio perfecto del verbo sacrare que se deriva, a su vez, del adjetivo sacer, que significa sacrificar en el sentido de matar y separar (el cuerpo del alma, el individuo de la sociedad) en un espacio específico que, por ello mismo, se convierte en un lugar de poder; está vinculado con la raíz indoeuropea sak que significa santificar en el sentido que la muerte sacrificial (no cualquier muerte) separa y glorifica: hace santo, sagrado, lo separadoque no son sino las elites del sistema piramidal, justamente.

Aclarados  los conceptos principales de nuestro constructo intelectual, démosle un hervor concreto y local, para mayor comprensión.

Santa Zapata

El diácono sonante, Carlos Valverde, la proclamó a los altares, como putana/virgen y víctima/mártir, cual guinda que coronó la guerra sucia de la campaña electoral del Referéndum que  tuvo lugar el 21 de Febrero, de un año que los bolivianos ya han olvidado, y también de lo que provocó: “Bolivia dijo No”, una jaculatoria, construida mañosamente, (Zapata mediante, justamente) que llegó a participar, como partido político, en las elecciones de 2019. Y le fue, como le fue: mal.

El diácono Jorge Sonnante, en el tramo opuesto y simétricamente exacto, de la guerra sucia de la campaña electoral 2019, proclamó urbi et orbi la Ruta vaticana del dinero EMA. El vocero sucrense de la Santa Sede lo desmintió pronto, achicando aguas. La amante de las noticias febles, empero, se ganó el ministerio de desinformación de la República de Bolivia 2.0.

Espero, sagaces lectores, que ya hayan vislumbrado que estoy hablando de diseño. Aquí aparece una simetría. Estas cosas no aparecen por casualidad. Los que piensan lo Político, desde el vértice enmascarado de la Pirámide, miman estos detalles, que son guiños para sus pares y claves para el buen entendedor. Espero que ustedes lleguen a ser buenos discípulos de los Maestros de la Sospecha: Nietzsche, Freud y Marx. Sigan esas pistas, por su cuenta.

Gabriela Zapata encarna muy bien lo medular de lo político, entendido como la conjunción de lo que he llamado[6] la complementariedad de las energías hierogámicas, que regulan la circulación del semen y de las energías sacrificiales, que regulan la circulación de la sangre. Esta Polaridad es el corazón de lo Político y de lo Sagrado. Semen y Sangre: S&S. Reténganlo[7].

La Separación, aparente, de lo político y lo sagrado, es un pase de manos mágico-político para despistar a los fieles/ciudadanos que representan el nivel de lo profano. Primera gran Maña de la política: separar.

La segunda proviene de la tauromaquia: el manejo del capote. Paz Zamora lo dijo insuperablemente: “Pones el guiñador hacia la izquierda y volteas a la derecha”. Coda de su adlátere sacrificial: “Cuando la gente se da cuenta, el fato ya ha sido consumado”. Segunda gran Maña de la política: despistar.

Hay que pijchar, deglutir lento estas Paradojas, para no ir por la vida como un sedotto e abbandonato.

Ahora bien, en el nivel de lo sagrado, lo que se da es la Unificación; hay que unir: complementar, ambas polaridades. El ejemplo máximo, en Occidente, es el Imperio vaticano, que une lo religioso y lo político y continúa, disfrazado, al Imperio romano, que continua, a su vez, al Imperio babilonio que se junta, a su vez, al Imperio egipcio y ya lleva, él solo,  –no por nada– más de mil setecientos años. En los Andes, es la Forma Ayllu, que une aran y urin: lo masculino y lo femenino, y que ya lleva también milenios.

En la larguísima Duración, estas Formas aparecen y desaparecen. Si la civilización, ahora, oscila hacia lo energético por razones tecnológicas: GAFA (Google, Apple, Facebook y Amazon) es que ha vuelto a sonar el Momento Ayllu; es decir, el diseño energético, en red, de lo Político.Ya lo anunció Nicola Tesla. Sigan esta pista: NT.

Esta ars politica tiene un Principio lógico. Lo Político no se mueve en el ámbito de la Identidad, sino de lo Contradictorio[8].

Este algoritmo universal lo voy a explicar, brevemente, pues es el corazón de mi aporte a la comprensión y explicación no sólo de mi Biosofía del Vivir Bien[9], sino que es un principio hermenéutico universal. A esta energía, Wilhelm Reich la llamó Orgón. Sigan esta otra pista: WR.

El Algoritmo

Ahora viene la definición prometida de Algoritmo.

Entendemos por Algoritmo Hierogámico-Sacrificial un Programa recursivo (digamos: el ritual de sangre y/o semen) que se enciende automáticamente, siempre que las instrucciones prescritas (energías bosónicas: Deseo y Goce y fermiónicas: Amenaza y Violencia) se encuentren, sin que, necesariamente, intervenga un deus ex machina (digamos: un sumo sacerdote/suma sacerdotisa) pero que tampoco le excluye[10].

Dicho de otra manera: un electrón es igual a onda más partícula. Un orgón es igual a energía libidinal, conjunción: placer, más energía sacrificial, disyunción: displacer. Un hombre es igual a energía masculina (testosterona, animus…) y energía femenina (progesterona, anima…) y, así, infinitamente. Este es el modelo de la realidad y del Animismo; también del Yin y Yang, en el Taoísmo y de la Tradición hermética occidental, desde los gnósticos hasta los físicos cuánticos.

El Pusini

Ha llegado, asimismo, el momento de utilizar las herramientas de mi cocina intelectual, que quiero compartir con ustedes. Refloto una herramienta para pensar, que ya aparece en las Pampas de Nazca, hace tres mil años, y que el último Heidegger la vuelve a sugerir[11] como una herramienta para pensar post metafísica u post ontológicamente.

Se trata del Pusinio tawantin o cuadrante o tetralecto o cuaternio o Geviert que trabajo, a detalle, en mi libro Pasos hacia una Biosofía del Vivir Bien, tomo tres.

  URDIMBRE
TRAMA   Onda/Bosón Interior / Manqha Conjunción Partícula/Fermión Exterior / Aka Expansión
  Uno Individuo Unidad Macha   Inteligencia espiritual     Inteligencia ecológica  
  Par Colectivo Multiplicidad Pacha   Inteligencia emocional     Inteligencia racional  

Esta es una herramienta poderosa para pensar integralmentey, de este modo, poder salir de la uni dimensionalidad positivista que, también por diseño, está ahí, para que los fieles/ciudadanos no vean la otra mitad de todo: la Energía y se queden atrapados en Masa: y, encima, se sientan orgullosamente materialistas, como los buenistas de Oviedo.

Sólo así: presos en la masa-materia, el Monoteísmo patriarcal puede controlar y dominar: manteniendo a la gente en la ignorancia o, mejor aún, en las medias verdades. Tercera maña de la ciencia política:solo lo escrito, mensurable: objetivo, vale. El Animismo, en cambio, que une masa y energía, tiende más bien a conectar y facilitar. Este es el rol, precisamente, del Jilacata y la Mama Talla: la diarquía andina.

Veamos las columnas del cuadrante: lo vertical o, dicho andinamente, la urdimbre del tejido.

La columna de la izquierda (desde nuestro punto de vista)  representa la Función Onda o el haz de energías sutiles bosónicas de la física cuántica. También podemos decir que representa lo Interior del mundo o de las cosas. Lo no visible: lo intangible, lo que tiene que ver con el Vivir Bien. En aymara se usa la palabra Manqha: lo ctónico y, desde el punto de vista lógico, hablamos de las fuerzas de la Conjunción.

La columna de la derecha representa la Función Partícula o el haz de energías densas fermiónicas de la física cuántica. También podemos decir que representa lo Exterior del mundo o de las cosas. Lo visible: lo tangible que se puede tocar y medir, lo que tiene que ver con el Desarrollo. En aymara se usa la palabra Aka y, desde el punto de vista lógico, hablamos de las fuerzas de la Expansión.

Veamos ahora las franjas del cuadrante: lo horizontal o, dicho andinamente, la trama del tejido.

La franja de arriba representa la noción de lo Uno: de la unidad, de lo único, del individuo. En aymara se dice Macha. El prefijo ma significa uno o primero en sentido aritmético y la sílaba significativa cha significa energía y, a saber, la energía que viene de fuera, a diferencia de ka/qa que es la energía que sale de dentro hacia fuera. Los egipcios también la llamaron ka. Los chinos y los mayas hablan del chi.

La franja de abajo representa la noción de lo Par: de lo pareado, de la paridad, de la dualidad  y, por extensión, de lo colectivo, comunitario. En aymara se dice Pacha. El prefijo pa significa dos, en sentido aritmético, pero también par, bis, repetido y la sílaba significativa cha significa energía, como ya vimos. Por tanto, Pacha, Par, en nuestro caso, significa la complementariedad de las dos energías: la densa, manejada por los chamacanis y la sutil, manejada por los yatiris. O dicho de otra manera: la complementariedad de las energías bosónicas de la Función Onda y las energías fermiónicas de la Función Partícula.

El cruce de estas columnas y franjas nos arroja un cuadrado de cuatro celdas, en el que he colocado cuatro Inteligencias, en el sentido de Gardner, que son las siguientes: Interior Uno: la Inteligencia espiritual; Interior Par: la inteligencia emocional; Exterior Uno: la inteligencia ecológica y Exterior Par: la inteligencia racional.

No estoy describiendo algo, fenomenológicamente, sino formulando un modelo para pensar: un Denkmodel para entender, abstractamente. Este es uno de los secretos del poder occidental. No hay nada más concreto que un buen concepto. Este es el láser con el que el monoteísmo doblega al animismo. El despreciar lo abstracto y privilegiar lo concreto y operativo, me sabe sospechoso. No sólo torna vulnerables a los animistas sino, inducido por misioneros y tecnócratas, los mantiene subalternos. Esto es clave que lo conversemos bien los bolivianos: nos incumbe y nos atañe a todos, si queremos vivir en una sociedad democrática.

Bien, esta es la primera herramienta y es básica en mi sistema de lectura.

El Pusini hierogámico-sacrificial

Dicho esto, voy a vaciar la propuesta del algoritmo hierogámico-sacrificial a este Pusini, para que quede más claro y aprecien tres puntos.

Primero, cómo conectar pensamiento ancestral y pensamiento contemporáneo.

Segundo, cómo traducir a un holón más complejo el Denkmodel positivista y unidimensional de la comprensión tradicional de lo Político.

En tercer lugar, detengo el inconmensurable flujo de lo real, en lo que podríamos convenir en pensar como un nivel meso, entre lo microfísico y lo astrofísico, para imaginar el lugar de la sociedad humana, que no es un offshore de la Naturaleza, ni algo absoluto, como cree el Humanismo de raíces greco judías. Es relativo; es un Nodo relacional, con lo ultra-violeta simbólico y con lo infra-rojo real. Dejo de lado, de momento, lo imaginario, que es el espacio cotidiano, donde nos perdemos y encontramos continuamente.

El Animismo sabe administrar mejor esas hiper trascendencias e hiper inmanencias. La tradición marrana, racionalista y farisea, en la que he nacido, ha optado por minimizarlas lo más posible. Ahí me sigo ubicando todavía. Pero, existir, existen. Eu non creo nas meigas, mais habelas, hainas.

  Onda / Bosón Conjunción Interior Partícula / Fermión Expansión Exterior  
  UNO energía   DESEO     AMENAZA   Monoteísmo
  PAR  masa   GOCE     VIOLENCIA   Animismo
  Hierogamia   Matriarcado Sacrificio   Patriarcado  

Los términos de nuestro Algoritmo

Observemos nuestro Pusini. El Goce en acto se convierte en Goce en potencia y, entonces, se llama Deseo. La Violencia en acto se convierte en Violencia en potencia y, entonces, se llamaAmenaza. Acto / Potencia. Este quantum conceptual es básico, de Aristóteles a Lupasco. Sigan esa pista: Stéphane Lupasco. SL.

La tecnología que facilita esta transmutación es la Ritualidad, en la que este Deseo y esta Amenaza deben ser comunicados, equilibrados e intercambiados. Estos rituales echan mano de todo tipo de gestos, sonidos, danzas, puestas en escena, que podemos calificar de simbólicos, en la medida en que son reconocidos e intercambiados y se les reconoce un sentido conector y articulador: syn-ballein.

Es a través de esta tecnología ritual que se acumula, se amortigua, se canaliza, se expresa, el excedente libidinoso-agresivo. Así llamo a la energía que saca a la gente a la calle: revoluciones y revueltas o las encierra en casa: cuarentenas.

Estos rituales son juegos de equilibrio y desequilibrio, vaivenes de fuerzas, no sólo tangibles sino también  intangibles e, incluso, imaginarios[12]. Estas ceremonias sirven para crear el lazo que une a dos o más bíoi o zoés. Los antiguos griegos, para referirse a la vida, empleaban los términos: Βιοζ, bíos y ζωη, Zoè. Bios se refería a  la vida de lo individual (personas, animales, vegetales) y, por tanto, vida finita. Zoè, en cambio, era la vida en comunidad (la especie: los hombres, camélidos, palmeras) y, por tanto, inmortal. Los griegos también distinguían el espacio propio de cada una de estas vidas: mientras la casa, οικος, era el lugar propio de la zoè, la ciudad, πόλις, lo era del bíos.

Si el Sacrificio y la Hierogamia son dos momentos culminantes, es porque en ellos se dan de manera más explícita la Violencia y el Goce y porque éstos son la manifestación más pura de lo excesivo natural, pero también de lo excesivo cultural. Observen cómo estamos transitando de un modelo ontológico a uno energético. En esto estriba el cambio de paradigma actual.

Ahora bien, lo que distingue a los Sacrificios y a las Hierogamias desordenadas, informales, espontaneas, de los Sacrificios y Hierogamias ordenados, formales, ritualizados, es que, en los primeros, la distinción entre lo sagrado y lo profano es más difusa; mientras que, en los segundos, tiende a haber una frontera más nítida[13]

En los informales, lo sagrado se encarna en el conjunto de la zoé; mientras que en los formales, lo hace en los bíoi sagrados, a través de los cuales, como intermediarios, se produce el contacto con lo sagrado, del resto de la zoé.

Así, pues, la polaridad más elemental, Onda / Partícula la nomino como polaridad Hierogamia / Sacrificio, en el Nivel de Realidad de la Holoarquía, que llamamos Sociedad humana.

Hierogamia y Sacrificio son dispositivos culturales que generan vida: la cópula erótico-sexual: unión: digamos Matriarcado, ylos que generan muerte: separación de las dos energías: digamos Patriarcado. No estoy describiendo; estoy abstrayendo. No es así, pero así siempre es, como dicen los andinos.

Dicho con otras palabras: la masa-energía-información, de la física, sigue operando en el nivel de la sociedad humana (y más arriba también y, por supuesto, también más abajo: lo que llamo lo ultra violeta y lo infra rojo social) y, al modo de esta operación, la estamos llamando Algoritmo hierogámico-sacrificial (si enfatizamos el funcionamiento) y también Máquina hierogámico-sacrificial (si enfatizamos la estructura). Un término más general que junta ambos cabos podría ser Dispositivo o Gestell, que utiliza Heidegger. Un término más local podría ser Tinku hierogámico sacrificial. El tinku es un coito social, como sabemos, de las dos mitades del Ayllu: la masculina: urin y la femenina: aran. Los usaremos indistintamente, según qué queramos enfatizar.

Este es el corazón del Arte de lo Político, desde un punto de vista energético. Si entendemos esto, habremos entendido lo principal. Lo demás es aderezo.

Entre el Algoritmo hierogámico y el sacrificial hay una contigüidad, como la que conocemos de la configuración Bosón-Fermión. En todos los casos y niveles, sin embargo, ambas polaridades se solapan, se intercambian, se sustituyen, se encubren. La metáfora de la Polaridad es una foto fija para entender lo sustancial de ese vaivén que, de hecho, marea. Es como el juego de manos del cubilete. Las manos revolotean, pero el dado está fijo. Uno gana y los muchos pierden. Así se trasvasa la riqueza de abajo hacia arriba. La mayoría no se da cuenta. Volveré sobre esto, cuando me refiera a la Pirámide, como la geometría invisible de la Forma Estado.

Uno de los cometidos centrales de este Algoritmo hierogámico-sacrificial es la transferencia y la transmutación de lo que hemos modelado como Goce, Deseo, Amenaza y Violencia, entendidas como energías que fluyen a través de la masa.

Hablamos de Goce y de Violencia cuando los cuerpos entran en contacto directo e intercambian también materia y hablamos de Deseo y de Amenaza cuando estos flujos se dan a distancia, sin contacto directo de los cuerpos e intercambian energía: como en los sacramentos, por ejemplo.

El Monoteísmo va a privilegiar esto último, en tanto que el Animismo va a buscar más el cuerpo a cuerpo: el tinku. El primero tiende a producir Orden, el segundo Caos. El Animismo, de hecho, es un sistema caótico interactivo de baja intensidad, dosificado homeopáticamente[14].

Articulación de planos diferentes

El principal cometido del Algoritmo hierogámico-sacrificial es articular planos de distinto orden; hacer posible transferencias y transmutaciones entre unos y otros, de manera que se produzcan los equilibrios y reequilibrios del sistema.

El Algoritmo funciona en todos los sentidos; relaciona el presente con el futuro; conjura y expía; transfiere energías en un sentido y en el opuesto. Todo en la mecánica hierogámico-sacrificial es ambivalente, bidireccional, cíclico y reversible. Por ello, en el ámbito de lo social, político, religioso, no tiene sentido utilizar categorías como las de causalidad, racionalidad, separación, autonomía… que son oportunas en disciplinas propiamente científicas, en las que sí se puedenaislar ciertos elementos de su entorno y tenerlos bajo control.

En Política, no se puede. Por eso no se debe hablar de una ciencia de lo político; solo de artes y mañas, en un mundo que es en realidad un gran Teatro, como decía Calderón de la Barca, o un globo de ensayo donde se prueban dinámicas no lineales: el aleteo de un rumor en Calacoto puede provocar una concentración en la Plaza Abaroa. Una gripe de invierno, una pandemia global.

Ahora bien, detalle importante: la Forma Estado pone en escena: representa. La Forma Ayllu es performativa: presenta. Representación y Presencia.

En el Modo Caos se transgreden las prohibiciones que rigen en el Modo Orden. En efecto, en las crisis confluyen los factores que hacen que el goce-violencia natural no pueda ser contenido por un determinado régimen de prohibiciones y policía. La crisis es una situación que excede la normalidad. Se extreman las condiciones de supervivencia de los bíoi y de los zoés; se intensifican las contradicciones sociales. En ese punto de hervor, el Algoritmo genera mecanismos para dar salida a los excesos de presión. El Algoritmo opera en ambos modos, pero es en el Modo Caos cuando se hace explícita su existencia. En el Modo Orden late implícito.

Toda cultura es un inmenso ritual caníbal sublimado, pero también una inmensa y velada orgía, un incesto, una sodomía. Todo esto es un saber intuitivo, inconsciente, arquetípico, simbólico, que la Academia y las religiones tratan de encubrir y que, en definitiva, remite a la vinculación del goce y de la violencia, del deseo y la amenaza, del amor y del odio, del bien y del mal.

De este insight dimana el discurso heterodoxo de los místicos acerca de la Coincidentia oppositorum que se da en el centro del Toroide, sobre el que me detendré enseguida. El Coito es la cifra, a nuestra medida, de cómo opera el universo y que, desde el punto de vista lógico, es expresado en lo que se llama el Principio Antagonista de complementariedad de opuestos. Ese Coito encierra todo el misterio del universo. Este es el corazón de la Kabbalah[15].

Cuerpos individuales y cuerpos sociales

La transferencia de energías orgónicas: el proceso de la vida, se da también entre cuerpos individuales y cuerpos sociales, entre bíoi sagrados y bíoi profanos, entre especies e incluso entre objetos, sagrados y profanos. Hay transferencias entre zoés, minerales, vegetales y animales. Estas transferencias implican un salto de nivel holónico: de lo natural a lo cultural, por ejemplo; de lo individual a lo social.

En estos saltos de nivel, se produce una intensidad que podemos llamar catárquica: algo se libera: se transmuta: surge. Esto, justamente, es lo que hemos experimentado, en Octubre y Noviembre de 2019, cuando, sobre todo,  los jóvenes, salían a las calles, rotondas y plazas. El salto de nivel opuesto es el que estamos experimentando ahora mismo: todos hemos sido entrados, encerrados en nuestras casas. Sístole y Diástole. Ese ritmo es preciso aprender a percibirlo.

Lo inteligente es aprender lo Político a partir de las propias experiencias y de las palabras que lo profieren; pero, para que éstas se conviertan en Experiencia y Narrativa, se precisa de su opuesto: la abstracción conceptual. Siempre dos cosas opuestas, que se complementan.

Modo Caos y Modo Orden

Demorémonos un poco en la lógica de esa alternancia que hemos llamado, a una: Modo Caos y, a la otra, Modo Orden[16]. Estos dos modos regulan los flujos de masa-energía-información que hemos modelado como: Deseo-Goce y Amenaza-Violencia, para darle un rostro humano a las energías bosónicas y fermiónicas y entendamos mejor la física de las pasiones humanas.

Nuestra Máquina de Turing necesita alternar entre uno y otro Modo, para liberar flujos libidinosos-agresivos de energía que, ora puedan amenazar una configuración política, ora puedan fortalecer otra configuración social que está perdiendo la tensión necesaria y amenaza con desintegrarse.

Al hablar de Modo Caos y Modo Orden lo hacemos conceptualmente, pero he aquí que estos se manifiestan de manera muy concreta, desde los ciclos geológicos a los atmosféricos; desde los ciclos circadianos a los digestivos; de los cardiacos a los respiratorios, y lo hacen en forma de ciclos alternantes de ingestión y excreción, inspiración y expiración, sístole y diástole, que son prefiguraciones de lo que podemos empaquetar con las abstracciones Conjunción y Disjunción.

Ahora bien, el Modo Orden puede ser predominante, durante largos períodos de tiempo o en grandes espacios geográficos, sin que el Dispositivo opere en el Modo Caos. Si esto es así, es porque seguramente se han dado situaciones caóticas anteriores: guerras, revoluciones, revueltas, que proporcionaron la suficiente tensión energética, para que el régimen que emerge del caos opere cohesionadamente. Ello corresponde normalmente con los momentos de florecimiento o edad de oro de culturas y civilizaciones.

El Modo Caos puede irrumpir cuando las situaciones ordenadas han sufrido un proceso de entropía y se ha erosionado la cohesión social, emocional y simbólica. Ello corresponde, por ejemplo, con los momentos, como el actual, de crisis global del sistema político, basado en la Forma Estado Nación: revoluciones de color, guerras de quinta generación, pandemias de laboratorio… como está, justamente, sucediendo ahora en el mundo y en Bolivia. Pero, he aquí que estas situaciones  tienden a ser enmascaradas por la ritualidad mediática: fake news, post-verdad, revolución de las pititas … que esconden la obscenidad de lo que realmente sucede[17].

Ahora bien, estas energías se pueden dar en el Modo Orden, en cuyo caso la agresividad funda la cohesión social.  Reciprocidad negativa. También se puede dar en el Modo Caos, en cuyo caso la libidinosidad instaura también cohesión social. Reciprocidad positiva. O, si se quiere: patriarcado y matriarcado. De lo que se trata es de canalizar el exceso natural y transformarlo en un exceso cultural: de los intercambios materiales a los intercambios simbólicos y viceversa. En el modo Caos, celebra hierogamias y sacrificios, en los que se producen intercambios materiales entre sus integrantes, así como flujos de Goce hierogámico y de Violencia sacrificial. En el modo Orden se producen intercambios energéticos y los flujos pasan a ser de Deseo hierogámico y de Amenaza sacrificial. Por tanto, una vez, actualización y, en la otra, potencialización[18].

Si hay sociedad es porque hay exceso que, mediante el rito/mito, se transforma en fuerza de cohesión política. Estas energías son la fuente de la trascendencia y de la espiritualidad y también de lo más salvaje y temible. Estamos en un universo amoral. No cabe, aquí, hablar de bien y mal, de adecuado o inadecuado, como se estila en el Monoteísmo patriarcal, formulado ontológicamente; sólo de energías bosónicas o fermiónicas y sus distintas dosificaciones.

Vuelvo a recomendar las Obras del serrano cajamarquino-californiano Carlos Castaneda y la del ashkenazi-mejicano Jacobo Grinberg, sobre las enseñanzas de los amerindios Don Juan y Doña Pachita.  Reemplazan, holgadamente, a Platón y Aristóteles, a Hobbes y a Maquiavelo, en tiempos de Nicola Tesla y de la física cuántica. Sigan estas pistas: CC & JG.

La Hierogamia es el paradigma de los intercambios de flujos sexuales: semen fertilizante y de goce erótico, que rigen simbólicamente como Deseo hierogámico.

El Sacrificio es el paradigma de los intercambios de energía alimenticia y de Violencia sacrificial, que rigen simbólicamente como Amenaza sacrificial.

Semen y sangre. Copular y comer. El Goce hierogámico opera como paradigma del Deseo. La Violencia sacrificial opera como paradigma de la Amenaza. De ahí que el Deseo siga siendo hierogámico y la Amenaza siga siendo sacrificial, en la medida en que las Hierogamias y los Sacrificios patentes, en el modo de Caos, siguen estando latentes en el modo de Orden.

Y, finalmente, el cometido fundamental del Algoritmo es gestionar los intercambios materiales y energéticos entre todos sus integrantes. En ese sentido es como una retorta alquímica: transfiere y transmuta, separa y fusiona, disuelve y coagula.

Conjunción / Disjunción

¿Cómo se manifiestan las energías de la Disjunción en nuestro nivel de realidad?

Hemos sugerido que como un ritual sacrificial, en la medida en que el bíos sagrado, el individuo, se separa de los bíoi profanos o de la zoé: la especie: la comunidad. Esta disjunción genera un Tercero que se ha convenido en llamar Espíritu, lo trascendente, lo inmortal. De esta manera se neutraliza las energías fuertes que, igualmente, se ha convenido en llamarlas lo maléfico, lo culposo y se transmutan en su opuesto: lo benéfico, lo inocente, etc.

Una vez que estas energías fermiónicas fuertes han sido separadas y neutralizadas, los restos de la víctima sacrificial, tanto espirituales como corporales, trascendentes como inmanentes, se integran en la comunidad, en la cultura, en la naturaleza: los Achachilas, por ejemplo. De esta manera, todos los niveles holónicos de la realidad se vinculan, tanto material como energéticamente, tanto corporal como espiritualmente.

Los símbolos nos hablan de estas conjunciones, de estas constelaciones de los distintos órdenes de la realidad, hibridando lo humano con lo animal, lo vegetal, lo mineral, lo astral, conformando, así, constelaciones que dan sentido simbólico a todo; con otras palabras: ordenan la realidad semióticamente y la Fiesta las pone en movimiento.

¿Cómo se manifiestan las energías de la Conjunción en nuestro nivel de realidad?

Hemos sugerido que como un ritual hierogámico, en la medida en que el bíos sagrado se junta con los bíoi profanos o la zoé. La unión hierogámica puede darse también entre un bíos inmanente y otro trascendente, es decir, como encarnación de un espíritu en un cuerpo, en cuyo caso puede sustituir, solaparse, intercambiarse con una encarnación sacrificial. El espíritu de la víctima sacrificial puede encarnarse hierogámicamente, en cuyo caso la vinculación entre sacrificio y hierogamia se hace más evidente todavía. Pensemos en el misterio de la Eucaristía católica.

Entre estas dos polaridades se da una asimetría constitutiva. La primera se asocia, como dijimos, a la violencia y a la amenaza, mientras que la segunda lo hace al goce y al deseo. Ahora bien, estas energías excesivas son, justamente, la fuente del Poder, pero en dos sentidos distintos y opuestos. Son como dos fuerzas que actúan en sentido contrario y que dan lugar a diferentes situaciones en las que, uno u otro, de los polos, puede ser el dominante. El vector que atraviesa estos dos polos expresa, igualmente, el grado de libertad o de represión que existe en una determinada situación.

En función de los equilibrios de fuerzas (que conforman lo social, lo político, lo moral) el Algoritmo hierogámico-sacrificial operaría, ora sacrificial ora hierogámicamente. Sin olvidar que los dos polos están siempre co-implicados. Lo hierogámico tiende hacia la liberación de los flujos de deseo, a su transformación en goce. Lo sacrificial tiende a la liberación de los flujos de amenaza, a su transformación en violencia.

Pero he aquí que lo dicho es también relativo. En la práctica, ambos polos son igualmente vertiginosos, ambos atrapan a los bioi en la vorágine toroidal, lo que implica que no se trata de una dicotomía, sino de una bipolaridad en la que los dos polos están siempre implícitos y coimplicados. Como en el modelo subatómico, lo hierogámico es también sacrificial y lo sacrificial, hierogámico, como en el coito y en el tinku.

Observemos cómo tras la Disjunción: el acto sacrificial, se produce la Conjunción, en forma de banquete ritual, pero también de libación, incineración, enterramiento… es decir reintegración del bíoi sagrado a la tierra, al agua, al fuego, al aire. La disjunción neutraliza lo maléfico o lo excesivamente benéfico, y la conjunción reintegra la parte que haya podido separarse o transmutarse. El Algoritmo sacrificial produce una trasmutación del bíos sagrado, un cambio de lo maléfico a lo benéfico, por así decir y/o viceversa. En la conjunción, el acto central es el banquete en el que el bíos sagrado se encarna en la zoé como ingesta de su cuerpo y bebida de su sangre.

Intermediación monoteísta

Ojo a esta palabra: inter-media-ción. Es la clave de bóveda del sistema patriarcal monoteísta. Sin este artilugio: intermediación, no hay burocracias, ni terrestres ni celestes. No hay Estado, ni Reino de los  Cielos. Nos las habemos con la Función Partícula: masa. Este es el sello de lo político en Occidente. Este es el estómago del arte de lo Político. Aquí se deglute y digiere. Solve et coagula.

Esto, justamente, es lo que no entienden los animistas,  pues su sistema político: el Ayllu, estriba,  justamente, en lo contrario: es interactivo, multidimensional: waka / sallqa / jaqi; acaece ritualmente, siempre en tiempo real. Nos las habemos con la Función onda: energía. No hay intermediaciones. Hay interacción. Este es el Quid pro quo boliviano, químicamente puro. Si no entendemos esto, nunca podremos darnos una Constitución y Programas de gobierno, a nuestra medida. Seguiremos plagiando y chipando las cosas.

En cambio, en Occidente, la vaina está clara: sin intermediaciones no hay Dios, ni Estado, ni Dinero. No hay nada.

Cuando los animistas están en función de gobierno (nacional, departamental, municipal) de la Forma Estado, precisan de monoteístas, que sí saben de intermediaciones: los denigrados “entornos blancoides” de los Jefes indios. Como este  diseño político exige Resultados de gestión, (para eso diseñamos la Forma FIS: una máquina para producir obras públicas, en serie) los animistas los van a precisar hasta que la Forma Escuela les haya extirpado totalmente el software animista y les haya introyectado el software monoteísta. Algo que, espero, no llegue a consumarse y que, por cierto, está bien lejos. Afortunadamente.

Cuando los animistas, aterrizan en la Forma Estado, se la pasan muyteando, haciendo rituales y tejiendo relaciones. No gestión. Algo que yo entiendo perfectamente, pues la Forma Estado, en realidad, no es necesaria para vivir bien. Esto, hace milenios que lo saben los anarquistas. La farsa, empero, ¿debe continuar? Si debe continuar, entonces, de momento ¿no sería inteligente dosificar ambos ingredientes, según tiempo-espacios diferenciados?

Mi sugerencia a pijchar lentamente es la siguiente: Para el nivel central: Forma Estado y Dinero. Para el nivel intermedio: una combinación de Forma Estado y Forma Ayllu, más Dinero y Monedas complementarias regionales. Para el nivel local: Forma Ayllu, más Ayni y monedas complementarias locales[19]. Así nos blindaríamos del colapso político y financiero global en curso. Hay que ponerse a salvo en otra frecuencia de onda. Esto es lo inteligente y posible, ahora.

Este es el Quid pro Quo político más importante que tenemos que conversar, pues es el Tabú político por antonomasia de Bolivia. Si no nos aclaramos esto, no atinaremos con la Forma Política adecuada para nosotros. Seguiremos plagiando y remedando recetas obsoletas, incluso en los países de origen. Para decirlo rápido: ahorita mismo, Trump se está cargando, fulminante y vertiginosamente, todo el modelo político de la modernidad. ¿Tiene sentido que sigamos empeñándonos en remedar ese diseño? Estamos viviendo un momento histórico de Barbarie explícita. El Macho Alfa Global puede asesinar un general iraní en Irak, desde un Drone de 64 mdd, y todos: TODOS, ¡acojonaditos!. Lo mismo vuelve a pasar, ahora, con el Encierro global. Algo ya no va más.

No intermediación animista

En el Animismo hay también bíoi sagrados, pero éstos son señalados por las fuerzas de la naturaleza, el Rayo, por ejemplo, e intermedian  no con los hombres, sino con la naturaleza, de la cual el ser humano es parte. Este simple diseño, disipa toda posible concentración de poder. En el Ayllu no hay burocracias[20] sino Cargos rotativos anuales de Jaqi-s: parejas.

Éste: el Ayllu, pienso, es un gran diseño, si tenemos que pensar la realidad y, por tanto, lo Político, en términos de energía, como pedía Nicola Tesla. El mundo está pasando de masa a energía. En esto estriba el Cambio tecnológico en curso y, ¡oh maravilla/pesadilla!, el Litio, para ello, es fundamental, como para la anterior revolución tecnológica lo fuera el Petróleo.

Los materiales para pensar este nuevo diseño, que el mundo precisa, están a nuestra mano. Los últimos años nos han proveído abundantes casos de estudio; pero, en realidad, desde la Participación Popular, tenemos información valiosísima, a detalle, para desaprender y reaprender las relaciones entre Monoteísmo y Animismo, es decir, entre Onda y Partícula, Forma Estado y Forma Ayllu, en el nivel de lo Político. Tarea que, este texto marrano/cholo, desearía impulsar y animar.

Lo digno de pensarse, empero, es lo siguiente: ¿Por qué todos se hacen los locos? ¿Por qué nadie quiere o se atreve a tocar el tema, ni en privado? ¿Tan profundo es? ¿Por qué los animistas, metidos en la Forma Estado, vacilan como guanacos en trapecio? Lo mismo, vale al revés: los monoteístas metidos en la Forma Ayllu ¿Se imaginan a Goni haciendo de Jilacata o Marani?[21] ¡Sería patético! Esto es lo digno de pensarse.

Les propongo pensar y conversar, la siguiente paradoja: Evo, formalmente, es el Presidente del Estado pero, informalmente, opera como un Jefe Indio; es decir, opera como un Gran Donador, en la lógica de la Reciprocidad: Entrega de Obras, pero prefiere el Capitalismo: ha terminado imponiendo a Arce Catacora, en lugar de a Choquehuanca; el portavoz del Vivir Bien, que va de candidato a Vicepresidente. Se inclina, de corazón, ante la Pachamama, pero incendia, pensando en el lucro, la Chiquitania. La solución a esta aporía no es maniquea: “O lo uno o lo otro”; sino contradictoria: “Tanto lo uno como lo otro”. Sólo así el debate político boliviano podrá dar un salto cuántico que estriba en la dosificación de ingredientes, ora alquímicamente: tradición occidental, ora pidiendo licencia, ritualmente: tradición indígena. Pienso que ésta, para un país de cholos y marranos, es la Clave de bóveda de su sistema político. Esto sería bien boliviano; no un plagio más. La Obra de Carlos Castaneda, en especial Relatos de Poder, debe sustituir La  Constitución de los atenienses, donde Aristóteles utiliza la palabra Politeia: Πολιτεία. Después de Einstein y Tesla, quedó obsoleto.

El sistema operativo

Toda comunidad humana es cultural. Eso significa que está situada en algún punto intermedio de esta polaridad: violencia/amenaza y goce/deseo. El Goce y la Violencia son polos que siempre están implícitos, co-implicados, y que definen una bipolaridad entre las cuales se mueve toda civilización. Así, todas las culturas son, por definición, represoras/liberadoras, pero unas más/menos que las otras. Y, en correspondencia con esto, en las civilizaciones menos represoras tenderán a prevalecer el Goce y el Deseo, esto es, el Algoritmo hierogámico, como dispositivo de cohesión social: nos encontraríamos entonces en una cultura más bien matriarcal. Mientras que en las más represoras, serán la Violencia y la Amenaza, esto es, el Algoritmo sacrificial, lo que prime: estaríamos en una cultura más bien patriarcal.

Esto nos lleva a que las distintas civilizaciones también oscilan entre los polos del Matriarcado y el Patriarcado. Ambas energías circulan por ambos circuitos, pero una de ellas, ora el Padre ora la Madre, hacen masa crítica y, a saber, no de un manera fija, sino relativa y contextualmente.

Lo que alimenta la maquinaria cultural es un  exceso de energías libidinoso-agresivas naturales que la cultura no puede contener, domesticar, asimilar, pero que, paradójicamente, la maquinaria cultural mimetiza, emula, reproduce, sólo que produciendo un salto de nivel en el que lo biológico se transmuta en lo cultural. Este exceso biológico o exceso de inmanencia es el que, paradójicamente, hace posible que surjan y adquieran sentido una serie de nociones como alma, espíritu o inmortalidad: un exceso de trascendencia.

La Máquina hierogámico-sacrificial, que articula los distintos holones del Holograma en el que somos (el mundo es como un videojuego) es una suerte de invariante, una  constante: un Algoritmo que se dispara automáticamente cuando las instrucciones prescritas (Deseo-Goce / Amenaza-Violencia) se encuentran y se repiten con independencia de las particularidades de los distintos eslabones de la Gran Cadena del Ser. Así funciona el sistema, desde el nivel subatómico hasta el nivel astrofísico.

La máquina natural/cultural

Hablamos de máquina natural, porque opera de manera aparentemente autónoma, con cierta regularidad cíclica, oscilante, e incorpora elementos culturales al funcionamiento de la máquina natural, convirtiéndose entonces en dispositivo también social, compuesta por seres vivos. Cataliza las situaciones caóticas produciendo la regeneración, el reequilibrio, la catarsis, la liberación de las energías excedentarias.

Es universal en el sentido de que está siempre implícita en todo fenómeno natural-cultural. Su mecánica puede ser más o menos real, ficticia, ritualizada, sublimada, enmascarada, pero siempre está latente, lista para hacerse presente. Opera según una mecánica cíclica, ondulatoria y a distintas escalas y velocidades.

En la Máquina hierogámico-sacrificial, la conjunción y la disjunción se alternan y complementan. Lo que ha hecho Occidente es dar prevalencia a la Disjunción, a lo sacrificial. Lo que hace el Animismo es buscar el equilibrio de ambas: el tinku de Disjunción y Conjunción. Lo que hay que buscar, ahora, es que en ese equilibrio, de tipo animista, haga masa crítica la Conjunción: lo hierogámico: las energías del amor. Este sería el software deseable de la nueva andadura civilizatoria que estamos emprendiendo.

El funcionamiento del Algoritmo hierogámico-sacrificial lo podemos ver en la mecánica del corazón, en el vaivén alternativo e ininterrumpido de sístole y diástole, que hace posible que los flujos de sangre entren y salgan del corazón. Sístole y diástole, caos y orden, bíos y zoé, sacrificio y hierogamia. Como este Dispositivo está sometido a distintas fuerzas, consiste precisamente en este encuentro de fuerzas y, por tanto, no es lineal; cuenta con diversas entradas y salidas de masa y energía, de materia y espíritu: de información.

De hecho, uno de sus cometidos fundamentales es establecer estas distinciones: diferenciar entre lo natural y lo cultural, lo animal y lo humano, lo humano y lo divino; establecer jerarquías entre las distintas formas de vida y niveles de realidad. Lo que llamamos Holoarquía precisamente. Ahora bien, el Algoritmo es un Dispositivo de separación/juntura, de establecimiento de las diferencias/similitudes, de líneas de demarcación y clasificación: separa/junta, excluye/incluye. Designa como sagrado a lo separado y como profano a lo contiguo.

Parece ser, pues, que, para conocer y vivir bien, hay que separar y, luego, volver a juntar; después: buscar el punto de equilibrio: el Tercero Incluido, el Camino del Medio: la Senda Dorada: Maimónides.

Gracias a la víctima sacrificial, puede existir, en el nivel de lo social, algo así como un dentro y un afuera, un antes y un después. Esta víctima se presenta como mala y como buena, como pacífica y violenta, como vida que hace morir y como muerte que asegura la vida. La mística marrana carmelitana, lo ha dicho casi todo a este respecto[22].

El Algoritmo produce la percepción de los planos de la animalidad, la humanidad y la divinidad. La separación entre animalidad, humanidad y divinidad supone dos fases complementarias; por un lado, el descenso de la humanidad a la animalidad o catábasis y, por otro lado, el ascenso de la humanidad a la divinidad o anábasis.

¿A qué llamamos, por ventura, Humanidad?

Así, pues, podríamos decir que lo que llamamos Humanidad es un producto del Algoritmo hierogámico-sacrificial: de la conjunción y disjunción de animalidad y humanidad, humanidad y divinidad, animalidad y divinidad. Podríamos postular que desde que el hombre es hombre, es decir, desde que practica sacrificios y hierogamias, existe la Humanidad y ésta se encuentra tensada, delimitada y contenida en esa polaridad; entre la pura inmanencia y la pura trascendencia. Extremos que no son más que dos caras de la misma moneda y que no tienen sentido el uno sin el otro. Funciona como un Toroide, en realidad. Toroide dentro de toroides.

El Tinku hierogámico-sacrificial establece las separaciones materiales y las designaciones espirituales; produce y reproduce la sociedad material que nos rodea, pero asimismo la sociedad imaginaria que nos envuelve. De este dispositivo dimanan también las palabras y los significados, los rituales y las ceremonias, la inmanencia y la trascendencia.

El Tinku hierogámico-sacrificial, produce Terceros Incluidos: tríadas o ternarios, compuestos por dos personas de un sexo y una persona del sexo contrario. En general suelen integrarlas numerosas tríadas de diverso signo, superpuestas o formando mallas de geometría triangular, más o menos permanentes, más o menos horizontales o verticales, más o menos inmanentes o trascendentes.

Este es, pues, el sistema operativo del enfoque biocultural de la Biosofía del Vivir Bien.

La trampa occidental

Ahora bien, si abrimos el zoom un poco más, nos percatamos que, en el Occidente mismo, esta Separación es relativa: vale para el mundo profano, pero no para el mundo sagrado, en el sentido de separado, el mundo de sus élites, donde rige el Continuo hierogamia-sacrificio que es, en realidad, la fuente invisible de donde dimana el Poder en Occidente, pues está basado en energías fuertes. A esto llamo Monoteísmo abrahámico sacrificial.

La diferencia con el Animismo, que opera, también por diseño, en el Continuo Onda-Partícula: hierogamia-sacrificio, es que éste disipa las energías, producidas por este Dispositivo, en su entorno biosférico: cables que descargan a tierra la energía excedentaria.

Esto que acabo de enunciar es muy importante que se entienda, para comprender la civilización occidental y, en especial, lo Político: el poder.

¿De dónde dimana el poder en Occidente? Este saber, en Occidente, se ha conservado y se transmite, no en la Academia o los Seminarios, sino en las Escuelas de Misterios, de Baalbeck, Osiris, Eleusis, hasta los Think tanks anglosajones y los Servicios de Inteligencia actuales, como, por ejemplo, el Instituto Tavistock. Indaguen esa veta en internet.

Lo que, en el Pusini, es el cuadrante inferior derecho: la Inteligencia racional, es el lugar de lo Político. La Forma Estado y sus sub holones: Gobernación y Municipio, se ubican aquí. De ahí su unilateralidad. Las otras tres dimensiones, que llamo Inteligencias, están reprimidas, por diseño, y solo los Programadores de Software político (lo que quisiera que ustedes llegasen a ser) las tienen en cuenta. Pero he aquí que ese conocimiento sagrado: oculto, no pasa a los operadores y técnicos de mantenimiento del sistema político y menos aún a los ciudadanos-fieles que tienen, sólo, que creer y obedecer, ciegamente, y dejarse marear la perdiz, periódicamente, en las liturgias electorales, previstas para rebobinar la máquina hierogámica-sacrificial. Cuarta Maña de la política. Darte la ilusión de que eres libre y eliges…digamos: entre Coca Cola y Pepsi Cola.Entre izquierdas y derechas.

Ahora bien, ¿cuál es el punto? Que el Monoteísmo abrahámico va intentar separar, disociar, ambas magnitudes y privilegiar y absolutizar la función Partícula, las fuerzas de la separación: diabollein: y tratar de extirpar la función Onda, las fuerzas de la conjunción, la idolatría: symballein.

Pero como ello no se puede (y, aquí, empieza la aberración) va a desarrollar una operación peligrosa, cuyas consecuencias (el Diluvio 2.0 en curso y el Tsunami Trump 1.0) estamos experimentando ahora.

Así, pues, lo que va a hacer el Monoteísmo es, por un lado, hacia afuera, reprimir y ocultar las energías bosónicas de la conjunción, para que aparezca la ilusión masculina de lo homogéneo y lo único, de donde dimanarán las nociones fundamentalistas de identidad, verdad, no contradicción, etcétera. Y, por el otro lado, hacia adentro, en el interior del Sancta sanctorum, los sacerdotes e iniciados: políticos, banqueros, stars, influyentes… van a llevar a cabo rituales hierogámicos: conjunción de lo masculino y femenino, en dosis recargadas, y rituales sacrificiales: holocaustos de seres vivos, también en dosis recargadas. A esto, Georges Bataille, en su sociología sagrada, le llamó la Parte maldita. GB. Sigue esa pista.

Lo prohibido hacia afuera (no matar, no robar, no fornicar…), va a ser la regla, para los fieles/ciudadanos. Hacia adentro (sacrificios humanos, guerras, especulación financiera, prostitución sagrada…) va a ser la regla para las elites. Esto implica, desde el punto de vista lógico, activar, hacia afuera: el Principio de identidad y no contradicción y, hacia adentro, activar el Principio contradictorio.

Es clave entender esto, a estas alturas del partido.

La diferencia amerindia es que, en todo, rige el principio contradictorio y la complementariedad de opuestos: “Tanto lo uno como lo otro” y el Tercero incluido. No han hecho la separación sagrado/profano: “O lo uno o lo otro” y, por tanto, la disipación de energías y no la acumulación, es lo que rige el sistema. Esto último es decisivo para entender la civilización animista. Ahora bien, puesto que relativiza, se torna vulnerable frente al monoteísmo, que no relativiza. Este es otro gran punto para pijchar lentamente.

La acumulación y concentración es el origen del Poder en Occidente que es religioso, hacia dentro, y político, hacia fuera. Ambos, empero, son una sola y misma cosa. La cortina de humo de la secularización no debe ofuscarnos y despistar. Ese es un caramelito para intelectuales progres. Por ello mismo, el Poder occidental se expresa como poder de dominación masculino: energías fermiónicas. El poder de colaboración: las energías bosónicas femeninas han sido minimizadas. Últimamente, por las mismas mujeres investidas de Poder: Golda Meir, Thatcher, Bachelet, Hillary, Lagarde, Merkel, von der Leyen. El feminismo no puede ser sino patriarcal. Todas ellas han sacrificado y sacrifican, en Modo macho.

En cambio, en el modelo amerindio, el equivalente homeomórfico del Poder: Mita, neutraliza ambas energías, al afirmarlas/negarlas, a ambas, contradictoriamente, mediante la tecnología del Tinku en una dimensión no separada del universo. No hay lugar para la acumulación; las energías deben fluir, disiparse. El “poder amerindio”: un no-poder político, es un dispositivo de facilitación de las relaciones comunitarias, multidimensionales: con los ayllu-s de los Waka: la memoria tecnológica, de la Sallqa: lo genésico no domesticado, y de los Jaqi: la diarquía básica, modulada ritualmente, y en el que todos deben pasar turno, con su pareja, para servir a la comunidad. No dinero sino prestigio es la recompensa que reciben como pago a sus desvelos.

En este mundo, el del Animismo amerindio, no hay una separación entre sagrado y profano, trascendencia e inmanencia: onda y partícula, sujeto y objeto…; no aplica la noción de dios, por ejemplo y, por tanto, la dosificación de la complementariedad de las energías opuestas, es metabolizable por los actores del ritual; es decir, no se produce un shock (como en el modelo monoteísta, donde el trauma: el impacto, es un objetivo de diseño para el control emocional, social y mental de los fieles[23]), ni una escalada unilateral hasta la Endlösung, por ejemplo, como en el modelo occidental.

El modelo amerindio, como dijimos y lo vuelvo a repetir, es el Coito, Tinku, donde refulge lo contradictorio: es imposible saber dónde y cuándo empiezan y terminan el placer y el dolor y, un detalle importante, este dispositivo se da a cielo abierto y ordena toda la sociedad: desde chacha-warmi=jaqi, pasando por urin-aram=ayllu, hasta wira-qocha=el andrógino de Koricancha.

El modelo animista es energético, basado en la Paridad complementaria y no precisa de Templos y Especialistas. Busca la Disipación de las energías; no su Acumulación como el Monoteísmo/Capitalismo; busca la homeostasis del sistema, no la exacerbación de una sola energía. No es patógeno ni tóxico, por diseño. Cataliza y metaboliza, solve et coagula, sístole y diástole… en dosis homeopáticas.Esta es la estructura del Vivir Bien.

El modelo monoteísta, en cambio, es dualista: exotéricamente es lógico, abstracto y va por escrito: busca la univocidad; esotéricamente es energético, agonístico y, a  saber, reloaded sólo para la elite de iniciados y, por tanto, produce psico- y socio-patas, por diseño. Los que, ahora, precisamente, están mandando el mundo al diantre.

Esta es la elite gobernante que domina desde sus Sancta sanctorum-s. Siempre: templo,  sacerdotes y hieródulas: la Mansión Playboy y, para los demás: televisión. Este design, obviamente, precisa del secreto: Sod, סוֹד, desde el secreto de alcoba, de casting, pasando por el secreto de confesión, los secretos de la Inquisición, hasta el secreto bancario. Siempre: sexo, dinero y sangre, concentrados y en exceso[24], secretamente guardados, por y para las elites iniciadas.

Un Botón de muestra para verificar mi teoría del Algoritmo hierogámico sacrificial

Este diseño conceptual: S&S, puede ser verificado/falsado, actualmente, por ejemplo, en el fractal de los Legionarios de Cristo, una orden religiosa de la iglesia católica, fundada por Marcial Maciel[25], 1920-2008, gran protegido de San Juan Pablo II y Benedicto XVI que, en nada, es menos que los Borgia del Renacimiento o el Mesías Sabbatai Zvi de Esmirna[26].

La prensa resalta, sobre todo, la pederastia de Maciel pero, en realidad, fue un depredador sexual total: sodomita, felado ritualmente por dos monjas, esclavas sexuales que le aliviaban, dizque, de la retención de semen que sufría; polígamo, transgredió el celibato: mantenía una Casa Chica, como dicen los mexicanos, con todo lo que ello implica. Es decir, una parte de su gran Poder religioso, nimbado de sacralidad luciferina (sus víctimas lo sentían mitad santo / mitad demonio), dimanaba de que trasgredió todas las prohibiciones sexuales del Monoteísmo mosaico: No fornicar, No desear a la mujer del prójimo…. con el obsequioso silencio de sus Superiores.

La otra parte de su Poder: el económico, provenía del blanqueo de Dinero proveniente de los carteles mexicanos e italoamericanos de las drogas a través, primero, de Paraísos fiscales en las Bermudas y, luego y a lo grande, mediante el IOR, también llamado Banco Vaticano. Así financió su organización: su Obra: Regnum Christi. Es decir, trasgredió todas las prohibiciones económicas del Monoteísmo mosaico: No robar, No especular…

Un tercer elemento de su Poder: el político, provenía del hecho de que tenía bajo sus órdenes una organización de tipo templario: monjes-soldados: un cuerpo de elite, siempre listo para lo que precisase el Papado. Para tener un cuerpo de elite, eficaz y siempre disponible, de esa naturaleza, es preciso, formalmente, el celibato de sus miembros o el amor homosexual, como conocemos desde Esparta hasta los SS nazis[27]. Las energías orgónicas son zafadas de la red y focalizadas, genitalmente, en el individuo. Esta es la diferencia católica que, con toda lucidez, defiende Benedicto XVI en un reciente libro sobre el celibato, coescrito con el Cardenal Robert Sarah, en la editorial Fayard, París, 2020: Des profondeurs de nos coeurs. El costo emocional y espiritual del celibato es altísimo, para los implicados, pero, para el sistema católico, el beneficio, en términos de Poder organizacional debe ser más alto todavía. De otro modo no podría ser la Transnacional misionera que es, desde hace muchos siglos. Es decir, transgredió la prohibición teológica básica del Monoteísmo mosaico: No levantar en falso el Nombre de Dios, para medrar y someter a los demás[28]. Todas las iglesias hablan y medran en Nombre de Dios. Para eso fue inventado, justamente. Escuchen nomás a curas y pastores.

Los calificativos usados, en los medios de comunicación, para referirse a Maciel, fueron subiendo de tono a medida que se destapaba el Velo de Isis que encubría a este Sumo Sacerdote del Sancta Sanctorum del Monoteísmo patriarcal: simulador, farsante, impostor, hipócrita, vicioso, morfinómano, timador, libertino, obseso sexual, pederasta compulsivo, abusador sexual de menores y mujeres, delincuente, facineroso, criminal, demonio vestido de ángel; acusado, además, de enriquecimiento ilícito, trasiego de influencias religiosas y políticas, falsificación de identidad, mitomanía, et coetera…

Si este modelo (que produce Corrupción, por diseño) no nos gustase, tenemos la otra opción: el modelo holoárquico del Ayllu. Pero, ya se: nos horripila el solo pensarlo. El resto de la humanidad es mantenido en su ignorancia, gracias, justamente, a exitosas campañas de Extirpación de Idolatrías, desde Abraham, hace milenios, hasta la Ayuda al Desarrollo, actual.

Ahora bien, lo digno de pensarse es que, hasta ahora, la humanidad occidental prefiere creer que sólo existe el modelo piramidal del Monoteísmo patriarcal. Por eso, por un lado, todas sus tentativas de zafarse de este yugo: las revueltas, reformas y revoluciones políticas, no hacen sino reforzarlo y, por otro lado, prosigue, con mil sutilezas, la extirpación del Animismo, vendido como sinónimo de atraso, barbarie, salvajismo, primitivismo…

Mi aviso es: hay otro modelo: otro software, otra programación, de las energías bosónicas y fermiónicas, que les invito conocer para rediseñar lo Político. El primer paso, en realidad, el más importante, empieza por buscar el balance, de esas energías, al interior de uno mismo. No precisa de partido, ni de intelectuales, ni de financiamiento. ¿Será que lo simple es difícil? Este, empero, es el primer paso de un camino de mil leguas. Volveré, sobre ello, enseguida.

He puesto el ejemplo de Maciel y sus Legionarios porque, en ellos, se verifica el Diseño de modo químicamente puro; pero he aquí que en todas las Instituciones del Monoteísmo patriarcal: las iglesias, las monarquías, los estados, las fuerzas armadas, las corporaciones… eso se da. Ahora mismo, por ejemplo, el affaire Harvey Weinstein lo está sacando a la luz, para el caso de la industria del espectáculo; Jeffrey Epstein para el caso de los servicios de inteligencia y la seguridad de los Estados; en la ONU, el COI, la FIFA, el BM, el FMI (¿cómo y por qué lincharon mediáticamente a Strauss-Kahn? por ejemplo)… ya empezó el destape sin tapujos.

El Velo de Isis se ha empezado a rasgar. Eso cambia la esencia de lo Político: totalmente. Sigan estas interesantísimas pistas en internet.

La noción de Holoarquía

Esta figura geométrica: el holón, la han conocido todas las civilizaciones matrízticas. La invención del alfabeto la fue eclipsando, en la medida que es una tecnología patriarcal más eficiente para controlar y dominar y activa el lóbulo neuronal izquierdo[29].

En los Andes su presencia es continua: desde Tiwanaku: las bolsas dentro de bolsas, que Carmen Beatriz Loza ha mostrado en un extraordinario texto: Develando Órdenes y Desatando Sentidos. Un Atado de Remedios de la Cultura Tiwanaku[30], pasando por los cuadrados dentro de cuadrados, de la Crónica de Joan Santa Cruz Pachakuti Yamque, hasta un pequeño petroglifo que he descubierto, hace un año,  en una cueva a la entrada de la ciclópea Ciudad de Hitas, en el Parque Nacional Torotoro. El siglo  pasado Arthur Koestler, El espíritu de la máquina, lo ha vuelto a poner en circulación y Ken Wilber le ha dado un nuevo aire, Breve historia de todas las cosas y lo jala en sus siguientes obras. Un ejemplo concreto de este feliz encuentro de ambos sistemas cognitivos.

Repensar lo Político, creativamente, exige un doble movimiento: por un lado, actualizarnos con los nuevos conceptos de la ciencia occidental y, en el mismo hálito, reutilizar los conceptos de las sabidurías indígenas.

Así, pues, esta es la primera herramienta que propongo para repensar lo Político: la noción de holoarquía y, para ello, hay que empezar explicando qué son los Bosones y los Fermiones que, a mi entender, son los que van a resonar holoárquicamente. Par empezar hay que decir que son partículas elementales, es decir, que ya no se pueden dividir más. Todo lo que observamos en el universo está formado por átomos que tienen un núcleo rodeado por electrones. El electrón es una de esas partículas que no se pueden dividir más. Sin embargo, el núcleo de los átomos está formado por protones y neutrones. Y esas partículas sí se pueden dividir más hasta llegar a los quarks que ya no se dividen. Los quarks, junto con los electrones que están fuera del núcleo, son lo que se llama fermiones. Los fermiones son las partículas que forman la materia.

En física fundamental se distingue entre dos tipos de partículas, por un lado, estos fermiones y, por otro, los bosones. Y esa distinción se la hace según una característica muy particular de ellas que se llama spin. El spin es una propiedad física que está relacionada con el momento angular cuántico. Las partículas que componen la materia son los fermiones y tienen un spin de ½. Por otro lado, tenemos los bosones que tienen un spin entero y que son las partículas encargadas de la fuerza, es decir, de que los fermiones interactúen entre sí. Podríamos decir que los bosones son lo que liga a los fermiones.

Dentro de los bosones los hay de varias clases según el tipo de fuerza en la que actúen. Por una parte está el fotón, responsable de la luz, de la interacción electromagnética; las partículas W y Z, que son responsables de la interacción débil, que es la fuerza relacionada con la desintegración nuclear de los átomos; el tercer tipo de bosones son los gluones, responsables de la interacción fuerte, o sea de la interacción entre los quarks que son un tipo de fermiones; y hay un cuarto tipo de bosón que es el bosón de Higgs. Los fotones, partículas W y Z y los gluones tienen spin igual a 1. Pero el bosón de Higgs es el único que tiene spin igual a 0.

Los fermiones también se clasifican en dos tipos, los quarks y los leptones. La primera diferencia entre ellos es su carga eléctrica, los quarks, de los que existen seis tipos, tienen siempre cargas fraccionarias y son los que constituyen, por ejemplo, los protones y neutrones que están dentro del núcleo. Los leptones, de los que hay otros seis tipos, tienen carga eléctrica negativa, o positiva si son antipartículas, o carga 0, lo que es lo mismo que nula. Los electrones tienen carga negativa y sus correspondientes neutrinos no tienen carga. Otra diferencia entre ellos es que los quarks tienen carga de color, lo que quiere decir que sí están afectados por la interacción fuerte, mientras que los leptones no lo están. Bien, baste este pantallazo.

La realidad –dicen estas dos tradiciones– está compuesta de totalidades/parte u holones. Bolsas dentro de bolsas: toroides dentro de toroides. Es decir, algo que es, al mismo tiempo, una totalidad y una parte de otra totalidad mayor. Por ejemplo, un átomo forma parte de una molécula, una molécula de una célula, una célula de un organismo, un organismo de un ecosistema,… un individuo es una totalidad en sí mismo, pero forma parte de una totalidad mayor: la pareja, ésta de una familia, la familia de una parcialidad, la parcialidad de una comunidad, la comunidad de un ayllu, el ayllu de una marka, la marka de una laya, la laya de un mamani, el mamani de un suyu… y así hasta la Vía láctea.

Desde hace dos mil quinientos años hay, en Occidente, un debate entre atomistas y holistas sobre cuál sea la realidad última: si la totalidad o las partes. La ciencia actual ha dirimido el debate con la teoría de los holones: la realidad última no es ni la totalidad ni las partes; es ambas a la vez. Este principio vale para toda la realidad: desde la fisiosfera, pasando por la biosfera, la sociosfera, la psicosfera, hasta la teosfera.

Todos los holones comparten dos impulsos: la tendencia a conservar su totalidad y la tendencia a conservar su parcialidad.Su totalidad quiere decir: conservar su identidad, su autonomía, su propia actividad… es decir, su individualidad; si fracasa en ello, deja de existir. Su parcialidad quiere decir que su existencia depende de su capacidad de adaptación al sistema mayor al que está interconectado. Así, pues, los holones no sólo tienen su propia individualidad, como totalidad, sino que también deben establecer una comunión como parte de una totalidad mayor. Si fracasan en algunas de estas dos funciones simplemente desaparecen.

Estas capacidades pueden ser de dos suertes, por un lado, horizontales: si un holón no es capaz de conservar su integridad y sus relaciones, se disgrega en los subholones que lo componen: las células en moléculas, éstas en átomos y así indefinidamente; a esto se llama autodisolución; por otro lado, verticales, si se incrementa la complejidad, se llama a este proceso auto trascendencia. Ahora bien, el proceso continuo de auto trascendencia opera a través de discontinuidades, saltos y mutaciones creativas.

Así, pues, una de las pautas comunes que asume la evolución, en todos los dominios de la vida, es la presencia de discontinuidades en el proceso evolutivo que impiden que la mente sea reducida a la vida y que la vida sea reducida a la materia. En este sentido, el proceso de desarrollo mantiene unificado al cosmos, convirtiéndolo, justamente, en uni-verso.

Los holones emergen. Si la evolución es un proceso de auto trascendencia, en este proceso creativo aparecen nuevas entidades, se despliegan nuevas pautas y brotan nuevos holones. Ese proceso unifica lo fragmentado y globaliza los meros agregados. El cosmos se despliega en saltos cuánticos de emergencia creativa. Por esta razón un determinado nivel no puede ser reducido a sus sub holones inferiores, porque la totalidad de un holón no se halla en ninguna de sus partes.

Si tenemos en cuenta este punto, acabaremos con el reduccionismo que ha contaminado a la ciencia occidental, desde sus mismos orígenes. Gracias a las ciencias sistémicas, la mente científica está comenzando a comprender que vivimos en un universo de emergencia creativa de nuevos holones.

Los holones emergen holo árquicamente. Holoarquía es el término para referirse a las jerarquías naturales. Una jerarquía natural es simplemente un orden de totalidad creciente; por ejemplo, partículas, átomos, células, organismos o: letras, palabras, frases, oraciones, párrafos en el que la totalidad de un determinado nivel de la jerarquía forma parte de la totalidad propia del siguiente nivel. En otras palabras, las jerarquías normales están compuestas de holones y es por ello que, según Koestler, podríamos perfectamente llamar “holoarquía” a la “jerarquía”, algo absolutamente adecuado, porque casi todos los procesos de crecimiento –desde la materia hasta la vida y desde ésta hasta la mente– discurren, a través de holo arquías naturales, hacia órdenes de totalidad creciente.

Ken Wilber ha recopilado veinte principios de los holones. Los retransmito:

1. La realidad no se compone de cosas o de procesos sino de holones (partes/todos). 2. Los holones muestran auto-preservación. 3. Los holones muestran auto-adaptación. 4. Los holones muestran auto-trascendencia. 5. Los holones muestran auto-disolución. 6. Los holones emergen. 7. Los holones emergen holárquicamente. 8. Cada holón emergente trasciende e incluye a su predecesor. 9. El holón inferior o menos inclusivo establece las posibilidades del superior o más inclusivo. El holón superior o más inclusivo establece las probabilidades del inferior o menos inclusivo. 10. El número de niveles que componen a una jerarquía determinan si puede ser considerada como «superficial» o «profunda». El número de holones en un nivel determina su extensión o «alcance». 11. Cada nivel sucesivo de evolución produce mayor profundidad y menor extensión o alcance. 12. Al destruir un holón primero se destruirán todos los holones, superiores al mismo, y no los inferiores. 13.  Las holarquías co-evolucionan. 14. Lo micro está en intercambio relacional con lo macro en todos los niveles de su profundidad. 15. La evolución tiene direccionalidad. 16. La evolución se mueve hacia un aumento de la complejidad. 17. La evolución se mueve hacia un aumento de la diferenciación/integración. 18. La evolución se mueve hacia un aumento de la organización/estructuración. 19. La evolución se mueve hacia un aumento de la autonomía relativa. 20.  La evolución se mueve hacia un aumento del telos.  

La ley 777:El Sistema de Planificación Integral del Estado, 2016, que tiene como horizonte “la construcción del Vivir Bien a través del desarrollo integral en armonía con la Madre Tierra, integrando las dimensiones sociales, culturales, políticas, económicas, ecológicas y afectivas, en el encuentro armonioso y metabólico entre el conjunto de seres, componentes y recursos de la Madre Tierra para Vivir Bien con uno mismo, con los demás y con la naturaleza”, no está pudiendo ser plasmado en los PTDI: Planes Territoriales de Desarrollo Integral, porque los operadores y servidores públicos siguen anclados en el viejo paradigma newtoniano, mecanicista, sectorial y positivista.

El Sistema de Planificación Integral del Estado promueve “la gestión de los sistemas de vida de la Madre Tierra, para alcanzar de forma simultánea y complementaria sistemas productivos sustentables, erradicación de la extrema pobreza y protección y conservación de las funciones ambientales y los componentes de la Madre Tierra, en diferentes ámbitos territoriales y jurisdiccionales según corresponda”. Un desafío fascinante.

Para operativizar esta política pública de vanguardia, precisamos, ahora, por un lado, volver sobre nuestros pasos: Tiwanaku, Cusco: Simbiosis interzonal, Control vertical de pisos ecológicos, círculos dentro de círculos mayores y avanzar con sus modelaciones actuales: holoarquía, geometría fractal, resonancias mórficas que es, lo de antes, solo que en otro bucle de complejidad.

La noción de Toroide

En 1976, John Earls e Irene Silverblatt[31], en una ponencia al congreso mundial de Americanistas: La realidad física y social en la cosmología andina, mostraron el siguiente diagrama:

para ilustrar cómo los incas difundieron una imagen del mundo caracterizada por la circulación toroidal de las aguas, teniendo al Lago Titicaca como el receptáculo/canal sobre el cual gira y fluye el mundo, expandiéndose y contrayéndose, según sentidos contrarios, simultáneamente. Los profanos no conocíamos todavía la figura del Toroide y Earls y Silverblatt utilizaron el modelo de la Botella de Klein, para ilustrar la visión andina de cómo funciona el universo.

Esta comprensión energética del universo, vuelve a salir en los trabajos interdisciplinarios de síntesis que se están llevando a cabo en la actualidad. La ciencia, en efecto, lleva tiempo tratando de unificar las cuatro fuerzas fundamentales: gravedad, nuclear fuerte, nuclear débil y electromagnetismo. Así como relacionar las tres constantes físicas más importantes: velocidad de la luz, gravitación universal y constante de Planck.

Ante tal reto, están emergiendo teorías del Todo que proponen paradigmas disruptivos que nos ayudan a salir de la ontología y el positivismo, que se han tornado insuficientes para explicar el mundo tecnológico en que vivimos. Mi nieto Sebastián, de dos años, maneja el smartphone mejor que yo. Aquí sucede algo inquietantemente maravilloso. Ya hemos entrado a otro mundo y éste debe ser leído desde otro paradigma.

De las muchas explicaciones que circulan, voy a escoger una muy sencilla y que está dirigida a la generación educada en los videojuegos que es, justamente, a la que quisiera llegar. José Alfonso Hernández (éntrese a YouTube) compara el universo con una computadora u ordenador y dice: imaginemos que vivimos dentro de un ordenador, basado en i-fotones: fotones cargados de información, que es topológico y basado en cuerdas vocales: vibración. Esto implica, que hay un Diseñador de este videojuego, cuyo software controla la plataforma sobre la cual corre el programa. Hay un reloj maestro que es el que marca y crea la estructura de vacío, que sería fija, pero flexible y, ésta, correspondería con el campo de Higgs. Sobre dicha estructura, pues, corre el programa del videojuego, siendo los pulsos generados, los bosones de Higgs, o i-fotones, como les llama José Alfonso.

Como todo, en el universo, resuena mórficamente: Rupert Sheldrake. Todo i-fotón virtual, emerge de un proceso similar a cuando pronunciamos, por ejemplo, una sílaba: Om, Cha… Ese pulso de aire crea dos i-fotones: un fotón y un anti-fotón, al modo que ya conocemos del quantum: materia y anti-materia. Esto, físicamente, significa que se crean dos vórtices, uno que gira en un sentido: fotón y, otro, en el otro  sentido, anti-fotón. Además, el pulso físico que vibra sobre el aire, también lleva la información que nuestro cerebro ha creado. Este funcionamiento nos lleva a tener que conocer cómo operan los vórtices para, de este modo, entender el diseño. Para ello se usan las llamadas Vortex Based Mathematics, de Nicola Tesla. Si esos i-fotones creados, se anidan en estructuras estables, se da lugar a lo que se llama materia.

Las estructuras fundamentales, creadas a partir del vórtice, es lo que, justamente, se llaman Toroides; los hay simples y dobles, ya conocidos por la ciencia, como partículas y átomos, pero dichos Toroides tendrían la particularidad de regenerar la información de los i-fotones que lo crean, y esto se hace, exclusivamente, por la particularidad topológica de dichas estructuras. Esto hace que, no solo no se pierda información en el universo, sino que ésta se esté regenerando constantemente. El videojuego gestiona la información del mismo modo a como lo hace nuestro cerebro. Es importante, asimismo, entender que la forma de generar esos i-fotones, es semejante a la de cómo vibran nuestras cuerdas vocales. Por eso, la estructura del vacío, está formado por vórtices concatenados que funcionan del mismo modo a como reverberan nuestras cuerdas vocales. Así que, podríamos decir que el conocido Campo de Higgs, sería un campo de cuerdas vocales (Teoría de cuerdas) del tamaño de Planck, y los Bosones de Higgs serían los pulsos emitidos.

Ahora bien, esta energía toroidal se encuentra, de forma natural, por doquier en el universo: de un átomo a una galaxia, convirtiéndose el Toroide en un patrón primario de energía dinámica. La energía fluye a través de un extremo, circula alrededor del centro y sale por el otro lado. Nosotros mismos, sin necesidad de microscopios o telescopios, podemos observarlos: en las semillas de las flores del Girasol, por ejemplo; la concha de un caracol, árboles, animales, humanos, huracanes, planetas, soles, galaxias e incluso el cosmos, como un todo.

En la figura del Toroide encontramos reunidos todos los principios de la geometría, a saber: el Vacío cuántico, la ley de Unidad, la ley de Dualidad, el Principio de auto-sustentación, los tres números pilares matemáticos: Phi, Pi, Euler.

Si aplicáramos la teoría toroidal a la dimensión psicológica, por ejemplo, veríamos cómo en ella   convergen, simultáneamente, los pares de opuestos aparentemente irreconciliables: yin y yang, blanco y negro, chacha y warmi. Su geometría deviene del Gran Vacío que es literalmente un punto en el espacio. De esta imagen se desprenden, simultáneamente, espirales que se desdoblan hacia «abajo» y hacia «arriba» para dar la vuelta sobre sí mismas y encontrarse en una Zona Horizonte, en lo más alejado del punto de inicio.

Esta imagen nos muestra también el principio del Uno, el principio de Inter conectividad de todas las formas, de todas las estructuras. Cuando se le relaciona con los 5 sólidos platónicos, forma la Tabla periódica de los elementos. Ya mencionamos que el Toroide tiene dos vórtices. Reparemos lo siguiente: un vórtice va del centro hacia fuera, en el sentido de las manecillas del reloj y otro vértice va del centro hacia fuera, en el sentido contrario a las manecillas del reloj; como el Reloj Choquehuanca de la Plaza Murillo. Estos pares de opuestos van configurando la noción psicológica de interacción con la realidad, por medio del cual el ser humano entra en contacto con la materia o sale del contacto con ella. Como sabemos, por Sigl y Mendoza: No se baila así nomás, este es el sentido de las vueltas y revueltas en sentido contrario de las danzas andinas. En el mismo Toroide, un giro implota la realidad y el giro contrario la explota. La Implosión lleva lo exterior, lo más alejado de nosotros mismos, dentro de nosotros mismo, hacia el Punto cero o Gran Vacío de cada Toroide que es preciso pensar como grávido.

El Toroide tridimensional expresa una forma de auto organización, abierta hacia su propio campo de energía, como un Holón en permanente circulación y movimiento, relacionando su interioridad y exterioridad, así como niveles de realidad, más internos con los más externos. Los niveles jerárquicos vendrían a ser discontinuidades con su propio centro de organización. En tanto Toroides, todos los holones son sistemas abiertos hacia niveles de energía, tanto internos como externos, respecto de su eje o agujero negro. T.E. Bearden[32] escribe: «Los toroides y los solenoides largos poseen la característica de confinar el campo B (potencial rizado) y retenerlo adentro» Esto significa que los Toroides crean una asimetría entre el campo magnético potencial A (no rizado y más fundamental) y el campo B, subsumiendo dentro de sí, en un nivel más interno de la realidad física, quizás correspondiente al Tiempo-Espacio recíproco de frecuencias, propuesto por W.A. Tiller.

El Toroide también aplica en el nivel humano y social. No somos un offshore de la naturaleza. Este campo invisible de energía, nos lo han mostrado en la escuela, en el caso del experimento del imán, cuando se esparcen partículas de hierro sobre un papel colocado encima de él: se forman órdenes toroidales. Otro ejemplo: la frecuencia electromagnética del corazón hace que éste, el corazón, se arquee hacia la espalda formando un campo toroidal interno. El eje de este toroide del corazón se extiende desde la pelvis (el Yesod del árbol sefirótico) hasta la parte superior del cráneo (el Keter cabalístico) y todo el campo es holográfico, lo que significa que la información se puede leer a partir de cada uno y todos los puntos en el Toroide.

Por cierto, el Toroide es muy visible en el sombrero de las mujeres de Amarete, orlado en su ala, por un doble toroide helicoidal que le rodea, dinámicamente; así como lo caótico, se expresa en su lliclla adornada por la flora y fauna de su entorno que su Yo ondulatorio, en sueños, les ha mostrado como el patrón que debe organizar su día a día y su identidad. Los varones de Amarete, por su parte, llevan un chullo de forma cónica; por tanto triangular, en sus ceremonias litúrgicas; en las festividades portan una camisa o saco negro y un pantalón blanco: yin y yang. Los quechuas del Norte de Potosí, colocan en las sienes de sus sombreros unos espejuelos redondos, para recordar que el mundo es una simetría espejada. ¡Chapeau![33]

Este patrón se replica también a nivel de la sociedad y, a fortiori, de lo Político. Tal es el sentido del Algoritmo hierogámico-sacrificial que he presentado al comienzo, para modular lo político desde el nuevo paradigma que está emergiendo.

La idea es disponer de un marco teórico que lo integre todo. En nuestro caso, ahora, que integre a monoteístas y animistas, a arcaicos y contemporáneos, a urbanos y rurales, a occidentales y amerindios, a capitalistas y reciprocitarios; en fin, que valga para entender la mecánica que rige el Kay Pacha[34].

La noción de Crianza

Crianza es traducción de la palabra aymara uywiri, que es un participio activo del verbo uywaña que designa el criar; por tanto, en castellano, diríamos: el que cría, el criador. Aquí, el participio refulge como un sustantivo: menta una entidad abstracta, pero con una connotación de sacralidad y afectividad. En quechua también se emplea el concepto de uyway más con una connotación de cariño que, obviamente, tampoco es extraña al aymara. Ese nexo semántico proviene de la raíz uy- que, Bertonio, vierte así. “Uyaya, vel munaya: Cosa querida y amada”.

Desde un punto de vista connotativo el sentido se amplía. Volvamos al Diccionario de Bertonio: “Vyhuatha, vel hilachatha: Crías, los hijos y cualesquiera animales”. “Vyhua, la cría así”. “Vyhuachatha, Criar así”. Vyhuasitha amplía el significado a todas las cosas criadas.El sentido, pues, se abre hacia todo lo vivo, que incluye a los cerros, las plantas, los animales, los humanos y también el mundo extra humano.

Así, pues, uywaña / uywiri menta una disposición del ser, hacia el otro, que activa las energías bosónicas de la empatía, el cariño, la protección, el cuidado y, a saber, como una afectividad sentida como algo muy íntimo y profundo, del cual dimana la crianza de la vida del mundo, entendida de modo transitivo e intransitivo, por tanto, como criar y dejarse criar[35].

Uywaña incluye además de los humanos: el Ayllu de los Jaqi, también a los seres del Ayllu de la Sallq’a, es decir, a ese universo paralelo, ese campo unificado no domesticado, salvaje, silvestre, no cultivado por el hombre, pero que interactúa con él. También involucra a los seres del Ayllu de los Wak’a, que es un lugar de poder, una sinapsis de intensidad energética fuera de lo habitual, donde el ser humano conecta con el universo paralelo de los Ancestros, cuya energía genésica interactúa con los otros ayllus, para reproducir la crianza de la vida. Por eso es que uywaña va mucho más allá de una visión meramente antropocéntrica e incluye un sofisticado ritual de producción y una ética de responsabilidad por la continuidad y el equilibrio del orden cósmico mismo.

En tiempos de cambio de paradigma y de crisis climática, ésta noción animista, debería complementar y relativizar la definición monoteísta del ser humano occidental, como Homo faber, laborans, viator, ludens … Tiene más sentido y ventajas concretas entendernos como Homo mayeuticus: Hombre partero que da a luz, que cría y se deja criar, por lo criado. El feedback sería perfecto.

En los Andes es común escuchar decir, por ejemplo, a los criadores de alpacas que «Así como nosotros criamos a las alpacas, ellas nos crían a nosotros». A los mineros: “La mina come de nosotros y nosotros comemos de la mina”. La misma relación acaece con las plantas. Esto significa que el animista mora en un mundo vivo y vivificante. Todo cuanto aquí existe está vivo: los hombres, los animales, las plantas, los suelos, las aguas, los vientos, los cerros, los valles y todo lo demás. Mora, pues, en un mundo sensitivo y emotivo. Aquí se vivencia, como dicen los amigos del PRATEC, la equivalencia de lo diverso, porque aquí el mosquito, el sapo, la helada, el granizo, el zorro, el hombre, el cerro, el río, las estrellas…son imprescindibles en la delicada crianza de la armonía de la exuberante diversidad de los ecosistemas andinos.

El mundo andino es un mundo de crianza: Eduardo Grillo, en el que cada quien halla el deleite de su vida al criar y al dejarse criar. Un mundo de simbiosis en el que la vida de cada uno facilita la vida de todos; en el que no hay lugar para la separación u oposición de sujeto y objeto, de fines y de medios. No es pensable la idea de un mundo «en sí», diferente del “mundo del nosotros”. El mundo, en efecto, somos nosotros mismos. Lo vuelve recordar la Laudato Si´.

Por eso es que los animistas no quieren transformar al mundo, no son revolucionarios, pues aceptan y aman el mundo tal como es: contradictorio, incierto, caprichoso… Los monoteístas al revés: lo queremos transformar: queremos hacer la revolución, porque no nos identificamos con él, pues, desde el Génesis, hemos sido formateados en la Escisión sujeto/objeto: Ernst Bloch.

La crianza es la vivencia de cada quien en la afirmación incondicional del mundo como un ser vivo y del amor, también incondicional, por todo lo viviente. La crianza es la forma de facilitar el flujo de la vida. La crianza, tanto para quien cría como para quien es criado, es la forma de participar en la Fiesta de la vida. Al ser todos una familia que se cría mutuamente, no hay mucho lugar y ocasión para la experiencia de la soledad y de la orfandad. Priman el amparo, el cuidado y el cariño; también, el humor[36].

No hay jerarquía entre criador y criado. Las papas y los maíces, que se crían en una chacra, crecen junto con las otras plantas que los occidentales llamamos silvestres o mala hierba. La crianza andina no separa lo cultivado, de lo silvestre; la mala, de la buena hierba. Así es común encontrar en las chacras, por ejemplo, la atoq papa, la papa del zorro, que un agrónomo consideraría como una forma silvestre de papa u otro, más ignorante, como mala hierba.

Las plantas tienen también relaciones de parentesco entre sí, aunque este parentesco no se da siempre en el sentido de un progenitor y un hijo, sino también por la presencia de las madres de las que procede un cultivo y que lo posibilitan, por antecederlos en el mismo espacio de crianza. Así, por ejemplo, la mashua es la madre de la oca y ésta de la papa. Una planta particular de papa puede concebirse como la madre de todas aquellas que son sembradas en otras chacras. Proteger a esta planta madre, colocándole una olla invertida encima, durante las heladas, protege también a todas sus “hijas” de las inclemencias del tiempo. Entre los Mosetenes, por ejemplo, no se parte un achachairú con cuchillo, pues el árbol se puede secar. Desde Masaru Emoto, esto ya no nos sorprende.

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Van der Ploeg califica esta tecnología de conversación, del criador con los cultivos y con todos los seres que interactúan: la tierra, la lluvia, el viento, el granizo, el sol, la luna, las estrellas… como un “art de la localité”, un “local knowledge[37].

El animista indígena considera a sus cultivos como seres vivos, con quienes no solo conversa cariñosamente, sino que también les canta y festeja, como podemos observar, sobre todo en su atuendo en las fiestas de la Candelaria y Carnavales. Para el animista andino, no sólo los cultivos son seres vivos, también lo son: la lluvia, el río y el manantial, el canal de riego y el agua, las plagas y los insectos, que le avisan de la helada, la granizada y la lluvia; en fin, todos los fenómenos y seres, que pueblan el ayllu, son seres vivos, merecedores de respeto y cariño. Para que haya buena producción, la comunidad humana, el Ayllu de los Jaqi, tiene que rebosar empatía: energías bosónicas. Si priman la bronca, la tristeza, el enfado, el miedo: la anti-patía; las energías fermiónicas, la producción no será buena. La comida es más deliciosa, si se cocina con humor y alegría.

Todo esto, el andino lo gestiona mediante el mito y el ritual, que son como la gramática y la sintaxis de su discurso tecnológico. La tecnología andina tiene que ver más con software, programación mental, por eso suele ser invisible al profano. Eso es acullico y la ch´alla. En cambio, hasta la aparición de la cibernética, la tecnología occidental privilegió el hardware: de la Quijada con la que Caín  mató a Abel, hasta los misiles con los que los norteamericanos destruyen Bagdad.

La tecnología simbólica andina, en tanto narrativa mítica, le sirve al hombre andino como una herramienta de interpretación de lo que acaece en la chacra; le es útil para descifrar el comportamiento, imprevisible, caprichoso y caótico, de los fenómenos meteorológicos. El código mítico, le sirve para interpretar; le aconseja y le auxilia en su búsqueda de respuestas y, sobre todo, pauta el trato óptimo que debe tener con los seres del entorno, en beneficio de los cultivos que está criando en su chacra.

La tecnología simbólica andina, en tanto modelo ritual de producción, gestiona el manejo de los valores no-materiales de la crianza. Todas las labores que lleva a cabo: la administración del ciclo agrícola, la crianza del ganado, la pesca y la caza; la construcción, los viajes, las labores artesanales, absolutamente todas las actividades productivas, van acompañadas de rituales de producción. Es decir, de formas de cómo interconectar-se con la red cósmica multidimensional. Solo dentro de ese flujo energético, es posible la Vida buena

La tecnología andina es multi-dimensional, a diferencia de la tecnología occidental que es uni-dimensional, como nos lo recordara Herbert Marcuse en su libro El hombre unidimensional. Para el criador andino, trabajo y ritual son dimensiones de un mismo proceso productivo, llamado, justamente, “criar la chacra”.

Su trabajo tendrá buenos resultados, en la medida que, a nivel empírico, lo ejecute bien, con experiencia, conocimiento, cariño, ingenio y dedicación y, a nivel simbólico, lo inicie, acompañe y concluya en forma correcta, cuidadosa, respetuosa, conectado con las fuerzas de los Ayllus de la Sallqa y de las Waka. Es decir, en la medida que se mantenga unido, interconectado con la red cósmica. A esto es que se llama el arte de criar y dejarse criar.

Estos son, pues, los nuevos conceptos: energía, con los que sugiero repensar y rediseñar lo Político.

Masa: las configuraciones concretas

Ahora vamos a tratar sobre cuatro formas de gobernar, con las que pretendemos despercudir un tanto, un uso tradicional, ya desgastado, que no nos permite salir de la Caja boba en la que estamos presos, frustrando, así, los sentidos deseos de encontrar nuevas formas de hacer política, a las nuevas generaciones.

Conviene, pues, refrescar cual sea el significado original de la palabra gobierno y su perímetro semántico, para que nos vuelva a inspirar. Proviene, en efecto, de un sufijo de acción y efecto: –o, sobre el verbo gubernare, un verbo latino, tanto transitivo como intransitivo que, a su vez, proviene de la voz griega κυβερνέιν, kybernéin, que, como sustantivo, menta el gobernalle de la nave, en náutica, o, en equitación, el bocado de la cabalgadura. Por tanto, pues, refiere a un dispositivo de manejo y conducción. Como verbo, se ha generalizado, en las lenguas modernas, el uso náutico: pilotar, conducir una nave. Pensemos en el gran Timonel chino: Mao. Como verbo, κυβερνέιν, está emparentado con la raíz indoeuropea kwerp que significa girar, como gira la muñeca, karpos, o como en la palabra kybris, que era la columna giratoria, en forma de Pirámide de tres lados, en la que se inscribieron, en Atenas, las Leyes de Solón. Con lo cual, gobernar, adquiere un sentido más abstracto: la conducción de la ciudad, de la polis, entendida como una nave que debe atravesar aguas procelosas, inciertas, Modo Caos, la oralidad, para arribar a un puerto cierto y seguro, Modo Orden, mediante la escritura: la Ley. La voz griega κυβερνέιν está también en la raíz de la palabra cibernética, la ciencia del manejo de la incertidumbre, en inteligencia artificial. He aquí, pues, el paraguas semántico de esta palabra clave, en el arte de la Política.

El concepto homeomórfico aymara es Uywiri: criar y dejarse criar por la Vida, como ya vimos.

Dicho esto, propongo, ahora, cuatro modos de conversar con la incertidumbre política para crear, entre todos, cuatro remansos en los que poder morar poéticamente sobre la Tierra: Vivir Bien.

Para ello, ahora, me interesa mostrarles cuatro formas geométricas para que entiendan, de un golpe de vista, la arquitectura básica, pero compleja, de lo Político. El diseño de lo Político (en realidad, de todo) se basa en la geometría sagrada, lo sepamos o no. Mejor es saberlo. Si se entiende esto, lo demás viene como por encanto.

En primer lugar, la Forma Jaqi es como un Cigoto, el tercero incluido del encuentro de un gameto masculino, espermatozoide, y un gameto femenino, óvulo. Tiene que ver con la dimensión interior, íntima, intra. Metafóricamente: con el gobierno de sí mismo.

En segundo lugar, la Forma Ayllu que se configura como un Círculo; en realidad como círculo dentro de círculos, es decir, como una holoarquía. Tiene que ver con la dimensión relacional, inter. Metafóricamente: con el gobierno de la Casa.

En tercer lugar, la Forma Estado que podemos representar con el Triángulo o, en 3D, con la Pirámide que expresa la concentración, en el vértice, de las energías de la base: de los muchos, de la multitud, lo pluri. Metafóricamente tiene que ver con el gobierno de la Nación.

En cuarto lugar, la Forma Oikos que podemos representar con la Flor de la Vida. Tiene que ver con lo que nos trasciende, envuelve y vincula como una unidad compleja, lo trans. Metafóricamente, tiene que ver  con el gobierno de la Naturaleza: el biotopo en el que somos.

He aquí, pues el mapa conceptual e icónico de lo Político que les quiero proponer

               
   
   

Voy a leer el Pusini, siguiendo el spin levógiro.

La Forma Jaqi: el gobierno de sí mismo

Recógete. Toma consciencia de tu respiración. Imagina dos círculos entrelazados y la vesica piscis que emerge de su conjunción. Esa es la forma geométrica del primer tipo de gobierno que te propongo considerar.

La palabra aymara Jaqi, o Runa en quechua, no es fácil de entender, para nosotros, pues proviene de un enfoque energético e implica lógica cuántica. Veamos. La sílaba significativa Ja menta vida, hálito, soplo, espíritu, como una ligera emoción que se densifica apenas como una sombra, un aire, un vuelo, un suspiro o una explosión de alegría: ja-llalla, por ejemplo; en ja-phalla alude incluso a la divinidad. La sílaba qi es una forma de energía relacional; no viene de fuera hacia dentro, como cha; tampoco sale de dentro hacia fuera, como qa. Jaqi, en puqina, menta al otro yo, al Doppelgänger, un Doble cuántico, de tipo ondulatorio. Un equivalente más aproximado que Pareja, como se la suele traducir en Bolivia, sería Partner o partenaire. Otra aproximación, sencillamente, sería Hombre como el sustantivo que engloba a varón y mujer.

Jaqi, por tanto, no es ni masculino ni femenino, aunque los contiene. Es, más bien, el Tercero incluido, energético, que emerge del encuentro de ambas polaridades en un tinku libidinal agresivo. Es como la Luz que no es ni polo positivo ni polo negativo, sino el tercero incluido: el efecto, del encuentro de ambas polaridades. Si se acaba el amor, se termina el jaqi. Este diseño no es esencial, ontológico. Es, mientras dura la relación complementaria. Si se apaga el interruptor, desparece la luz. La Luz no es de naturaleza ontológica, sino energética. Eso mismo, menta la palabra Jaqi

Desde el punto de vista masa y en lógica de identidad, se le ha traducido por Persona. A una persona se le puede empadronar, numerar y extenderle un carnet de identidad. A un Jaqi, es imposible. En esto estriba la inconmensurabilidad boliviana.

Así como en la física cuántica, la entidad básica de la realidad es el Átomo, compuesto  por la función Onda y la función Partícula; esa misma estructura es la base del Jaqi y, en un holón más complejo del Ayllu … compuesto por las energías bosónicas y las energías fermiónicas: masculinas y femeninas, de arriba y abajo, de la derecha y la izquierda, del naciente y el poniente del sol… Por eso es tan importante que nos detengamos en este holón, porque si lo entendemos, habremos comprendido lo nuclear de nuestra propuesta de repensar lo Político a partir de los conocimientos de la nueva ciencia y de la sabiduría perenne conservada por los pueblos indígenas.

Así, pues, tenemos que Jaqi es una totalidad compuesta por energías masculinas y energías femeninas. La combinatoria de ambas energías nos constituye, digamos, como personas. No hay una Persona que sea cien por ciento masculina o cien por ciento femenina. La creación lingüística de varón (cien por ciento varonil: machismo) y mujer (cien por ciento mujeril: hembrismo) nos ha llevado a una esencialización de estas energías que está en la base de la Violencia. De toda Violencia.

El concepto homeomórfico, en el sistema político occidental: monoteísta y patriarcal, es la noción de Individuo; preferentemente masculino, mayor de edad, con patrimonio (Polis griega). Ahora: un WASP: White, Anglo-Saxon and Protestant (Plutocracia militarista americana). Ellos, el 1% de la población mundial, que están en la cúspide de la Pirámide hierogámico-sacrificial[38], acaparan el 82% de la riqueza mundial. En eso estriba, justamente, la Pirámide. Esta forma geométrica, en tanto diseño, facilita y encubre esta concentración del Poder en un vértice, cada vez más invisible que los andinos aymaras podrían llamar Kahrisiri y los quechua Ñaqaq No creo en él, pero haberle, le hay[39].

Ahora bien, ¿Cómo conjurar la Violencia? La solución más inteligente, que conozco, es la que nos ofrecen los kallawayas; los famosos Diez Géneros de Amarete[40], basados en energía. Las otras formas de conjurar la violencia, basadas en masa, que conocemos y estamos implementando en todo el mundo, no son serias, ni consistentes y, sobre todo, no funcionan. Me asombra que sigamos persistiendo en este  cul de sac, desde el Vaticano y la ONU hasta la FELCV y las Defensorías municipales. Los recursos financieros destinados a luchar contra la violencia son desproporcionados con los resultados obtenidos, tanto a nivel Bolivia como a nivel mundial. Si no hay resultados ¿por qué se insiste en las mismas estrategias y herramientas, basadas ellas mismas en la violencia: luchar contra? ¿No sería inteligente activar el Pensamiento lateral, rebasar la caja boba, encender el lóbulo neuronal derecho? Con perdón de Diseñadores y Financiadores: parecemos tontos. ¿O será que el Patriarcado está tan interiorizado, también en las mujeres (diseñadoras, financiadoras y operadoras: tecnocracia de género), que no podemos zafarnos de su software?

Les resumo el punto de vista amarete, para ir abriendo una fisura en la comprensión patriarcal básica de lo Político. No es posible una reforma de lo Político, si no tenemos claridad sobre esto. He aquí el aperitivo intelectual resumido en un cuadro.

  Género     Paradigma occidental   Paradigma amarete
Concepto Identidad en base al sexo biológico Pertenencias múltiples en base a relaciones con el contorno: a) cosmológico: mundo de los waka: ancestros y tecnología; b) ecológico: la sallqa: mundo genésico no domesticado y la chacra: mundo orgánico doméstico, y c) al entorno comunitario: cargos políticos, entendido como servicio y colaboración: koinonía. Son géneros simbólico-energéticos que pautan la vida cotidiana que es siempre multidimensional.
Roles Roles, histórica y culturalmente asignados, en base al sexo biológico, entendido esencialistamente. El siglo pasado, CG Jung complejizará, energéticamente, hacia animus y anima Los seres humanos tenemos y podemos jugar múltiples roles de género de acuerdo a contextos, circunstancias y necesidades concretas. Estamos en un modelo energético, no esencialista ni maniqueo
Clasificación Masculino y Femenino Amarete conoce diez combinatorias de estos roles masculino, M, y femenino, F. Así un varón puede ser: M, MM, MF, FM, FF y una mujer: F, FF, FM, MF, FF.
Relaciones Varón–mujer, sagrado-profano, público-privado. Relaciones asimétricas de poder El Jaqi en un nodo relacional bifásico que  articula, complementariamente, cuerpos sexuados, organización social y gestión ambiental. Busca un balance relacional multinivel al interior de uno mismo. La conjura de la Violencia empieza en sí mismo. Si hay equilibrio interior, hay equilibrio exterior. No hacen falta videocámaras de vigilancia, hogares refugio, policías, cárceles…

Dicho esto, tenemos, pues, la primera gran diferencia entre la Forma Estado y la Forma Jaqi. Para el primero, el Individuo es la unidad básica de lo político. Para el segundo, la Pareja es la unidad básica de lo político.

La Europa del ius naturalismo, Johannes Althusius, conoció también esta figura. La pareja era la base de la consociatio federal. Aquí percibo un interesante encuentro entre Occidente y la Indianidad para dar más espesor al debate sobre el Federalismo que, de tiempo en tiempo, aflora en nuestro país.

Vayamos resumiendo el modelo. Jaqi, la Pareja, es una totalidad en sí misma, pero es parte de la Familia. La Familia, con ser ya una totalidad en sí misma, es parte de una Parcialidad: urin o aran; juntas conforman un Ayllu; el Ayllu es una totalidad en sí misma, pero es parte de una Marka; la Marka de una Laya, la Laya de un Mamani, el Mamani de un Suyu… y así hasta la Vía láctea que, en el amanecer del solsticio de diciembre, entra en contacto visible: conjunción hierogámica, con el horizonte terráqueo. El Ayllu de la comunidad humana, por un momento, conecta con la Vía Láctea, donde se encuentra el Ayllu de los ancestros[41].

Este es el holón básico de lado animista.

Veamos, ahora, la versión monoteísta

En la tradición occidental, los sefardíes hemos diseñado un concepto de lo Político que deseo recuperar. Maimónides, 1138-1204, en su Tratado sobre el arte de la lógica, sostenía que el Arte de la política se dividía en cuatro partes. La primera era, la del gobierno propio del individuo; la segunda, la del gobierno de la casa; la tercera, la del gobierno de la ciudad y, la cuarta era, la del gobierno de la nación o de las naciones. Como nos habremos ya dado cuenta, una visión holoárquica de lo Político. De ahí su actualidad[42].

Lo Político tiene que ver con Poder y, estos cuatro gobiernos, implican recorrer un degradé del Poder que es preciso tener en cuenta, para ser eficaces.

Para empezar, Maimónides nos recuerda que el hombre nace impotente y depende de su familia o de quienes la sustituyan, para sobrevivir. Depende de su ciudad también. De hecho, empero, siempre está en juego la vida o la muerte del bebé, más tarde del infante, mucho más tarde, del anciano, y en donde, de día, la posibilidad del Abandono es constante y, de noche, la conciencia de nuestra vulnerabilidad se puede volver aterradora. El arte de lo Político, por tanto, será minimizar la posibilidad de ese Desamparo/Vulnerabilidad. Retengan esta Big Picture.

Por mor de la brevedad, resumo lo esencial de la visión de la política de Mosšeh ben Maimon.

El hombre no es autosuficiente.

Lo que caracteriza al ser humano es su capacidad y necesidad, a la vez, de gobierno. El arte de lo Político, por tanto, es un continuo avance hacia la solución de esa Impotencia que, básicamente, consiste en el terror a ser abandonado o de estar constantemente al borde del desahucio, de la locura y del abandono. 

De aquí dimana la necesidad de ser gobernado, es decir, que alguien o algo, con Poder (personal o abstracto, el rey o el estado) le protejan y garanticen que todo lo malo que teme no va a suceder. La atención requerida es de cobijo, seguridad, afecto, nutrición y orden. 

El primer desafío del hombre es, por tanto, el de gobernarse a sí mismo.

El segundo desafío, entonces, es estar preparado para gobernar a los demás, lo que implica: controlar recursos y personas para asegurarse de que nunca aparezcan esas amenazas. Se trata de lograr los mejores recursos, acumular dinero, descendencia, propiedades y alimentos. Masa.

Cabe también transformar este deseo de Poder, trascendiéndolo en un holón más sutil, como puede ser: cuidar al entorno, servir al mundo o entregarse a los demás. Energía.

Naturalmente que el niño, al crecer, irá pudiendo controlar su vida, alimentarse, protegerse, atenderse mentalmente a sí mismo pero, aun así, no podrá olvidar esa herida incurable de la impotencia radical de su origen: estar siempre al borde de la vida, más prometedora, y de la muerte, más inmediata. Lo contradictorio.

Es, pues, en este sentido, para la comprensión sefardí, que el ser humano es por naturaleza político. Necesitamos de los demás. Somos en la medida que estamos relacionados con los otros. Todos nacemos en una situación de impotencia y, por ello, jamás perderemos la necesidad de ser gobernados y de gobernar. Mandar y Obedecer. Mandar obedeciendo. Obedecer mandando.

El otro componente importante del Gobierno de si, formulado por el médico del Sultán Saladino,  Maimónides el Sefardí, fue su obra médica, que una visión sectorial y fragmentada de la ciencia, la ha zafado del estilo de vida que hace posible el Gobierno de sí mismo. Si el cuerpo está enfermo, no es posible el gobierno de sí mismo y, no digamos, del resto de las dimensiones de la holoarquía política. Política y vida cotidiana; política: la ciudad exterior, y vida interior: la ciudad interior, no son separables, si queremos avanzar hacia la Senda del Medio. Esta es la corrección estratégica que debemos implementar para ajustar la franquicia occidental de la Forma Estado.

Resumo los aportes, a ras de tierra, de Rambam sobre la conditio sine qua non de lo Político.

La salud es fruto del calor interno del cuerpo. Ese calor lo generamos comiendo. La descomposición de la comida empieza dentro de la boca, cuando se revuelve con la saliva; de ahí baja al estómago y sigue descomponiéndose más, cuando se revuelve con los jugos gástricos; finalmente, la comida es digerida. De la parte provechosa de los alimentos se nutren todos los miembros del cuerpo. Todo lo que éste no necesita, lo desecha. Por eso, gran parte de la salud depende de la buena digestión y de una buena evacuación.

Buena digestión quiere decir que la comida no sea abundante y resulte fácil de digerir. Si el estómago está lleno, le resulta difícil hacer su trabajo y descomponer bien la comida. De acuerdo con esto, debemos comer a un grado que no estemos llenos, ya que la mayoría de las enfermedades son provocadas por el hecho de comer demasiado o por ingerir comida chatarra.

Los jóvenes necesitan más comida que las personas de edad avanzada. El anciano debe comer alimentos suaves y sanos, y en cantidades pequeñas, para que el estómago haga su trabajo como es debido.

En tiempos de calor, el estómago y la función que desempeña se debilitan, por eso debemos comer dos terceras partes de lo que comemos en época de frío.

Es importante hacer algo de ejercicio antes de comer, para que el cuerpo se acalore. Conviene que la persona se desabroche el pantalón antes de comer y que lo haga sentado. Después de comer, no conviene hacer ejercicio, ya que la comida bajaría muy rápido al estómago y podría ser peligroso. Lo que se debe hacer es descansar y moverse, poco a poco. No se debe dormir después de comer, sino hasta dos horas después.

Lo normal, para alguien sano, es comer dos veces al día. Los ancianos y débiles deben comer poco a un tiempo, varias veces al día, y no comer de una sola vez mucho. El que quiera cuidarse, que no coma nada hasta que su estómago esté vacío de la comida anterior. El tiempo de digestión normal de las personas sanas es de seis horas, aproximadamente. Es bueno que descartemos una comida a la semana, para que el estómago pueda descansar.

El comienzo de la digestión empieza en la boca, cuando los dientes deshacen la comida y se revuelve con la saliva. Por eso es muy importante masticarla bien y no tragar pedazos grandes, para facilitar el trabajo al estómago.

El agua es el líquido que alimenta y da salud al cuerpo de las personas. Si el agua es limpia y pura, conserva las propiedades del líquido y acelera el proceso de expulsar los desechos del cuerpo. Es mejor tomar agua fría, ya que disminuye la sed y hace que la digestión se haga mejor y con mayor velocidad que si se bebe agua caliente o tibia. Pero no hay que beberla demasiado fría, ya que reduce el calor del cuerpo. Cuando se está cansado, con menor razón se debe beber agua muy fría. Aunque el agua es muy buena para el cuerpo, no debe tomarse en exceso. Tampoco debe tomarse agua antes de la comida, ya que enfría el estómago y no lo deja hacer bien la digestión. Igualmente, durante la comida no debe tomarse mucha agua, sino poca, y después de que la comida empiece a digerirse, puede tomarse un poco más.

No hay que esperar para orinar o evacuar, aunque sea por poco tiempo. Tampoco se debe comer hasta estar seguro de no necesitar ir al baño. La persona debe cuidarse siempre de tener una buena digestión y de evacuar bien; esto es primordial para la salud, ya que todo el tiempo que el excremento no sale, o sale con dificultad, sobrevienen enfermedades.

Dicho de otro modo: slow food, suma manqaña, estilo de vida relajado, frugalidad y simplicidad.

El que quiere cuidar su salud necesita comportarse cabalmente, a fin de estar siempre alegre y alejar la tristeza, el enojo y el miedo. Todo esto influye en la calidad de la vida. Por ello es necesario estar siempre contentos con lo que se tiene. La preocupación es lo contrario de la alegría y puede dañar mucho, ya que enfría el cuerpo. El enojo hace que el calor corporal aumente, hasta el grado que puede producir fiebre. El miedo provoca enfriamiento al cuerpo y puede ocasionar incluso la muerte. Por eso es de extrema importancia comer en momentos que la persona no esté triste, enojada o preocupada, sino solamente en momentos que esté feliz y contenta.

Dormir es bueno para el cuerpo, pues hace que la digestión sea más fácil y le permite descansar con más eficacia y rapidez. Si no puede dormir por algún problema, la persona debe ingerir alimentos que provoquen sueño. Pero dormir, más de lo necesario, es dañino. No debemos dormir inmediatamente después de comer. De la misma forma, no debemos dormir con hambre. Es necesario dormir con la cabeza más arriba que el cuerpo, a fin de que baje la comida. Dormir a medio día no es bueno, sino solamente para los que ya están acostumbrados.

Dormir es la otra mitad de la vida. Por tanto una comprensión integral de lo Político no la puede dejar de lado, pues retroalimenta la vida diurna.

En la tradición sefardí, la enseñanza se dirige tanto a la vigilia como a la letargia y, sobre todo, se  aprende a través de los sueños, por la noche. Decía Maimónides: Aun cuando es un deber estudiar de día y de noche, la mayor parte de nuestro conocimiento se adquiere por la noche (…) a quien se ocupa con el estudio de la Torá por la noche, una marca de gracia espiritual le distingue durante el día (…) Una casa en donde las palabras de la Torá no son escuchadas de noche se consumirá en el fuego (…).

El sueño y la profecía van inextricablemente unidos. Ninguna profecía ni revelación profética llegan (al hombre) de otra manera que no sea en un sueño o en una visión y a través de la acción de un ángel. Los memes que patentizan esta otra dimensión de lo Político son, pues, las profecías, las parábolas, los enigmas, los sueños, los secretos. Estamos, pues, hablando de lo que ahora llamamos el mundo del Inconsciente, Freud, Inconsciente colectivo y Arquetipos, C. G. Jung, o, últimamente, el dominio de nuestro Doble cuántico: Jean Pierre GarnierMalet. Sigan esa pista: JPG.

Las profecías nos llegan en un estado de extrema agitación. Se dan como una visión y después, como cuenta el profeta Daniel, uno queda exhausto, sin fuerzas y cae en un profundo sopor. Gracias a esta visión, a Daniel se le revelan “honduras y secretos” que se ocultan en la oscuridad y de este modo puede interpretarle al rey su “sueño y las visiones de (su) cabeza” para que “conozca los pensamientos de (su) corazón”.

Maimónides reconoce la importancia de la letargia en la ampliación del ser hacia una complejidad que no se agota en el poder ejecutivo diurno. En los sueños, en el mundo encantado de la Guía de Perplejos, en el encantamiento de El Quijote, el Zohar de los Marranos, el libro más sanador y grande de la Literatura, no existen ni el tiempo ni el espacio. Así, en un sueño, se puede estar en dos sitios a la vez y pueden aparecer cosas que no tengan todavía lugar en ninguna biblioteca.

El mundo de la letargia debe ser cultivado. De ahí la importancia de la música, el teatro, la literatura, las tertulias del atardecer y las caminatas, solos o acompañados.

Este momento esplendoroso, AlÁndalus, de la historia de Europa se empieza a cerrar con la polémica que le entabla a Mosseh ben Maimón, otro Mosseh, esta vez: ben Nahmán, 1194-1270, llamado Nahmánides que introduce, en Iberia, el espíritu vigilante, espabilado, hiperactivo, belicoso, silogístico: gótico, del Principio de identidad que viene de los Judenviertel ashkenazíes del Norte: la antesala de lo que, ahora, llamamos propiamente Europa: Occidente.

Cada nueva generación debería revisitar AlÁndalus para ajustar su Ruta de Viaje. Fue el único momento en el que los Hijos de Abraham vivimos como seres humanos y fuimos dichosos.

Condenso lo dicho en un cuadro para una mayor intelección.

Vigilia Letargia  
La vida es una guerra incesante, una lucha continua La vida es una alternancia de tiempos de paz y tiempos de guerra
El saber es poder   El saber es disfrute que incrementa la potencia de compartir
Lo esencial de la vida es el tiempo de vigilia “Ya dormiremos cuando estemos muertos” Una vida buena combina vigilia y letargia
El tiempo histórico y la acción humana están sometidos al Principio de Identidad El espacio-tiempo y las interacciones en el sistema Vida están pautados por el Principio Contradictorio
La verdadera solución de un problema ha de ser siempre una Solución final. Hay que crear problemas (un virus, p.e.), para dar soluciones salvadoras (vender una vacuna) No hay problemas ni soluciones. Sólo aproximaciones, posibilistas y contextuales, en un universo  probabilístico y cuántico.

He aquí un punto de vista monoteísta.

Para redondear este capítulo, ofrezco las sentencias políticas que los aymaras prehispánicos tenían por guía y que conocemos gracias a la crónica del Marrano sefardí, Balthasar de Salas[43]. En ese texto, olvidado adrede, dice lo siguiente: “Los comentarios doctrinales de estas dos Manos de leyes, trasumptados de los lingotes, los indios Amauthas y euphuistas los tienen en sus kypus y los hacen aprender de memoria con todas sus gentes de su respectivo Ayllo y parcialidad”.

Los transcribo en tres columnas. En la de la izquierda, viene tal cual las recogió Balthasar de Salas. En la columna del medio viene su traducción al castellano estándar del siglo XVI, basado sobre el supuesto de que el aymara es una lengua de estructura sintáctica greco latina, alfabeta, de corte ontológico. Con Jorge Miranda hemos traducido estas sentencias bajo el supuesto de que el aymara es una lengua aglutinante, compuesta por Silabas significativas, de corte energético. Para el detalle etimológico y exegético, remito a mi texto Pasos hacia una Biosofia del Vivir Bien, tomo 2.

Aymara prehispánico Traducción siglo XVI Traducción siglo XXI
Wiñay-ahkañchássim Consérvate siempre en toda vida y virtud. Vive siempre en la red
Wiñay-amauthassim Instrúyete siempre en toda ciencia y oficio Aprende siempre
Wiñay-chuymanchassim Aconséjate siempre para todo Condúcete siempre por la fuerza de la palabra cordial
Wiñay-yaanchassim Ensánchate siempre en toda verdad y justicia   Nútrete siempre de la energía del misterio.

Vaciado al Pusini biosófico se vería así:

Nútrete siempre de la energía del misterio Condúcete siempre por la fuerza de la palabra cordial
Vive siempre en la red Aprende siempre

La Forma Ayllu: el gobierno energético de la Casa

Recógete. Toma consciencia de tu respiración. Imagina círculos dentro de círculos. Esa es la forma

geométrica del segundo tipo de gobierno que te propongo considerar.

Ayllu es una voz quechua que significa, etimológicamente, lo siguiente. Por un lado, more cabalístico, el prefijo Ay es el revés de Ya, que significa misterio, en el sentido de asombro ante las implicaciones inconmensurables de algo simple. Por otro lado, Ay significa juntarse, ayuntarse, copular, para producir vida; en este caso, vida comunitaria. Consanguinidad. Semen & Sangre. En cuanto al sufijo llu, éstesignifica entrelazar, trenzar, tejer. Por tanto, ay-llu viene a significar la federación, foedus, de muchos entrelazados que emerge, como un tercero incluido, del coito comunal, propiciado por la tecnología hierogámico sacrificial del Tinku en un espacio intermedio, Taypi, que se convierte en un nexo topológico articulador de las energías opuestas: complementariedad de opuestos, que hacen brotar y mantienen la Vida, en este nivel meso que estamos analizando.

Hay un término quechua, Yanantin[44], que puede ayudar a comprender lo que menta la Forma Ayllu. Se refiere a las cosas que siempre vienen juntas, como son los dos ojos, las dos manos, una yunta, etc. Es decir, implica la noción de algo que, siendo plural, actúa como singular. Algo así como la distinción griega entre Bios y Zoe, que ya vimos. La pareja, Jaqi, tiene esa característica  y es la primera acepción que se da a la palabra Yanantin: la unión varón-mujer: onda-partícula. Los roles de la pareja conyugal andina, por ejemplo, ayudan a entender la naturaleza de la pareja social que llamamos Ayllu: el siguiente holón más complejo, que lo incluye y trasciende.

El Tinku es la tecnología energética para el gobierno de la Casa grande, el Ayllu. Significa encuentro de contrarios, ajuste ritual de partes, guerra florida, equilibrio; metáfora del Coito. Es probablemente el concepto que expresa más compleja y concretamente el Principio de antagonismo que enuncia que todo fenómeno conlleva un anti-fenómeno: materia/anti-materia, varón/mujer, de tal modo que la actualización de uno sea también la potentialización del otro, y recíprocamente[45].

El verbo tinkuña significa encontrarse en dos bandos contrarios; tinkusiña es ajustarse, venir bien una cosa con otra, igualar; tinkuyaña es comparar, cotejar, confrontar, derribar, tumbar, parear. La raíz tinku se puede interpretar como emparejar, equilibrar, adaptar las dos partes que son contrarias y complementarias y que, juntas, constituyen una paridad en equilibrio dinámico; fértil y de provecho, como la que se da entre el principio masculino y el femenino. Es también, por así decir, el encuentro de las fuerzas positivas y negativas del cosmos que deben garantizar el equilibrio del universo.

Taypi designa el espacio intermedio, liminal, que hay que entender, no tanto como un punto o una línea (que no los descarta) sino más bien como un campo de fuerzas, donde se encuentran, Tinku,  los opuestos que se van a complementar para producir, evenencialmente, un Tercero Incluido, que existirá mientras dure la conexión. Por ejemplo, el Ayllu es el Tercero incluido del Tinku entre las dos mitades antagónicas, Aran y Urin. Cada año deberá repetirse, en el Taypi del Ayllu, el Tinku para contrarrestar la ley de entropía  y el Ayllu se recargue de nuevas energías[46].

En aymara, Ayllu se dice Jatha: ja: élan vital: espíritu, ánimo: función Onda; tha: semilla: simiente, germen, embrión: lo seminal: esperma, función Partícula. Dicho de otro modo: tha es la densificación de ja y viceversa.

Por tanto, pues,Ayllu (además de las definiciones estándar en modo masa)vendría a ser el sistema andino de organización del parentesco, la reciprocidad, la ocupación y manejo del espacio, como un ser vivo; la generación de riqueza, la redistribución, etc., como una red por la que circula la información y la energía en feedback con su entorno: Ayllu de los Jaqi, en comunión con el Ayllu de las Waka: la esfera energética de sentido y el Ayllu de la Sallqa: la esfera genésica, no domesticada, con los que el sistema Ayllu busca una homoestasis asimétrica que genere neguentropía. El Ayllu, pues, es una suerte de fractal mesocósmico, entre el macrocosmos: la Pacha y el Jaqi: el microcosmos.

Ahora bien, como acabamos de ver,la Forma Ayllu no consiste solamente de la sociedad humana, como suponemos los monoteístas, sino que incluye lo que Hans van den Berg, en su libro La Tierra no da así nomás, llama la sociedad extra-humana y también la naturaleza. Entre estas tres sociedades se da una interacción simbiótica que continuamente puede ajustarse y/o desajustarse. Este precario equilibrio se desarrolla también al interior de cada una de estas comunidades. Así, por ejemplo, si el hombre respeta a la naturaleza, reconociendo sus ritmos y se adapta a ellos, la naturaleza mantendrá su equilibrio y dará al hombre lo que él quiere recibir de ella. Si el hombre respeta el equilibrio con la naturaleza, los integrantes de la sociedad extra-humana le garantizarán el equilibrio de  la  naturaleza, de modo que ella le pueda sustentar. Ello implica también que, por ejemplo, los desajustes internos de la sociedad humana, repercutirán en desajustes en las otras dos comunidades, afectando negativamente la vida de la chacra y del ganado, del clima, el suelo y el agua, también el destino de la comunidad humana e, incluso, el descanso de los muertos[47].

Eduardo Grillo, me parece, precisa mejor el concepto. Llama a estas tres sociedades: la comunidad humana, la comunidad de huacas y la comunidad de la sallqa.“En la cosmovisión andina, sucede que, así como  la comunidad humana “hace chacra” bajo la tutela de la comunidad de huacas y a partir de los elementos de la comunidad de la sallqa, así también la comunidad de huacas tiene su propia chacra constituida por la comunidad de la sallqa y la comunidad humana. De ahí pues que haya reciprocidades y diálogos entre tales chacras”.

A esto, Eduardo Grillo, en un libro fundamental: La Cosmovisión Andina de Siempre y la Cosmología Occidental Moderna, ha denominado, en una afortunada traducción al castellano: “Saber cultivar la vida”, “Saber criar y saber dejarse criar”. He aquí una bella definición, no antropocéntrica de la Vida.

El mundo andino, en efecto, es un mundo-animal y el hombre es parte de ese universo animado. Los elementos de la naturaleza: animales, árboles, piedras, ríos, cerros, casas, chacras, todos tienen su lado interior, su vida secreta, su propia personalidad, capaz de comunicarse con el hombre, a condición que éste sepa abrirse a ellos y tratarles con cariño y respeto. El trato mutuo cría. Esta crianza es simbiótica y recíproca: a la vez de criar la chacra, el ganado, el agua, éstas crían al hombre dándole vida y haciéndolo florecer. Una mutualidad similar se desarrolla entre la comunidad de las huacas y la comunidad humana: mientras la primera, encabezada por Pachamama, alimenta la vida humana, la segunda alimenta a las huacas mediante sus huilanchas y sus mesas. Es el “pago a la tierra”, que pone en escena el Principio de Reciprocidad.

 

Una forma de graficar la noción cósmica de los tres Ayllu que, sin embargo, son uno, como la fórmula trinitaria católica, es hacerlo como anillos enlazados. Tres personas distintas pero un solo Dios.

¿Qué es, empero, un gobierno energético de la Casa? Dicho de otra manera. ¿Cómo se puede gobernar caóticamente y, sin embargo, producir un Orden armonioso y equilibrado que dure un ciclo anual, donde la Violencia, producida por las múltiples interacciones del Sistema Vida, haya sido minimizada al máximo, en un grado tal que no conocen las democracias occidentales que gobiernan en modo orden: según la Ley? Sólo se me ocurre describir el dispositivo de gobierno de este sistema que, afortunadamente, todavía opera en Bolivia. Es un know how político pertinente para la Era Tesla. After Tesla, hubiera dicho Georges Steiner.

Todavía ahora, a pesar de la República, los grandes Ayllus del norte de Potosí se dividen en dos mitades: Alasaya y Majasaya mitad superior, puna, y mitad inferior, valles, respectivamente, quedando repartidos en ambos pisos ecológicos y conviviendo estrechamente. En la temporada seca, entre Carnavales y Todos Santos, los ayllus han concluido sus cosechas y están “libres para jugar”. Durante todo este periodo, por tanto, se efectuará una secuencia de Tinkus en diferentes fechas y en diferentes localidades, en las que estos encuentros de energías libidinoso-agresivas pueden reunir, desde unas cuantas decenas de contendientes hasta varios miles.

El día previo al inicio del Tinku, las parcialidades, masculina y femenina, del ayllu se congregan en el cerro tutelar de su comunidad, para hacerse uno con las energías fuertes de su lugar de poder y cargarse de coraje para el encuentro del día siguiente. Durante toda la noche, la comunidad vibra al son de los Jula Julas, khoa y ch’alla a su waka, simbolizado en la figura de la cruz católica que es, en realidad, un falo encubierto y portátil. La chicha lubrica todas las relaciones cosmo-te-ándricas del ayllu: sallqa-waka-jaqi,y sumerge a todos en un estado alterado de conciencia: una suerte de limbo-psy, que propicia la interconectividad del gran holón ayllu. Es una noche de vigilia, una vela entre agitada y pasmada, a la tenue luz de la Cruz del Sur y la Vía láctea.

Al amanecer del día señalado, la tropa comunal inicia la bajada hasta el pueblo donde se realizará el Tinku. La comunidad avanza estocásticamente, rítmicamente, en zig zag, animada por la música de los Jula Julas y encabezada por dos mitanis, doncellas, que escoltan la Cruz, haciendo flamear banderas blancas, aire, es decir, agitando energías femeninas, a través del canto, que complementan las energías masculinas de los Jula Julas masculinos, tierra, y, asimismo, enviando mensajes a las otras comunidades: información. Durante el trayecto hacia el Taypi, el vórtice energético diurno donde se encontrarán y coincidirán los contrarios, la comunidad se va engrosando con otras comunidades integrantes de la misma mitad, de manera que al llegar a la plaza colonial del pueblo, un gran precipitado de energías fermiónicas hará un ruidoso ingreso al espacio de encuentro, sugiriendo el bronco rumor de una tropa de toros bravos en tropel. La lengua castellana tampoco está ausente de este happening, más bien quechua: la palabra ¡Carajo! chisporrotea continuamente en el audio del ritual.

Lo mismo acaece con la otra parcialidad; digamos la mitad femenina, que sube del valle al pueblo que se encuentra en la mitad entre puna y valle: en la chaupirana.

Desde la plaza, a ras de suelo, lo que se percibe es caos, una baraúnda molecular en ebullición, con fuertes efluvios de sudor, coca y trago. Desde el cerro, a cierta distancia, ya se dibujan las dos mitades, buscándose y esperando la hora del coito comunal. Desde el campanario de la plaza, a cierta altura, lo que se nota es el spin, ora dextrógiro ora levógiro, de las dos mitades acercándose al vórtice solar, masculino, fermiónico, del Toroide Ayllu.

Hacia el mediodía, espontáneamente, va emergiendo la Autoridad del Tinku, una suerte de árbitro que va a administrar la economía de la sangre y de la fuerza, poniéndoles los límites pertinentes. Los encuentros se van dando; de uno a uno: runa tinku, ora entre varones ora entre mujeres; de modo grupal: waykha, hasta que se enfrentan las dos mitades. Los jóvenes chequean a las doncellas: se fijan en su atuendo: el diseño y si el tejido es impermeable; es decir, buscan una buena tejedora y si, además, sabe cantar y zapatear, mejor. Las imillas buscan un tipo corajudo y fuerte. Los que tuvieran algo pendiente, surgido en el año, es ahora cuando se pasan la factura; una vez desfogados, se establece otra vez la armonía; no hay rencores. Los niños y las niñas también suelen salir a jugar; es sólo eso; los ancianos otro tanto. 

El truco es plantarse bien en el suelo, para dar y recibir; el que trastabillea, pierde. Hacia la puesta del sol se van retirando, magullados y ensangrentados. Es importante no limpiarse la sangre; es el sacramento del encuentro y la propiciadora de la Fertilidad. Los que no están durmiendo, están farreando en las chicherías. Empieza el turno del charango y la thogonta. La fiesta durará lo que dure la chicha: cuatro o cinco días. 

Los días siguientes, el Ayllu reconstituido, reloaded, dará también su lugar al catolicismo: los padrinos mandarán celebrar Misas de Salud para sus ahijados, otro tanto harán las familias que hubieran tenido desgracias en el año; incluso no es raro que se celebren bautizos y matrimonios. En un holón más complejo, pues, se producirá un Tinku entre el Animismo y el Monoteísmo: entre las energías ctónicas fuertes: sacrificiales, y las energías uránicas: hierogámicas del catolicismo. Estamos, pues, en las antípodas del fundamentalismo abrahámico.

El otro vórtice del Toroide Ayllu, en el ritual del Tinku, es la Noche: la media noche; la noche mística, que conocemos por Fray Luis, Juan de la Cruz, Teresa de Ávila y Moisés de León; sólo que, esta vez, no “a lo divino”: en clave marrana, sino en clave humana, donde la ley de gravedad: la ley de atracción: las energías bosónico-libidinoso-agresivas celebran la Copula mundi para la regeneración del cosmos.

Este Coito cosmobiológico, Tinku, puesto en escena por el Animismo y modulado por la Reciprocidad, en Modo Caos, el Monoteísmo también lo pone en escena, y lo modula el Capitalismo, en Modo Orden, en el Coito del Fútbol, por ejemplo, que, ahora, ha remplazado la Forma Ecclesia (que, a su vez, remplazó la forma hebrea qâhâl, קהל) con la que Occidente sustituyó la Forma Ayllu: relaciones de Consanguineidad, por Formas organizacionales y relaciones basadas en la Fe. Sin embargo, las parroquias, los templos, los seminarios… se han empezado a vaciar, aceleradamente, a partir del Vaticano Segundo y, ahora, vacías, son hermosas salas de concierto, eventos, museos, etc. Pero, he aquí que la necesidad de Comunidad no ha desaparecido, ni desaparecerá jamás: cambiará de piel.Ojo, empero, a los cambios de piel.

Pondré un ejemplo, químicamente puro, como el Fútbol, que remplaza las rutinas dominicales de ir a misa o rezar el rosario, para que tomemos conciencia de cómo está operando el rostro sagrado de lo Político, en la actualidad. Otro ejemplo que no toco, pero les sugiero analizar, son las inauguraciones y clausuras de los Juegos olímpicos, los Campeonatos mundiales de Futbol, Premios Oscar o Super Bowl, que remplazan las festividades de Semana Santa o Navidades y que, significativamente, ya no son celebradas por sacerdotes sino por Sumas Sacerdotisas como Madonna, Jennifer López  o Shakira. Volvamos al ejemplo del Futbol.

Veamos. En el espacio, el Orden se manifiesta en un rectángulo, compuesto de 2 cuadrados, 2 arcos, 4 esquinas de cuarto de circunferencia cada uno, que conforman el círculo del centro, Taypi, y 2 rectángulos más, partidos en cada mitad de la cancha, formando en total 3 rectángulos dentro de rectángulos: una matrioshka sagrada. Luego, los números. Once jugadores por lado (número primo) y 22 en total (como las letras del Alefato). Tres jueces: uno a cada lado y el tercero en el medio (estructura sefirótica); el cuarto árbitro, invisible como Daat. Los estadios tienen aforos limitados.

La organización del Futbol continúa la del Vaticano y la de los Estados nacionales. Eso es la FIFA: una pirámide con un Presidente de autoridad emocional global, con Sedes nacionales independientes del Estado, respetadas por todos: tanto demócratas como dictadores. Tiene sus Tribunales, jueces y abogados, para casos menores. En lo grande, rige una lógica mafiosa, con pederastia incluida. 

En lo religioso, los estadios han vaciado las iglesias, sustituyéndolas, y han conformado un Cuerpo Místico, vibrante, que aglutina, prácticamente, a toda la humanidad. Esta iglesia sustituta  también tiene su Ley escrita: el Reglamento, sus doctores, sus exégetas y predicadores y hasta Academias mediáticas como ESPN y FOX.

Dos equipos nacionales actualizan, en cada campeonato, la polaridad básica de sus países: ora a ricos y pobres, centralistas y autonomistas, vernáculos e internacionalistas: los derbis o clásicos,  que actualizan la experiencia de la dualidad y la lógica energética de lo antagonista (Lupasco). 

El Capitalismo modula esta liturgia convirtiendo todo, primero, en objeto; después, en mercancía y, luego, en número y precio y, con ello, suscita, otra vez, la realidad nunca periclitada de la esclavitud (pues, sin ella, no hay Capitalismo). Todo el mundo cierra los ojos voluntariamente a este hecho, bien sublimado y camuflado (dándole la razón a Étienne de La Boétie). Los jugadores son comprados, vendidos, transferidos en un Mercado esclavo de jugadores (las Naciones Unidas miran a otro lado). Sus precios son tan altos, que han terminado transmutando en oro, el plomo y, además, han convertido a sus esclavos en semidioses: santos. Los fans los adoran y, en ello, adoran su propia esclavitud (el Opio del que hablara Marx). Han puesto una Boletería en cada estadio y, de ahí en adelante, todo se convierte en Dinero a raudales.   

En el Fútbol rige la lógica deno contradicción. Si hay empate, se desempata por penales o si no, subjetivamente; unos viven el empate como derrota: Argentina, por ejemplo; otros como victoria: Bolivia por ejemplo. El modelo debe decantar en lo No contradictorio.El Ayllu, por su parte, implementa la lógica contraría: todos ganan.

Para redondear este capítulo, ofrezco las sentencias políticas que los aymaras prehispánicos tenían, como guía, para este holón organizacional.

Aymara prehispánico Traducción siglo XVI Traducción siglo XXI
Hylirinaccaru-aynirejja: hywat-hywatápan El inobediente, convencido de su desobediencia: muera de muerte Quien, como hermano, no cumpla con el ayni, muera
Ahyrajja: hywat-hywatapan El perezoso, convencido de su pigricia: muera de muerte Quien vueltée, muera
Karijja: hywat-hywatapan El mentiroso, convencido de su mentira: muera de muerte Quien mienta, muera
Lunthathajja: hywat-hywatapan El ladrón, convencido de su latrocinio: muera de muerte Quien robe, muera
Wachokherijja: hywat-hywatapan El fornicario, convencido de su pecado: muera de muerte Quien copule sin discreción, muera

La Forma Estado: el gobierno de la nación

Recógete. Toma consciencia de tu respiración. Imagina un triángulo equilátero. Esa es la forma geométrica del tercer tipo de gobierno que te propongo considerar.

La palabra Estado proviene de la voz latina status ​que, a su vez, dimana del verbo stare que significa estar parado. Por extensión, pasó a significar algo detenido, estático. El verbo stare, en efecto, se vincula con la raíz indoeuropea sta-, que reverbera en el verbo griego ίσταμαι, histamai, que suele ser traducido como: establecer, parar, detener, estar quieto. Un refrán sefardí lo expresa de este modo: “Las cosas de palacio, van despacio”.

Si nos zafamos de las visiones sectoriales y puntuales, y tratamos de ver el conjunto, apreciaremos que la Forma Estado establece la otra polaridad política que complementa a la Forma Ayllu. Así se forman las polaridades: estático / dinámico, vertical / horizontal. De este modo, tenemos un quantum conceptual para pensar integralmente lo Político. Estado sin Ayllu, no puede producir nada bueno, por Ch´ullay viceversa. He aquí, pues, el ingrediente conceptual que faltaba para que los esfuerzos por revalorizar lo Político no nos sigan frustrando. Siempre Onda / Partícula.

Por otro lado: para captar intuitivamente la esencia de esta configuración, les propongo imaginar la forma geométrica del Triángulo o, en 3D, de la Pirámide. Una variable más agresiva es el Obelisco, coronado, como se sabe, por una pirámide en su cúspide. Mi perspicaz lector ya se habrá dado cuenta de que se trata de un gran Phalus. El domino de lo masculino y patriarcal no podría ser más obvio. El Círculo, en cambio, es matriarcal y femenino.

La Humanidad actual, alfabetizada y monetizada (es decir, atomizada simbólica- y energética-mente) cree que ésta, la Pirámide, es la única forma civilizada de organizar la sociedad, en Modo Orden; vale decir, de un modo centralizado, vertical y quieto. Un solo dios, una sola ley, un solo camino, un solo orden mundial monolítico. Ahora bien, he aquí, empero, que el Uno cuántico es Par. A esto debiéramos aspirar, como un gobierno mundial. La Diarquía inca, nos podría inspirar, a este respecto[48]

De hecho, doquiera volvamos la mirada, ahora, veremos estructuras piramidales invisibles; pirámides dentro de pirámides, que están configurando las organizaciones, congeladas en Instituciones. Uno: arriba; los Muchos: abajoy, en medio, gradaciones de elitesque controlan el escalón inferior.

El Papa y sus fieles y, en medio, cardenales, obispos, sacerdotes, diáconos y turiferarios; el Rey y sus súbditos y, en medio, nobles, caballeros, hidalgos y siervos; el Presidente y sus ciudadanos y, en medio, ministros, secretarios, directores, técnicos y vecinos; el General y sus soldados; el Jefe y sus empleados: “Donde manda Capitán no mandan marineros”. Se trata del triunfo del modelo político del Monoteísmo, antes religioso, ahora secular.  

De hecho, el Triángulo es una figura geométrica absolutamente fascinante. Su complejidad nos embelesa de tal modo que corremos el peligro de pasar por alto su primer movimiento, que puede ser letal, si lo perdemos de vista. La base ancha de la Pirámide culmina en un punto: un vértice / vórtice invisibilizado y separado del resto: la conocida Pirámide trunca. La figura misma facilita la dinámica de flujos que va de abajo hacia arriba; de los muchos a los pocos. Obviamente también de arriba hacia abajo. Arriba: Software; abajo: Hardware. Masa / Partícula.

¿Qué es lo que circula por la Pirámide? Sospecho que sobre todo Energía. ¿Qué energías? Sospecho que Dinero: Partícula: “contante y sonante”, y Miedo: Onda, “temiendo y temblando”: Kierkegaard, intangible pero real. ¿Qué más puede subir y bajar por la Pirámide? Sospecho que Poder como tener. En efecto, el dispositivo está diseñado para concentrar arriba información, decisiones y recursos y, como es patriarcal: mujeres; como, además, es sacrificial: niños y doncellas[49].

Detengámonos en el Dinero. Partícula. Apreciemos esta genialidad: a través de las Tasas de Interés: simple, para el día a día y compuesto, para los grandes fatos[50], nadie se percata o puede dar cuenta, cómo: centavo a centavo, pero incesantemente, la energía social: el trabajo humano, condensada y enmascarada en el Dinero, va subiendo, como por capilaridad, de la base de la Pirámide a su vértice, controlado por el sistema bancario, como el humo perfumado del incienso. Con la reciente crisis financiera, de 2008, los profanos nos enteramos, finalmente, dónde y cómo, se concentraba toda esa riqueza: unos cuantos bancos de Wall Street y la City of London, como campamento base. Se rasgó el Velo de Isis.

Fijémonos, ahora, en el Miedo. Onda. Observemos la siguiente perversidad: el Miedo es intangible; no se lo puede pesar y medir, pero es real: lo sentimos: son energías bajas producidas por la Violencia, que siempre es sacrificial. Como el humo de la koa también sube hacia las alturas. La forma artificial de generar el Miedo, ahora, es el Terrorismo, diseñado e implementado por los servicios de inteligencia, para desmontar el Estado de Derecho y de Bienestar, de cuño social demócrata, y forzar que una ciudadanía acojonada vaya cediendo derechos, para que la Branche de la economía delictiva y sumergida opere con la menor regulación posible. Fíjate (si eres curioso y perspicaz) en la regularidad, casi astrológica, de los eventos de Falsa Bandera que alimentan el fuego del Miedo. Todo lo que sirva para que la gente tema y genere energías bajas, pesadas: pesadumbre, es útil: desempleo o empleo precario o temporal, subida de los precios, baja de las Pensiones, avalancha de migrantes, inseguridad en las calles, huelgas, narcotráfico, paramilitares… Cuando el Capitalismo entra en los ciclos entrópicos, detectados por Kondratiev, se activa el dispositivo de la guerra, las revoluciones, las revueltas, tanto para ajustar el sistema político, de modos cada vez menos democráticos: los banqueros nombran presidentes y primeros ministros (y, oh milagro; nadie dice ni pio), como para llevar a cabo desmontajes controlados de las instituciones que proveen bienestar a la población. El software del Miedo está programado, simbólicamente, en la figura de Yahweh Sebaot, que subsume los dioses sacrificiales de la guerra: Baal y Moloj fundamentalmente[51]. El Combo completo.

Fijémonos, ahora, en el Poder, como dominación y control, que genera la forma piramidal, para producir el Tener. El modelo opuesto: el No-poder, como servicio y colaboración, para producir el Ser social, es generado desde la Forma Ayllu. Esta distinción es clave haberla comprendido, para no ser masoquistas políticos.

Me refiero a la Corrupción que es el efecto estructural de esta configuración, facilitada por la Forma Pirámide. El catecismo para los fieles/ciudadanos reza así: la corrupción (que es imposible negar) es una excepción; algunas personas, pilladas in fraganti, pueden ser corruptas, pero las instituciones no son corruptas. A la mayoría parece que le conviene tragarse este sapo. Reconocerlo, cuestionaría radicalmente el sistema político y sus expectativas más recónditas. Y como no somos suicidas, sobre todo, porque todos tenemos el deseo y la esperanza de escalar por la Pirámide (Movilidad social, le llaman los sociólogos), cumplir el Sueño americano (James Truslow Adams le llamó el American Dream), en una palabra: progresar, seguimos la liturgia de ir a votar cada cinco años o de emigrar hacia donde hay mejores salarios. El autoengaño se ha ritualizado e interiorizado.

Lo cierto es que el sistema es corrupto por diseño: busca concentrar el Dinero y el Poder en pocas manos. El Informe Oxfam dice: el 1% de la población. Este dato no lo queremos tomar en cuenta. Es demasiado brutal y demuestra, con cifras, lo que estamos explicando ahora.

Es inquietante la evidencia de que sobre todas las pirámides conocidas, se hayan llevado a cabo sacrificios humanos, donde la Sangre ha jugado un rol decisivo. La Sangre pareciera que alimenta al dueño de la Pirámide, por decirlo animistamente, y a sus sacerdotes. El punto que se cuida es que la gente no se dé cuenta de que es alimento, como las vacas y las gallinas son alimento nuestro. La Cadena trófica sigue más arriba: de masa pasa energía, de lo denso a lo sutil. Para nosotros monoteístas, es muy fuerte saberlo; los animistas lo manejan mejor.

La Sangre sagrada, vale decir, recargada por el adrenocromo producido por el terror a la muerte de la víctima (hombres y animales, en especial: doncellas y niños), pareciera que es lo buscado por los poderosos del Monoteísmo. Los “poderosos”, en el Animismo, buscan ser ricos en relaciones.

En el caso de la tradición occidental, este diseño sacrificial se inaugura en Sumer, se perfecciona en Egipto, se consolida en Roma y será el Vaticano el que lo continúe hasta el día de hoy, y, de modo secularizado, se prolongue bajo la Forma Estado Nación o formas empresariales.

¿Cómo hacer comulgar semejante molino de piedra? Hasta donde entiendo, a través de dos tecnologías. Una, más sutil: la noción de Inter-mediación y, la otra, más quinética, la puesta en escena de la Representación.

Según el Sefer Yetzirah, Libro de la creación, el mundo se creó a partir de diez emanaciones o atributos de Dios, llamados sefirot. ספירות. Cada sefirá está relacionada con un orden angélico, dirigido por un Arcángel. Las burocracias eclesiásticas, estatales, militares o empresariales actuales, no se entienden, si no se comprende y se sabe de dónde dimanan y, sobre todo, para qué fueron diseñadas estas intermediaciones: para suscitar a Dios: el vértice invisible de la Pirámide de Poder. O sea que, de eterno, nada. Fue un atrevimiento fascinante densificar, a través de la Palabra y, sobre todo, la Escritura, la Fuente de toda energía  que los físicos cuánticos y astrofísicos llaman energía de fondo, vacío cuántico, también pregnant void o fuente originaria de todo ser. Sobre esta dimensión, personalmente, prefiero el Silencio. Sobre su densificación, como “dios”, más vale que seamos críticos, pero no ateos, que es el Arte del Avestruz en grado sublime. En cualquier caso, el daño ya ha sido hecho. Por lo menos procuremos entenderlo para, luego, espero, relativizarlo. Porque, desaparecer, ya no va a desparecer. Es un truco que el homo sapiens ha descubierto y le va a seguir sacando el jugo. Sigue la ley de Resonancia mórfica. Por lo demás, es una expresión, antropocéntrica, de la energía Fermión. Así como el Ayllu es la expresión, cosmocéntrica, de la energía Bosón.

Así, pues, si se quiere crear algo de la nada, invéntense mediaciones. En la jerga teológica, a este dispositivo se le llama creatio ex nihilo. Su lado positivo: azuza la creatividad y la innovación. No por nada, el Israel monoteísta es el país que tiene más Patentes registradas y la Bolivia animista la que menos.

La Jerarquía angelical más aceptada fue descrita por Maimónides en su obra Yad ha-Hazakah, sobre la base del Árbol sefirótico: Kéter: Corona; Jojmá: Sabiduría). Biná: Inteligencia; Jésed: Misericordia; Gevurá: Justicia; Tiféret: Belleza; Netsaj: Victoria; Hod: Gloria; Yesod: Generación; Maljut: Reino.

Otros qabalistas, basados en el Zohar, proponen la siguiente jerarquía: 1. Los Erelim con Miguel por Jefe; 2. Los Ishim con Zefaniah por Jefe; 3. Los Bene Elohim con Hofniel por Jefe; 4. Los Malakim con Uriel por Jefe; 5. Los Hashmalim con Hashmial por Jefe; 6. Los Tarshishim con Tarshish por Jefe; 7. Los Shinanim con Zadkiel por Jefe; 8. Los Querubín con Cherubiel por Jefe; 9. Los Ofanim con Rafael por Jefe; 10. Los Serafín con Iehoel por Jefe.

En el Maseketh Atziluth: la jerarquía es la siguiente: 1. Los Serafín con Shemuel o Iehoel como Jefe; 2. Los Ofanim con Rafaël y Ofaniel como Jefes;  3. Los Cherubín con Cherubiel como Jefe; 4. Los Shinannim con Zedekiel y Gabriel como Jefes; 5. Los Tarshishim con Tarshish y Sabriel como Jefes; 6. Los Ishim con Zafaniel como Jefe; 7. Los Hashmalim con Hashmial como Jefe; 8. Los Malakim con Uzziel como Jefe; 9. Los Bene Elohim con Hofniel como Jefe; 10. Los Erelim con Miguel como Jefe.

Entre los siglos V y VI, Dionisio Areopagita, un pensador bizantino, en De Coelesti hyerarchia, desarrolló un esquema de tres jerarquías, esferas o tríadas de ángeles, cada una de las cuales alberga tres órdenes o coros. En orden de potencia decreciente, los coros son los siguientes: Primera jerarquía: serafines, querubines, tronos. Segunda jerarquía: dominaciones, virtudes, potestades. Tercera jerarquía: principados, arcángeles, ángeles.

No es, pues, banal (tratándose de lo Político) saber de dónde viene la idea tan bizarra de Jefe. Los animistas no conocen esa noción[52].

La otra tecnología, para pasar semejante alijo, es la Representación. El concepto homeomórfico, para la Forma Ayllu, es Presencia. La Política es una puesta en escena. En este modelo, no se puede no ser cínicos. Pero, he aquí que si todos son cínicos, tampoco funcionaría el juego: la mayoría tiene que ser mantenida en la ignorancia, las medias verdades, el espectáculo: panem et circenses, fake news y liturgias democráticas como: plebiscitos, elecciones, referéndums, consultas, iniciativas: gimnasia cívica. La gente tiene que estar ocupada en lo que sea, menos en lo que importa. De este modo, andará pre-ocupada destilando miedo en dosis discretísimas. Como esta operación es, a todas luces, taimada, los Muchos no deben darse cuenta que los han encerrado en una prisión invisible o, como sugirió don Juan Matos, en una suerte de granja humana y que están ahí para alimentar a los de Arriba. Don Juan, en El lado activo del Infinito, les llama Predadores, Voladores. Los textos gnósticos de Nag Hammadi les llaman  Arcontes.

Nuestros actuales modelos piramidales provienen de Sumer y de Egipto, que son los que proveen toda la narrativa del monoteísmo abrahámico; aunque hubo pirámides también en el resto de los continentes. Ahora conocemos sus ruinas, pero no su narrativa. A medida que tenemos más formación tecnológica y menos educación humanista, se empieza a considerar a las Pirámides, más como Dispositivos tecnológicos de Comunicación, que tumbas de faraones. La dejaremos aquí, de momento.

Observen estas tres pirámides que les ofrezco a continuación: la primera es de Sumer, la segunda de Egipto y la tercera es actual. En Google las pueden observar mejor, más ampliadas y otras más. Sigan esas pistas.

Para dejar bien claro el modelo, ofrezco dos diagramas más. Uno del comienzo de la revolución industrial y, otro, de ahora mismo, para que el lector interiorice bien el modelo. 

Visualiza, querido lector, la Pirámide. Introdúcete en ella mentalmente, desfocalizando la mirada, para poder captar su esencia. Te la hago rápido. La Pirámide es la cárcel invisible, en la que está presa una humanidad atomizada, actualmente. El 98% de la humanidad está esclavizada por la Deuda, producida por el Dinero Fiat. ¿Cómo se hace para que no te des cuenta que estás preso? Simple: haciéndote creer que eres libre. ¿Cómo? Haciéndote elegir entre dos ilusiones artificiales: pepsi o cocacola, izquierda o derecha, república o monarquía, comunismo o capitalismo, democracia o totalitarismo, barça o real madrid… Este es un modelo timador por diseño[53]. El gran secreto, del arte de gobernar y hacerse rico, en el modelo piramidal, es hacer que no falten conflictos, pandemias, atentados y, sobre todo, Guerras; ahora de quinta generación. Cena quina es cuando un mismo Banco financia a los dos bandos en guerra. ¡Qué tal!

El Poder piramidal consiste, pues, en catalizar procesos de conjunción y disyunción alternativos. Es decir, en controlar, ora bajo el Modo Orden, ora bajo el Modo Caos. Es decisivo entender esta mecánica, para no morir idiotas, como se enseña en las Casas marranas.

Es, justamente, en este marco teatral, mediático, espectacular, en el que se dan las producciones y transmutaciones de los flujos libidinoso-agresivos de la sociedad. Gracias a su Puesta en escena, en el Modo Orden, el sistema funciona de manera integral y, en el Modo Caos, se producen concentraciones destructivas, pero que, paradójicamente, posibilitan la regeneración del sistema.

Es en este marco escénico, en el que el Poder monoteísta, en función de las circunstancias, fomenta dicotomías lógicas, aprovechándose del sustrato ontológico de las lenguas indoeuropeas: que agitan el cacao: civilizados y bárbaros, cristianos y judíos, católicos y protestantes, republicanos y monárquicos, capitalistas y comunistas, conservadores y progresistas, desarrollados y subdesarrollados, blancos y negros, hombres y mujeres, machistas y feministas, etc. Cuando, en realidad, todos tenemos, de uno y otro, en dosis diferenciadas. Si aceptáramos, como el Animismo, ese hecho básico, disminuirán ostensiblemente la conflictividad y las guerras, es decir, la posibilidad de Business y de que suba el PIB.

Desde la Segunda Guerra Mundial, es importante comprender que todos estos conflictos, en buena medida, están diseñados, producidos y distribuidos, desde esa mega usina de fabricación escénica, que se llama Hollywood, que ha remplazado a púlpitos y cátedras. Hoy, la gente se informa, educa y divierte por la Imagen que, una sola –dicen- vale más que mil palabras.

En función de las circunstancias, al Poder piramidal, le interesa mantener ciertos equilibrios /  desequilibrios, entre unos u otros de estos pares de opuestos, relativamente ficticios. En esto consiste la noción de desestabilización, que en el Capitalismo hollywoodiano[54], está cada vez más vinculada a la producción sintética de eventos con alto impacto mediático: atentados terroristas de bandera falsa,  golpes de estado, pandemias de laboratorio, catástrofes «naturales» provocadas por geoingeniería, transgénicos que diezman poblaciones y ecosistemas…

En función de las circunstancias, al Poder piramidal, le interesan, ora los enfrentamientos entre  partidos equiparables, ora cohabitaciones escandalosas. En cualquier caso, todo vale, con tal de canalizar a su molino los excedentes libidinoso-agresivos de la sociedad. Este arte consiste en manejar, al mismo tiempo, las dos manos, los dos platillos de la balanza, en alternar la acción sobre uno y sobre otro, de manera que se pueda sacar partido, tanto de las desestabilizaciones como de las estabilizaciones. Apoyar a bolcheviques y nazis, al mismo tiempo. Instigar inmigraciones masivas y movimientos nacionalistas y racistas, al mismo tiempo. Et coetera.

A medida que se asciende en la Pirámide, que tiene la forma de Embudo invertido, menor es la competencia. Desde Sumer y Egipto, hasta el Palais de l’Élysée y The White House, para ascender en la Pirámide de poder hay que participar de rituales hierogámico-sacrificiales. Este es el mecanismo que posibilita el ascenso en la escala del Poder piramidal, pautada por grados de sadismo, lascivia y perversión: lo hierogámico; pero también de frialdad, falta de empatía,  deshumanización y psicopatía: lo sacrificial. Cuanto más arriba, en la Pirámide del poder, con más frialdad, con más sadismo, con más inhumanidad se debe actuar. Observen nomás lo que pasa entre Hollywood y la Casa Blanca. Ahí, pueden verificar, por ustedes mismos, si este texto, atina o no.

Para terminar desearía comparar algunas perlas de la filosofía política del Poder piramidal: “El hombre es lobo del hombre”, Hobbes, “Ante todo, ármate”, Machiavelli, “La ley solo existe para los pobres; los ricos y los poderosos la desobedecen cuando quieren, y lo hacen sin recibir castigo porque no hay juez en el mundo que no pueda comprarse con dinero.” Marqués de Sade: Monoteísmo, con los siguientes preceptos de la sabiduría política aymara prehispánica, Animismo:

Aymara prehispánico Traducción siglo XVI Traducción siglo XXI
Paccalluri takheru-muyupayata Semanalmente congregarás á todas las gentes de vuestra parcialidad Semanalmente mueve las energías paritarias de la comunidad  
Paccalluri takheru-quyapayata Semanalmente al pueblo enseñarás la mutua compasión Semanalmente recodarás a la comunidad el camino de la mutua compasión  
Paccalluri takheru-chuymanchata Semanalmente al pueblo le ensancharás en sus virtudes Semanalmente recordarás a la comunidad la conveniencia de ser entrañables en el trato mutuo
Paccalluri takheru-arunchata Semanalmente corregirás los vicios públicos Semanalmente haz que circulen las palabras y las emociones de la comunidad  
Paccalluri takheru-taripata Semanalmente á cada uno remunerarás conforme á sus obras Semanalmente infórmate bien teniendo en cuenta el envés y el revés y toma decisiones sabias  

A buen entendedor, pocas palabras.

La Forma Oikos: el gobierno de la naturaleza

Recógete. Toma consciencia de tu respiración. Imagina la Flor de la Vida. Esa es la forma geométrica del cuarto tipo de gobierno que te propongo considerar.

La palabraOikos proviene de la voz griega οἶκος, que significa ​Casa y menta al conjunto de bienes y personas que constituían la unidad básica de la polis, compuesta por el padre de familia, la familia extendida y los esclavos que trabajaban grandes explotaciones agropecuarias. Con el tiempo, oikos viene a formar parte del concepto Economía: oiko-nomia y, luego, Ecología, oiko-logia. Como vemos, en la larga duración de la historia de los conceptos, Begriffsgeschichte, se opera una ampliación de sentido que llega a abarcar a la Tierra entera, entendida como la Casa Común de la humanidad.

Esta ampliación de conciencia se ha expresado en la Carta de la Tierra, luego en la Ley Marco de la Madre Tierra, después viene la Encíclica Laudato Si´ y, finalmente, en el controvertido  Documentum laboris del Sínodo Panamazónico. Estamos hablando, pues, de la carta de navegación de la humanidad del siglo XXI, en la que el Monoteísmo patriarcal abrahámico se acerca al Animismo matriarcal indígena. Este reseteo simbólico, que está sufriendo la humanidad: “dolores de parto”, es epocal y no estará libre de cismas y traumas, para el caso de la iglesia católica, que lidera este proceso de cambio, pero es inexorable y Bolivia ocupa un lugar privilegiado en este debate, en tanto laboratorio de diseño y experimentación de convertir, este enfoque biocultural, en políticas públicas concretas[55].

Estos documentos, tal vez, sean los únicos textos de relevancia global que presentan tantas afinidades. Tratan, en efecto, del estado degradado de la Tierra y de la vida en sus varias dimensiones, en un holón más complejo que el Ambientalismo y el Desarrollo Sostenible. Se inscriben dentro del nuevo paradigma científico de las Ciencias de la Tierra, de la nueva cosmología y las sabidurías ancestrales. Enumeremos algunos acercamientos.

En primer lugar, recogen los datos científicos más seguros, de forma crítica y, en el caso boliviano, en un diálogo de saberes inter científico con la indianidad. Denuncian, todos, el actual sistema político-económico: el capitalismo, que produce el desequilibrio de la Tierra, sugiriendo soluciones concretas que permitan forjar nuevos estilos de vida más frugales. La comprensión de la Reciprocidad es todavía un desafío pendiente. Por eso, la humanidad avanza desiderativamente, pero no puede dar pasos concretos. Se proclama anticapitalista, pero hace nomás capitalismo.

Comparten un mismo punto de partida. Dice la Carta: «Los patrones dominantes de producción y consumo están causando devastación ambiental, agotamiento de recursos y una extinción masiva de especies». Repite la Encíclica: «basta mirar la realidad con sinceridad para ver que hay un gran deterioro de nuestra casa común… el actual sistema mundial es insostenible desde diversos puntos de vista». Bolivia propone recuperar el Principio económico de Reciprocidad: oikonomiké: Ayni, para relativizar la sola chrematistiké del Capitalismo.

Hay la misma propuesta. Afirma la Carta: «Se necesitan cambios fundamentales en nuestros valores, instituciones y formas de vida». La Encíclica enfatiza: «Toda pretensión de cuidar y mejorar el mundo supone cambios profundos en los estilos de vida, los modelos de producción y de consumo, las estructuras consolidadas de poder que rigen hoy la sociedad». Bolivia propone el Vivir Bien: el Suma Qamaña, como un nuevo horizonte civilizatorio que debe equilibrar las energías del Desarrollo. No la lógica monoteísta de O lo uno o lo otro, sino la lógica animista de Tanto lo uno como lo otro.

Una gran novedad, propia del nuevo paradigma cosmológico y ecológico, es esta afirmación de la Carta: «Nuestros retos ambientales, económicos, políticos, sociales y espirituales, están interrelacionados y juntos podemos forjar soluciones incluyentes». Hay un eco de esta afirmación en la Encíclica: «la íntima relación entre los pobres y la fragilidad del planeta, la convicción de que en el mundo todo está conectado, la invitación a buscar otros modos de entender la economía y el progreso, el valor propio de cada criatura, el sentido humano de la ecología y la propuesta de un nuevo estilo de vida». Bolivia coloca el concepto de Pacha como la clave de bóveda de todo su sistema. Pa-cha: complementariedad de dos energías antagónicas, es el diseño que facilita la homeostasis del sistema que regula las energías bosónicas y fermiónicas. En ese sentido, se ubica en un holón más complejo que el regido por el Principio de identidad y no contradicción, de la Carta y la Encíclica.

La Carta afirma que «hay un espíritu de parentesco con toda la vida». Lo mismo afirma la encíclica: «Todo está relacionado, y todos los seres humanos estamos juntos como hermanos y hermanas… y nos unimos también, con tierno cariño, al hermano sol, a la hermana luna, al hermano río y a la Madre Tierra». Bolivia realza la metáfora del parentesco cosmobiológico del Animismo que se expresa en la noción de Ch´uyma: pensar cordialmente, con las entrañas.

La Carta de la Tierra enfatiza que es nuestro deber «respetar y cuidar de la comunidad de vida… respetar la Tierra en toda su diversidad». Toda la encíclica, comenzando por el título “cuidar de la Casa Común” hace de ese imperativo una especie de ritornelo. Propone «alimentar una pasión por el cuidado de mundo» y «una cultura del cuidado que impregne toda la sociedad». Aquí surge el cuidado no como mera benevolencia puntual sino como un nuevo paradigma, amoroso y amigo de la vida y de todo lo que existe y vive. Bolivia propone el concepto de Uywiri que, como ya vimos, se traduce al castellano como Criar la vida y dejarse criar por la vida.

Otra afinidad importante es el valor asignado a la justicia social. La Carta mantiene una fuerte relación entre ecología y «la justicia social y económica» que «protege a los vulnerables y sirve a aquellos que sufren». La encíclica alcanza uno de sus puntos altos al afirmar «que un verdadero planteo ecológico debe integrar la justicia para oír tanto el grito de la Tierra como el grito de los pobres». Bolivia propone el concepto de Ayni.

Tanto la Carta de la Tierra, la Ley de la Madre Tierra, como la encíclica subrayan que «cada forma de vida tiene valor, independientemente de su uso humano». El Papa reafirma que «todas las criaturas están conectadas, cada una debe ser valorada con afecto y admiración, y todos los seres nos necesitamos unos a otros». En nombre de esta comprensión hace una vigorosa crítica al antropocentrismo, pues solamente ve la relación del ser humano con la naturaleza usándola y devastándola y no al contrario, olvidando que él forma parte de ella y que su misión es la de ser su guardián y cuidador. Bolivia levanta su visión cosmocéntrica, como complementaria de una visión solo antropocéntrica. Siempre la complementariedad de opuestos, que todavía no pueden pensar, ni la Carta ni la Encíclica.

La Carta de la Tierra formuló la siguiente definición de Paz: «la plenitud que resulta de las relaciones correctas consigo mismo, con otras personas, con otras culturas, con otras vidas, con la Tierra y con el Todo del cual somos parte». Si la paz, según Pablo VI, es «el equilibrio del movimiento» entonces la Encíclica dice que el «equilibrio ecológico tiene que ser el interior con uno mismo, el solidario con los demás, el natural con todos los seres vivos, el espiritual con Dios». Bolivia, más realista, propone el concepto de Tinku: encuentro ritualizado de contrarios, mucho más civilizado y real, que este romántico punto de vista. En efecto, el Monoteísmo habla de Paz, Shalom,  שָׁלוֹם, pero se las pasa haciendo la Guerra; es más, su economía: el Capitalismo, funciona en base a la guerra. Esa lucidez y sinceramiento le faltan todavía, tanto a la Carta como a la Encíclica.

Todos estos acercamientos epistemológicos, se pueden  visualizar en los siguientes cuadrantes:

La Laudato Si´ y el Documentum laboris se expresan en las cuatro Ecologías siguientes:

  Mental   Ambiental
  Integral   Político social

El Pusini biocultural se expresa en las cuatro Inteligencias siguientes:

  Espiritual   Ecológica
  Emocional   Racional

La Ley Marco de la Madre Tierra se condensa en los cuatro Derechos siguientes:

  Derechos de Todos a una vida armoniosa   Derechos de la Madre Tierra
  Derechos de los pueblos indígenas a sus visiones del mundo   Derechos de los bolivianos al Desarrollo y el Progreso

Ahora bien, el documento del Sínodo Panamazónico sugiere algunos cambios de énfasis estratégicos, que deseo señalar.

El primero, el maniqueísmo cristiano, de origen persa, que separa alma de cuerpo, queda diluido por la afirmación de que los seres humanos somos tierra: humus, de donde, por cierto, viene la palabra hebrea adam, אָדָם‎, tierra fértil. Somos, en realidad, más que hijos e hijas de la Madre Tierra, somos la propia Tierra, que piensa, que ama, que festeja y cuida de todas las cosas. En esta idea, coinciden Atawallpa Yupanqui, en representación de la Indianidad, y la mayoría de cosmólogos y astrofísicos actuales.

Segundo. Vivimos en una nueva fase de la evolución/involución de la Tierra, que podemos llamar de planetización, globalización, mundialización… que estriba, básicamente, en la creciente toma de  conciencia de que este planeta, finalmente, es nomás nuestra Casa Común. Los monoteístas vamos dejando de creer que esta tierra es un lugar de tránsito hacia el más allá. No homo viator, sino homo mayeuticus.

Tercero. La Amazonía es fundamental para el equilibrio del planeta, del sistema climático, de la absorción de dióxido de carbono y, además, regula el ciclo de lluvias en el mundo. Esto significa que toda la humanidad tiene una responsabilidad sobre la Amazonía. El futuro de la vida en la Tierra se juega en la crianza de la vida en la Amazonía.

Cuarto. La visibilización de los pueblos indígenas que moran en esa selva y la valorización de sus conocimientos y tecnologías conviviales. Es decir, los occidentales tenemos que aprender a hacer ciencia, no sólo desde el paradigma masa de la Separación sujeto/objeto, que nos está llevando hacia el Transhumanismo, sino también desde el paradigma energía del Continuo que lleva, no a someter y controlar, sino a colaborar y celebrar. En este nuevo bucle del saber científico, basado, teslaneamente, en energía, los indígenas tienen mucho que enseñar a la humanidad, sobre todo en tecnología psíquica, ya que desde hace cinco mil años, mediante el uso ritual de Plantas Maestras[56], han desarrollado protocolos que permiten ampliar los niveles de conciencia que facilitan conectar y comunicar con dimensiones exopolíticas, que las agencias de inteligencia occidentales ya conocen y usan, pero que siguen vetadas para el resto de la humanidad. Estas orientaciones, parecen clave para ir amainando y menguando la hegemonía del Extractivismo, es decir, de la motosierra, la devastación sistemática de la selva, por sus maderas preciosas; chaquear y quemar para sembrar pastos para exportar carne y producir biocombustibles; por la biodiversidad medicinal de su flora; por la explotación de las así llamadas “tierras ricas” que son metales raros, fundamentales para la nueva tecnología 5G; el exterminio de etnias enteras, la ocupación de sus reservas, la contaminación de los ríos, debido a la extracción del oro. Un eco- y etno-cidio en toda la regla.

Ahora bien ¿Cómo gobernar la Casa Común? He aquí la pregunta cardinal de este breve tratado ecológico político

En todo el mundo se están buscando y ensayando caminos. Voy a compartir lo que se está empezando a hacer en Bolivia, para implementar la Ley 777. Estamos todavía en un momento germinal, avanzando a distintas velocidades e intensidades. Además, por diseño, no debe ser tecnocrática, sino participativa y territorial, intercultural y debe operar como un diálogo de saberes ente Occidente y la Indianidad. Entre el paradigma cuántico y el paradigma animista. Eso la torna morosa. Para ser eficaces, precisamos de una larga paciencia y sincronicidad entre estos cuatro holones de gobierno que estamos tratando.

Lo primero de todo es que, en la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, 2009, se ha fijado el Vivir Bien como la estrategia grande a seguir. Un siguiente hervor ha sido la promulgación de la Ley 300: Ley Marco de la Madre Tierra y Desarrollo Integral para Vivir Bien,2012. Esta ley ha sido fortalecida por la institución de la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, APMT,2014.Los lineamientos y metodologías, producidos por esta instancia, han sido  introducidos en la Ley 777: Ley del Sistema de Planificación Integral del Estado, SPIE, 2016. En esta Ley se complejiza la herramienta de planificación territorial de municipios, PDM, establecida en la Ley 1551, de 1994, por un holón administrativo que le subsume y trasciende: el Plan Territorial de Desarrollo Integral, PTDI.

Lo nuevo estriba en la noción de Territorial que apunta a planificar el espacio, como un ser vivo, ya no como un espacio inerte, solamente administrativo, y por la noción de Integral, que busca trascender los enfoques sectoriales. Para ello se ha diseñado el concepto de Sistemas de Vida, energía, como complementario al de Municipio, masa. El PTDI es la herramienta oficial para alocar los recursos financieros previstos en el Presupuesto General. Una primera aplicación fue llevada  a cabo para el ejercicio fiscal 2016-2020.

Es decir, todo lo que se tenía que hacer a nivel formal: las leyes: función Partícula, ha sido hecho. Su implementación: función Onda, es muy frágil todavía, pues requiere de un cambio de conciencia de parte de los servidores públicos y técnicos gubernamentales que han sido educados dentro del paradigma mecanicista y sectorial y formateados a avergonzarse del paradigma animista, conceptuado como una señal de atraso y una Alfabetización cuántica, todavía no ha llegado al sistema educativo boliviano; tampoco lo que Fritjof Capra  ha llamado una Ecological Literacy. En esas estamos, al 2020.

Deseo compartir la herramienta básica de planificación que es el Pusini. Recuerdo a continuación este instrumento. Léaselo como un mapa conceptual para dejar de pensar lineal y sectorialmente.

  URDIMBRE
TRAMA
    Onda/Bosón Interior / Conjunción   Partícula/Fermión/ Exterior / Expansión
  Uno     Inteligencia espiritual Plenitud y autovaloración   Inteligencia ecológica Crianza mutua de la Vida
  Par     Inteligencia emocional Pertenencia e identidad   Inteligencia racional Cuidado colectivo de la Casa Común.

La Urdimbre vertical está compuesta por las energías Onda/Partícula que expresan las energías de la Conjunción / Disjunción: el sístole y diástole del Sistema de Vida; así como lo interior y lo exterior: lo tangible e intangible del mismo. La planificación de desarrollo no entra en esta complejidad, porque se las ha con objetos inertes y fragmentados.

La Trama horizontal está compuesta por la propiedad del Ser de manifestarse, ora como Uno, ora como Par. Ambas dimensiones hacen la cabalidad. La planificación del desarrollo solo tiene en cuenta al Uno y, a saber, en su patencia como masa: lo medible, cuantificable y monetizable, básicamente[57].

El trenzado de lo vertical masculino y lo horizontal femenino diseña las cuatro Inteligencias del Vivir Bien, que se corresponden con los cuatro Derechos de la Madre Tierra[58] y las cuatro Ecologías de la Laudato Si´.

Las interacciones mutuas de estas cuatro Inteligencias/Derechos/Ecologías, las coagulamos en la Repercusión adaptativa, entre lo ecológico y lo racional, la Reverberación relacional, entre lo racional y lo emocional, la Transformación personal, entre lo emocional y lo espiritual, y la Resonancia ritual, entre lo espiritual y lo ecológico.

Esa es la herramienta con la que pretendemos planificar participativamente la Gestión de los Sistemas de Vida como alternativa a la Economía Verde o, dicho de otro modo, como la complementariedad de Capitalismo y Reciprocidad[59].

Si este Cuadrante, lo ampliamos y desplegamos, se convierte en una Chaqana o Cruz cuadrada que es la herramienta diseñada en los Andes para pensar las interrelaciones: el Entre, lo que Heidegger llamara el Zwischen.

  Inteligencia espiritual       Resonancia ritual   Inteligencia ecológica
                       Trans-formación personal         Vivir Bien           Repercusión adaptativa
  Inteligencia emocional     Reverberación relacional     Inteligencia Racional      

Este Pusini / Chaqana prolonga, en holones más abstractos, la evolución biológica de la Vida, desde la formación de las primeras moléculas, a través de un proceso autopoiético (auto organización / estructuras disipativas / retroacción), para luego formar las primeras células procarióticas (sin membrana), luego las eucarióticas (con núcleo). Dicho proceso es fundamental para la formación de los organismos neuronales, que, luego, fueron evolucionando, desde la concepción triúnica de MacLean (cerebro reptílico / paleomamífero / neomamífero), para formar el cerebro del homo sapiens. Por esta razón, el ser humano tiene la ventaja de ligar lo emocional (paleomamífero), con lo cognitivo (neomamífero), para poder jugar, amar, planear a largo plazo y poder sentir pasión y compasión por su misma especie y la naturaleza[60].

De ahí que el diseño de nuestros Sistemas de Vida deba explicitar más claramente la ética animista de la Crianza recíproca de la Vida que muestra, tanto a la naturaleza como a los humanos, como holones, es decir, como totalidades / partes interdependientes y no como factores bióticos o abióticos aislados, como sostiene la academia actualmente; olvidándose, incluso, de lo antrópico, en la concepción de lo que sea un ecosistema.

La ética de la Crianza mutua de la Vida inculca el cariño, el respeto, la reverencia y la celebración hacia toda forma de vida; pues, todo está vivo: la vida humana, animal, vegetal y mineral; también las vidas intangibles. Esta ética no es idealista: “no hay que cortar un solo árbol” o “no hay que cazar”; es sacramental: hay que pedir permiso, licencia, al Dueño de los animales y de las plantas (ficción cultural), para tomar lo que se precisa, para la reproducción de la vida; no para lucrar.

Es una ética que ofrece una organización social: la Forma Ayllu, que facilita al ser humano vivir sin necesidad de convertirse en lobo para el hombre, en plaga para la naturaleza, en víctima/victimario del control mental, producido bajo trauma, de su sistema político-religioso[61].

La comprensión holónica del universo facilita construir un talante ético y moral hacia los holones no humanos; lo cual permite deducir que todo lo que existe, tanto en la fisiosfera, biosfera, como en la noosfera, tienen sentido, por sí mismos, y tienen la finalidad de facilitar la auto organización y el mantenimiento de la trama de la vida y del universo.

Para pensar un Sistema de Vida es preciso activar el lóbulo cerebral derecho y potencializar el lóbulo izquierdo que es el que se utiliza normalmente; por ejemplo, en este caso, para planificar el Desarrollo de un Municipio. Cuando estamos en plan “técnico”, solemos pensar lineal y secuencialmente. No se nos ocurre activar las capacidades hologramáticas de nuestro lóbulo neuronal derecho. No estamos habituados a este ejercicio. El lóbulo izquierdo se nos activa automáticamente, debido a la formación escolar recibida.

Como éste, es un asunto de software, es decir, de programación neurolingüística, sugiero visualizar figuras geométricas y, en este caso, cuadrados o circunferencias anidadas: cuadrados dentro de cuadrados o círculos dentro de círculos; mejor aún: toroides dentro de toroides, pues es así como se articula y funcionan los sistemas vivos.

Este ejercicio de visualización nos va a permitir interiorizar, grabar en nuestros tractos neurales, modelos no lineales para comprender y expresar la realidad de un modo más fiel.

A continuación propongo un ejemplo básico de cómo pasar de energía a masa: de un Concepto a un Plan y, de ahí, a un Presupuesto y, de ahí, a una Ejecución, entendida como una comunidad de aprendizaje y retroalimentación: comunidad / entidad ejecutora, para vivir bien.

A fines de este texto, empero, me quedaré en la primera parte: pensar / sentir: diseñar el espacio como un ser vivo y, a saber, comunitariamente. Aquí empieza la Gobernanza de la Naturaleza, en un nivel interactivo local.

Este Pusini debe arrojar un Mapa Parlante del Sistema de Vida. Cuando la comunidad de aprendizaje ha concluido su Mapa Parlante, sucede algo maravilloso: tienen en su mente y en su corazón la Big Picture de su Sistema de Vida. Saben dónde están, quienes son, con quienes conviven y cómo podrían modelar un estilo de vida bueno para todos. De esto trata y eso busca la estrategia del Vivir Bien.

La Caja de Herramientas energéticas para este ejercicio, lo pueden consultar en mi libro Pasos hacia una Biosofia del Vivir Bien.

A continuación ofrezco el Pusini biocultural con las Preguntas orientadoras más importantes para elaborar la cartografía energética de un Sistema de Vida. Se trata sólo de una ayuda memoria para acicatear la creatividad e imaginación de los facilitadores.

El ejemplo es rural. El Mapa parlante de un Sistema de Vida urbano es más difícil, debido al desencantamiento del mundo: die Entzauberung der Welt: Max Weber. Un par de tips, sin embargo, pueden ayudar. Los lugares de poder han sido extirpados u ocultados; pero no del todo: donde hay iglesias, hubo Waka-s. En La Paz, por ejemplo, los miradores del Montículo y Killi Killi. En Lima, en los barrios de Miraflores y San Isidro, siguen las Waka-s prehispánicas significando el espacio urbano; el Zócalo, en Ciudad de México, es otro caso célebre, y así. La Abadía de Montserrat, por ejemplo, encubre/descubre, la civilización Madre, anterior al Diluvio. Nos guiña desde la Virgen Negra: la Moreneta. Gaudí ha trasladado la Montaña sagrada a un contexto urbano con la construcción de la catedral de la Sagrada Familia que es, en realidad, la réplica arquitectónica y orgánica de una Waka animista y matriarcal que reproduce los peñascales y oquedales, animados, poblados de vida, de la serranía del monte sagrado de los catalanes.

Ofrezco el Mapa mental que he probado en 25 municipios rurales de Bolivia, para la elaboración de sus PTDI.

  URDIMBRE
TRAMA   Onda/Bosón Interior /Manqha: Conjunción Partícula/Fermión Exterior/Aka: Expansión.
  Uno Individuo Unidad Ma-cha,     Waka: Lugares de Poder, Ch´ullpa: Entierros presolares; Punku: Umbrales inter dimensionales; Qaqa: roquedales: Pucara: fortalezas, miradores; volcanes. Lugares ceremoniales: peregrinación, iniciación, consagración. Pacarina: manantiales de origen; Sirinu: manantiales o cascadas donde se energetizan ctónicamente los instrumentos musicales. Achachilla/Apus: cerros protectores macho; cerros protectores hembra; Siqi: líneas imaginarias energéticas que demarcan un perímetros de poder: energías fuertes. Vía Láctea; Cruz del Sur: Chaqana. Taki/Ñan: camino de los varones, de las mujeres, de los ancestros, de los animales, de los seres benéficos, de los seres maléficos, de las almas no bautizadas. Caminos del cristianismo: iglesias, santuarios, calvarios, monasterios, casas de retiro. Taki/Ñan: caminos de las heladas, vientos, lluvias, granizo, terrales, bancos de niebla, bosques de niebla. Taki/Ñan: senderos de los animales silvestres, de los animales domesticados: llamas, ovejas… Taki/Ñan de las semillas, de las plantas medicinales. Vertientes, aguas termales, geisers, cursos de ríos, lagunas, lagunas sagradas, bolsones de aguas subterráneas. Pisos ecológicos: suni, chaupi, valles, yungas secos, yungas húmedos. Pisos ecológicos a los que acceden: dibujar la red neural. Plantaciones: soya, caña, café… Represas, pantanos. Zonas ganaderas, forestales Minas, petróleo, gas, campamentos. Áreas protegidas: nacionales, inter departamentales, municipales.
  Par Colectivo Multiplicidad Pa-cha, Aran-Urin-Taypi del Ayllu: la parcialidad masculina, la femenina y la línea de encuentro. El Tinku: los rituales de encuentro agonístico entre ambas mitades: fechas. Lugares saxra: patógenos y lugares pata: saludables, tanto masculinos como femeninos. Aynokas: chacras que descansan circulando; chacras familiares, zonas de pastoreo, descanso. Chaco de vicuñas, fauna silvestre, ahijaderos. Lugares de encuentro público: ferias (ganaderas, agrícolas, comerciales), fiestas, chicherías, canchas de futbol, Polideportivos, campeonatos, concursos, festivales, corridas de toro, tinkus. Sitios arqueológicos: ancestros, Chinqana: laberintos iniciáticos. Lugares de sanación, conexión con otros Pacha, Pajchiri, por ejemplo. Taki/Ñan: caminos de reciprocidad: ayni, minka…tecnologías de la reciprocidad. Taki/Ñan de las parejas (endogamia, exogamia), migración de una parte de la pareja. Taki/Ñan de los textiles: fibras, teñidos, diseños. Lugares de migración, nacionales e internacionales. Parientes asentados fuera: dónde. Bolivia va hasta dónde van los bolivianos (Entrada del Gran Poder en Buenos Aires o Virginia iuesei…) Asentamientos y otros domicilios: doble domicilio. Carreteras, caminos, senderos, cachanchadas. Gasolineras, trancas, aduanas. Caminos del contrabando, narcotráfico, transhumancia. Cuarteles y Comisarías, UMOPAR, Aduanas. Hospitales, postas, leprosorios Escuelas, colegios, politécnicos, UACs, universidades, CEAs: cómo circulan los estudiantes. Alcaldía, sub gobernación. Diáspora: destinos migratorios. Lugares de trabajo estacional. Caminos del Dinero: bancos, cajeros, lugares de migración: Chapare… Redes de servicios públicos: agua, gas, electricidad, saneamiento básico Proyectos de ONG, universidades, fundaciones, cooperación internacional. Información que contienen los PDM.

Esta cartografía energética, dinámica, intangible, emocional, es complementaria a la de nuestros mapas municipales, diagnósticos, estadísticas, et coetera. De este modo, pensamos, podríamos avanzar en la comprensión de cómo ir avanzando en el desafío de visualizar un Sistema de Vida y qué elementos más hay que tener en cuenta para que resplandezca el Vivir Bien, como política pública.

Para redondear este capítulo, ofrezco las sentencias políticas que los aymaras prehispánicos tenían, como guía, para este holón organizacional.

 Aymara prehispánico Traducción siglo XVI Traducción siglo XXI
Ahni-puni ñajjossimti Nunca jamás te excedas ni en comer ni en beber ni en dormir Jamás llegues a la saciedad
Ahni-puni patamti Nunca jamás quieras hacerte vicioso ni impío ni criminal Jamás abuses de tus iguales  
Ahni-puni uywachassimti Nunca jamás abuses de las bestias ni de las aves ni de los pejjes Jamás dejes de criar la vida    
Ahni-puni lackachassimti Nunca jamás abuses de las sales ni del oro ni de la plata ni de los metales que oculta la tierra Jamás abuses de las energías de la tierra
Ahni-puni kheruchassimti Nunca jamás abuses de ninguna clase de árboles ni de sus maderas ni frutos Jamás abuses de la biodiversidad de la naturaleza

Segunda parte: Pragmática

No propongo reformas, revoluciones, menos aún la guerra, para resetear la Matrix. Sugiero, simplemente, una pequeña Bifurcación civilizatoria, que estriba en  Dosificar y colocar mejor los Énfasis, desde la lógica del Tanto lo uno como lo otro y la búsqueda de la homeostasis político-social, para, así, resonar armónicamente con la biosfera.

Pienso desde Bolivia: uno de los países menos occidentales del planeta; poblacionalmente pequeño: alrededor de diez millones de habitantes y, ecológicamente, con grandísima diversidad biológica, donde las dos energías del universo, visualizadas en el nivel de sociedad: Monoteísmo: energías Fermión, y Animismo: energías Bosón, se distribuyen casi en partes iguales y que, en los últimos treinta años, ha construido una infraestructura pública y privada suficiente (goteo de los mitos de progreso y desarrollo) que nos permitirían, ahora, activar los mitos animistas del vivir bien, para complementarlos mutuamente.

Mas, he aquí que, en pleno ensueño, digiriendo la caída de nuestro Nabucodonosor, el Ángel de la Historia ha activado el Freno de Emergencia de la Locomotora de la Historia de Walter Benjamin y ésta, por fin, se ha detenido abruptamente. Veo cómo, en cámara lenta, la humanidad entera empieza a estamparse en el frontis de sus vagones respectivos; porque el ímpetu era también interior.

Un frenazo exopolítico, a todas luces: el Ángel de la Historia.

Como la Historia también tiene naturaleza fractal y se repite, no puedo evitar pensar en dos referencias bíblicas. La primera dice así: Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra. Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra: Génesis 6, 12-13.  

La segunda es la siguiente: Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí. Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla. Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra. Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos estos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer. Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad. Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra. Génesis 11:1-9.

La humanidad está volviendo a vivir la experiencia que antecedió al Diluvio y también la vivencia de la Torre de Babel: la confusión de las lenguas. A esa experiencia arquetípica se le llama, ahora, propaganda, posverdad, fake news, noticias truchas, marketing electoral, manipulación mediática… No es algo nuevo, ni de ahora. Lo nuevo es la abrumadora metralla cruzada a la que somos sometidos desde los propios gobiernos e instancias supranacionales y que apunta, diabólicamente, a nuestro cerebro reptiliano y que no podemos, sencillamente, procesar. Se instaura el Miedo, en la “Infósfera”, Regis Debray, en Modo Caos y en ritmo paranoico. Su paroxismo se llama, ahora, Cuarentena por Corona virus.

Que la humanidad tiene que deconstruir, lo venimos oyendo insistentemente desde los Sesenta, por activa y por pasiva. Los más sabios lo ha empezado de grado; ahora, todo indica, que será a degrado y a la fuerza. ¡Ni modo! No creo, empero, en el Punto aparte y menos en el Punto final, sino en un degradé infinito de Puntos suspensivos que, con el paso del tiempo, van insinuando configuraciones que llamamos culturas, civilizaciones…

Para los de mi matria chica, había pensado decirles que, ahora, es el tiempo de cultivar el Arte de la localidad: de privilegiar los circuitos cortos, las rondas de proximidad, los servicios de cercanía; de cultivar la familiaridad, la amistad, la comensalidad, la hospitalidad: hacer que la Reciprocidad: el Ayni, vaya haciendo masa crítica, pari pasu también seguimos tocando las teclas del Capitalismo y el Monoteísmo, pero minimizadas.  Todo esto, como una nueva manera de rediseñar lo Político, after Evo. Forzados a este punto, empero, me pregunto si mi sugerencia podría ser también útil para el resto de la humanidad. Me tinka que sí. En cualquier caso, la Notbremse benjaminiana no ha sido la Revolución. Parece que es un Pachakuti: el vuelco y trastrueque de las dos energías que componen la realidad.

Energía: el diseño conceptual

El diseño occidental, operativamente, estuvo marcado por Plotino, 205-270, un filósofo griego, gnóstico neoplatónico, que vivió en Alejandría y Roma e influyó grandemente en la tradición cristiana. Su discípulo y editor, Porfirio, refiere que solía recoger en su casa a niños huérfanos a quienes hacía las veces de tutor, tenía un carácter dulce y afable, llevaba una vida ascética y mística, era vegetariano y, significativamente, no se casó. Señaló tres vías que marcarían la espiritualidad, religiosa y laica, de Occidente: la vía purgativa, la vía iluminativa y la vía unitiva, sin las cuales el Capitalismo y el maltrato de la Naturaleza, no son pensables y de las que hay que salir lo más pronto posible, antes de que sea demasiado tarde. Bueno, ya es demasiado tarde. La Cuarentena sanitaria global es el punto de inflexión.

Me explico. En la vía purgativa, el alma se purifica de sus vicios y pecados (que le impiden orientarse plenamente hacia Dios) mediante la privación corporal y la oración.  Prescinde de los otros y de la naturaleza. Se aísla. La vía iluminativa: una vez purificada, el alma se ilumina al someterse total, única y completamente a la voluntad de Dios; como el alma tiene cuerpo, el demonio la tienta recordándole que los otros y la naturaleza también existen y son bellos y amables. La vía unitiva: el alma se une a Dios, produciéndose el éxtasis que anula los sentidos: las conexiones con el entorno. Este tipo de unión produce gozo y dolor, al mismo tiempo, experiencia contradictoria que no se puede describir, sino sólo balbucir.

He aquí que estas vías han producido un Camino autista que termina entumeciendo la empatía humana: se puede explotar al otro y expoliar a la naturaleza, porque la penitencia y la oración los han sacado de la pantalla de lo real: solo Dios basta. Léase: la Abstracción.

La Vía bosónica

El paradigma plotiniano puede ser trascendido mediante la activación de nuestras energías bosónicas que tiene que curarnos del autismo espiritual, al restaurar las conexiones cosmoteándricas para que vuelvan a fluir las energías de la conjunción por la red cosmobiológica del universo. Esta es la savia toroidal de lo político.

Cuatro énfasis son importantes, a este respecto.

El primero es la Reverencia por la Fuente Originaria de la que todo dimana; el resonar admirativo con este Vacío Grávido y sentirse uno con el Uno; vibrar de consuno con sus manifestaciones: las leyes de la natura y evitar densificarlo en un dios o muchos dioses, que no son  sino hierofanías suyas en la dimensión en la que ahora somos. Estos dioses han esclavizado a la humanidad y nos han hecho infelices. Suficiente.

El segundo énfasis es maravillarse, loar, cantar y danzar el milagro de estar vivos entre dos pestañeos y minimizar la preocupación por el futuro, atenuando la primacía del Dinero: la tecnología para producir futuro y miedo, que son el corazón de la dominación política. No hay libertad política sin afirmación del Ahora y la Reciprocidad.

Un tercer énfasis es cultivar el deleite de los sentidos, tanto tangibles como intangibles; cultivar el lenguaje de la caricia: el bálsamo que lubrica y sana todas las interconexiones del sistema: también se debe acariciar una planta, una piedra, la brisa del viento o dejarse acariciar por el oleaje del agua.

El cuarto énfasis es cultivar el enamoramiento. Hoy sabemos, por las neurociencias, cuáles son los neurotransmisores, como la dopamina, la oxitosina… que nos hacen caer en el amor, nos tornan amorosos y también cuáles son los alimentos que los fomentan o inhiben. Todo nos puede enamorar; no sólo nuestra pareja. Esta es la base de toda política de paz, seria, es decir, no kantiana.

La Vía creativa

Esta vía dispara en nosotros las capacidades de crear algo nuevo, de inventar e innovar, de suerte que la vida en común, la democracia, disuelva los dispositivos subliminales de control y dominio de la estandarización, no sólo de objetos, también de actitudes, modas y estereotipos de control emocional, diseminados desde Hollywood, que nos llevan hacia la homogeneización: la gaya ciencia del control mental de la humanidad actual. La libertad política no es posible sin heterogeneidad cultural, diversidad biológica e irrupción de lo totalmente inesperado. Lo otro, es la antesala de la muerte.

Cuatro énfasis son importantes, a este respecto.

El primer énfasis suscita conscientemente las potencialidades seminales que entraña todo ser: nada ni nadie está ya acabado, es mondo y lirondo; todo es capaz de más y de nuevo; la vida es, porque es capaz de aprender y reciclar.

El segundo énfasis tiene que ver con la Intuición. La civilización occidental, desde los griegos, hizo una apuesta por el Logos, la razón, lo analítico, es decir, activó más el Cortex cerebral y minimizó la Intuición, como algo no muy controlable. En el trasfondo, está el desmontaje masculino del Matriarcado y el surgimiento de la filosofía y de la democracia de la Polis, que son patri dominantes. De ahí la importancia de la Forma Jaqi y de la Forma Ayllu, para relativizar las energías masculinas y encontrar un balance político: un camino del Medio.

Lo que ahora sabemos, por las neurociencias, es que el ser humano tiene dos formas de procesar la información. Por un lado, el modo intuitivo que es rápido, anclado en los ganglios basales: hardware, y en el principio Contradictorio: software, y, por otro lado, el modo analítico que es más lento, basado en el Cortex y que activa el sistema lógico no contradictorio; por tanto, fomenta el principio de identidad. En este modo, conocemos por fe: philosophus dixit y, en el otro, por experiencias propias que, al vivirlas conscientemente, van creando nuevos tractos neurales y nuevas conexiones sinápticas. Los dos modos, son necesarios, pero, ahora, el énfasis debe buscar curar el planeta.

El tercer énfasis que debemos criar es la imaginación. La neurociencia ha demostrado que al imaginar se activan los mismos circuitos cerebrales que cuando lo hacemos en la realidad. Si imaginamos, por ejemplo, que estamos haciendo un deporte, el cuerpo responde como si fuese cierto, es decir, se acelera nuestro ritmo cardíaco, nuestra respiración, nuestra tensión arterial,  se producen micro contracciones musculares. Nuestra imaginación, pues, funciona como un simulador virtual interno con el que podemos crear, producir e incidir en nuestro organismo y en la sociedad. Si queremos otro mundo, tenemos, primero, que imaginarlo, visualizarlo y desearlo.

Un cuarto énfasis tiene que ver con cultivar  nuestras habilidades. El cerebro atraviesa un período de desarrollo y maduración que comienza antes del nacimiento del niño y continúa hasta alrededor de los 24 años. Durante la infancia el cerebro alcanza un período de gran crecimiento y desarrollo.  No debiera sorprender entonces que experiencias negativas, a esa temprana edad, inhiban o tuerzan nuestras habilidades con las consecuencias sociales y políticas que podemos imaginar. La calidad de la democracia se juega aquí. Para ello, no queda otra que abolir la escuela actual, urbanizar el campo y ruralizar las ciudades: redistribuir las poblaciones más sabiamente: ciudades intermedias, pueblos en transición, eco aldeas: Forma Jaqi y Forma Ayllu, y, en ese impulso, rediseñar un sistema de conocimiento y sabiduría que habilite una nueva manera de morar sobre la Tierra como una red interconectada globalmente que redistribuya equitativamente el bienestar logrado. Tecnológicamente, esto ya es posible. El Capitalismo: la producción de la escasez y la acumulación de la riqueza en el vértice de la Pirámide sacrificial, lo impiden.

La Vía Fermiónica

Esta vía afirma y apura las energías que son parte de la polaridad fuerte, de las fuerzas centrífugas, expansivas, de spin levógiro, para transmutarlas y metabolizarlas. Voy a echar mano de dos modos de abordaje que conozco: Meister Eckhart y C. G. Jung: dos germanos no cabalmente cristianizados; de ahí su importancia.

Eckhart dice que el piso del alma es sombrío. Ello implica que no puede haber un viaje de la superficie a la profundidad sin pasar por la oscuridad. Eckhart también nos dice que Dios es la oscuridad por antonomasia. Por tanto, no es dable un encuentro con la divinidad que sea meramente  en la luz. Lo divino debe ser hallado, en las profundidades de lo obscuro y de lo luminoso. Atreverse a la oscuridad es permitir al dolor, ser dolor y aprender de él. La mística marrano sefardí habla de la Noche oscura del alma

Sombra fue un término que Jung tomó de NietzscheMenta la personalidad oculta que todos tenemos: dimensiones reprimidas, instintos heredados, donde se agazapa la violencia. El arquetipo de la Sombra no es solo individual: está presente en toda la holoarquía de la vida: familias, comunidades, naciones, instituciones: partidos políticos, iglesias, estados, corporaciones. La Sombra es más destructiva, insidiosa y peligrosa cuanto más reprimida está;  entonces se proyecta como neurosis o psicosis. Jung diferenció en su Arquetipo de la Sombra dos tipologías. La primera es la sombra personal: nuestros miedos, egoísmos, celos, envidias, frustraciones y dinámicas negativas. Sin embargo, también existe la sombra impersonal, política, que se manifiesta en genocidios, ecocidios, holocaustos de personas y bosques, terrorismo: individual y estatal, hambrunas y migraciones provocadas, pandemias de laboratorio, banderas falsas, desastres naturales provocados por geo ingeniería, inflaciones/deflaciones monetarias, caídas de la Bolsa, guerras…

Cuatro énfasis son importantes, a este respecto.

El primero es el Vacío que el Budismo llama Sunyata, en alusión a la idea de que cuando observamos las cosas como son, lo que percibimos es su  impermanencia. Esto nos aterroriza a los occidentales; por eso nos hemos inventado la ontología. La otra dimensión del Vacío que nos acojona es la sensación de la vacuidad que nos impele a atiborrarnos de cosas; neurosis que satisface el Capitalismo consumista actual. En realidad son ilusiones. Lo que hay es interdependencia y, a saber, nada tiene sustancia permanente e independiente del resto de seres. Por ello, hay que despertar al Vacío radical que abre el horizonte hacia algo más grande que nuestra mera existencia, los seres y los enseres. Al entender este Vacío, esta interdependencia universal, minimizamos nuestro yo, encerrado en un universo de nimiedades y florecemos en un amor compasivo, abierto a todas las criaturas, superando así las fronteras de lo humano y lo no humano.

El segundo énfasis es la experiencia de la Oscuridad. El retorno a lo oscuro es también un retorno a nuestros orígenes; fuimos todos concebidos en la oscuridad, vivimos nuestros primeros nueve meses en la oscuridad y estuvimos desde toda la eternidad en el corazón oscuro del Vacío cuántico que precedió a la creación del fuego y de la luz. Tenemos miedo a la oscuridad porque hemos sido educados en una sola polaridad y porque la electrificación del mundo ha hecho que las noches sean menos Noche. Ya no sabemos cómo cobija la luz de la Vía Láctea.

El tercer énfasis es el Silencio que es otra ilusión producida por el Ego y la cosificación del mundo. En realidad todo habla y emite señales. El cosmos es un grandioso rumor lleno de musicalidad como nos enseñaron los pitagóricos y nos lo recordó fray Luis de León. La Palabra va siempre precedida del silencio; la escucha de la reverencia. La escucha solo es posible si hay silencio. El silencio habla, si nuestro ego se minimiza. El diálogo democrático de los espacios públicos, solo puede emerger de un cultivado silencio individual. Así debiera frutear la democracia liberal, basada en el individuo; la otra vía complementaria, la animista, es el acullico de los jaqi en un círculo de conversaciones que no busca la verdad sino el consenso.

Un cuarto énfasis tiene que ver con la Separación, con la disjunción: la polaridad complementaria de la conjunción. Tenemos que saber que sin diástole no hay sístole; no hay pulso, vibración. Hay que aprender a separar para volver a juntar y hacer brotar el Tercero Incluido que es lo que liga la red cosmobiológica, ifotónica, del universo.

La Vía transformativa

Esta víaes más interactiva, voluntarista: alquímica; busca el Camino del Medio produciendo la masa crítica necesaria en la polaridad que hace falta equilibrar.

Cuatro énfasis son importantes, a este respecto.

El primero busca minimizar y relativizar el Miedo. El mecanismo que lo desencadena, como sabemos, se encuentra en nuestro cerebro reptiliano, que regula las acciones esenciales para la supervivencia, así como en el sistema límbico, que es el que regula las emociones y las funciones de conservación del individuo. Cuando la amígdala detecta una fuente de peligro, desata sentimientos de miedo y ansiedad. Las hormonas que genera el cerebro, con el susto, tienen el objetivo de preparar al individuo para una respuesta violenta. Ahora bien, es preciso comprender que el modelo político piramidal se basa, para ejercer la dominación política, en la violencia, activada automáticamente por nuestro cerebro reptiliano y es, justamente, el Capitalismo, en una sociedad monetizada, el que se encarga de activar dichos mecanismos. El uso político del Dinero (la subida o bajada de las Tasas de interés, las inflaciones y deflaciones, el desempleo de diseño, las pandemias de laboratorio: Sida, Corona Virus…) activa la adrenalina que nos torna miedosos y violentos. ¿Cómo atenuar y subir esas bajas pasiones? Activando nuestro cerebro mamífero que tiene la capacidad de generar confianza: en los otros y en la Vida. La tecnología económica para ello es la Reciprocidad: el Ayni, que activa nuestras capacidades de conectividad y empatía haciendo circular las energías, para evitar la acumulación cancerígena de poder: político, económico, simbólico…

El segundo énfasis busca combatir la Injusticia. El Monoteísmo, al emanciparse (imaginariamente) del entorno cosmobiológico, reemplaza las leyes cósmicas de equilibrio y homeostasis, por un Estado de Derecho, basado en leyes civiles, que buscan favorecer (taimadamente: la letra chica) al vértice de la Pirámide de Poder: las elites. Como este dispositivo desequilibra, por diseño, he aquí que la tradición profética del judaísmo, levantó la noción de Justicia, Tzedaka, צדקה, como  Tikún Olam:  תיקון עולם, reparar el mundo, para buscar la homeostasis del sistema político, así como la noción de Jubileo, יובל, para buscar la homeostasis del sistema económico. Pues bien, como el monoteísmo sive capitalismo, ya están instalados en esta humanidad (no podemos hacerlos desaparecer) pues hacen, también, a otros elementos de nuestro actual estilo de vida: el Tener: Desarrollo, no tenemos otra opción que buscar su relativización mediante la activación de las energías opuestas del animismo y la reciprocidad: el Ser: el Vivir Bien. En esto estriba el Camino del Medio y el Arte de la Localidad.

El tercer énfasis busca convivir en Mutualidad, es decir, busca activar el estilo de vida ecológico, animista y matriarcal, que fue interrumpido, violentamente, por el patriarcado monoteísta y extractivista: Gilgamesh. En nuestro caso, significa activar, políticamente, la Forma Jaqi y la Forma Ayllu, sobre los cuales ya hemos hablado en la primera parte de este Tractatus. Económicamente significa activar las energías bosónicas de la Economía, que está motivada por la necesidad del otro, por el bien común, entendido no como la suma de bienes individuales, sino como la creación del ser comunitario, ese Tercero incluido e indivisible que no es reductible a la suma de las partes y que no  puede ser propiedad de nadie. Una estructura mutualista de reciprocidad prohíbe el nacimiento de toda privatización, impide la acumulación, la expoliación y la explotación. Políticamente se basa en el principio federativo que se modula mediante la lógica descentralizada de la subsidiaridad y del funcionamiento en redes, cultivando lo que hemos llamado el Arte de la Localidad.

El cuarto énfasis busca la homeostasis de la Tierra. El tránsito de la HipótesisGaia a una Teoría científica muestra que la humanidad está volviendo hacia una comprensión animista y matrística del Universo. Gaia expresa un conjunto de modelos científicos de la biosfera que postulan que la vida fomenta y mantiene unas condiciones adecuadas para sí misma, afectando al entorno. La atmósfera y la parte superficial del planeta Tierra se comportan como un todo coherente, donde la vida, su componente característico, se encarga de auto regular sus condiciones esenciales, tales como la temperatura, composición química y salinidad, en el caso de los océanos. Gaia se comportaría, pues, como un sistema inteligente que se auto-regula y, por tanto, tiende al equilibrio. Lovelok y Margulis definen, significativamente, la Homeostasis como hospitalidad; hospitalidad cósmica.

Masa: las configuraciones concretas

Los sueños del Plan Bohan, década del Cuarenta: unas Tierras Bajas agroindustriales, que proporciona al MNR la estrategia de larga duración de la Revolución Nacional, de 1952, se cumplen con la Revolución Democrática y Cultural, 2006-2020, del MAS, liderada por el cocalero Evo Morales. La así llamada Media Luna (otrora un Santuario Marrano) está empeñada en cumplir el mandato del Génesis de dominar la tierra, crecer, urbanizar y consumir a gran escala: ser la Locomotora, extemporánea, de la Historia y de la Economía boliviana. Simbólicamente, ha sacado del Palacio de Gobierno, al idólatra Evo Morales, con la Biblia y el Crucifijo en la mano, con la discreta asistencia técnica y financiera del Comando Sur, del Pentágono-Wall Street, que tiene los ojos puestos en el negocio del Litio, mientras el paisanaje (no puedo hablar, desgraciadamente, de ciudadanía) es distraído, ahora, electoralmente. La Bolivia soterrada, que cultiva en las Tierras Bajas el producto más exitoso de la Economía Campesina: la Coca y sus derivados industriales, está carcomida por las cancerígenas energías fermiónicas del narcotráfico, la expansión de la frontera agrícola sobre suelos forestales y por la minería del Oro que, en este nivel sumergido de ilegalidad de diseño, no hace diferenciaciones políticas: gobierno / oposición[62].

Así, pues, la Economía sumergida y delictiva, que es la que gobierna el Mundo entero, ahora, es el telón de fondo, desde el que es propuesto este Tractatus oecologico-politicus, en su dimensión operativa y práctica. Esto le hace absolutamente diferente al resto de tratados de economía política que se basan sobre una descomunal tomadura de pelo: la economía legal: contabilizable y auditable: un simple protocolo para engañar al paisanaje global. Me asombra más, empero, el silencio de la academia y de las iglesias. Que el Tiempo se lo cobre.

La propuesta racional: legalizar las drogas, ya lleva más de medio siglo alborotando congresos científicos, simposios políticos, talleres de ONG, etc, Pero no pasa nada y no va a pasar nada, porque la Banca de la City y Wall Street, también el IOR, los gobernantes de turno de todo el mundo, lo van a impedir. Lo están impidiendo. Basta llegar al Poder (aun habiendo nacido en una choza o un pahuichi) para caer en sus garras, tanto si se lo quiere como si no; mejor, claro, si no se desea que le hagan desparecer discretamente, lo racional es terminar queriéndolo. Estamos, pues, ante una trampa letal, ante un dispositivo diabolique, producido por las energías fermiónicas del Capitalismo. Los jóvenes tienen que tener lucidez sobre esto. Los políticos se corrompen, no por el pecado original, sino porque el formato piramidal de la Forma Estado es corrupta por diseño.

Por tanto, sugiero dejar esa monserga y cambiar de diseño estratégico. Metafóricamente: hay que dejar el Ajedrez: blancas ganan a negras: “lucha contra las drogas”, “lucha contra el Covid-19” y empezar a jugar Go, el milenario juego chino de estrategia que, literalmente, significa «juego de envolvimiento». Se trata de controlar el espacio, célula a célula, no enfrentando, sino acorralando y envolviendo al adversario, con un movimiento de fichas, nada espectacular, como un Gambito de Reina, sino de rodear y acorralar hasta terminar ahogándolo: hay que drenar las aguas pestíferas del Capitalismo. En el Go, no hay reyes, ni reinas, ni torres, ni alfiles, ni caballos; todos son peones que dan puntada con hilo.

De ahí lo prosaico, cotidiano y concreto de mi propuesta ecológico-político-espiritual que, básicamente, sugiere un modelo de regeneración celular. Lo que es posible biológicamente, también es posible políticamente. Podemos regenerar molecularmente la vida en el planeta, al regenerar nuestras propias células y las de nuestro entorno inmediato. El resto lo hará la ley cósmica de la inter conectividad universal de las resonancias mórficas.

Esta es la Bolivia que tengo en mientes, como telón de fondo, de las Configuraciones concretas que deseo proponer para pensar y actuar y no des-animarse.

Soy consciente, asimismo, que mi sugerencia, en la larga duración de lo Político, en Occidente, marca un punto de inflexión. No pongo el acento en el Templo y sus tecnocracias sacerdotales piramidales: lo público exotérico, sino en la intimidad de la casa, en Shabbath, שבת, como el corazón-semilla de lo Político esotérico, en tanto Tikún Olam:  תיקון עולם, reparación del mundo.

 Doy un giro de tuerca más, al lema estudiantil y feminista que dijo, en los Sesenta, que lo privado es también político. Yo le quito el también y le añado: es lo esencial de lo Político, en una era post patriarcal y nueva- e incipiente-mente animista.

Apostando a lo grande, con las revoluciones en blanco y negro, hemos terminando homogeneizando y universalizando las energías fermiónicas del Capitalismo: monetizando el orbe. Hemos tocado fondo. La Locomotora de la Historia ha sido frenada. Desengañémonos: nada volverá a ser como antes de que Wuhan apareciera en el mapa.

Como buen Marrano, he sido formateado para esperar contra toda desesperanza. Por ello, espero mucho de los efectos que pueda traer la implementación de la  Exhortación Apostólica del Papa Francisco: Amada Amazonia y, a nivel global, la Laudato Si´.

Si queremos que nuestras vidas tengan sentido, también político, doquiera nos hallemos, tenemos que activar las energías de lo pequeño y convivial, en el nodo donde vivimos, con la intensión de que las sinapsis que hagamos brotar, en nuestros biotopos, vayan retejiendo y sanando el tejido del mundo. Tenemos que activar las energías bosónicas, como el corazón de una nueva manera de comprender lo Político. Pues,  la vita è bella a pesar y contra lo concentracionario  del Panóptico del Ojo que todo lo ve y todo lo interconecta: la Inteligencia artificial.

He aquí, ¡oh, sorpresa!, el nuevo Nombre de Dios. Ahora, empezamos a conocer, por experiencia directa, no por tradición o por fe, el nombre del Dios que todo lo ve, que todo lo sabe, que todo lo conecta: Face Book. Su templo es el Panóptico digital. Su Pontifex maximus: el Robot buscador de Google. Su liturgia: los Algoritmos que saben mejor que nosotros lo que queremos. Su eficacia ya no está territorializada piramidalmente: la parroquia, el obispado, el vaticano. Es portátil y de bolsillo. El Ojo que Todo lo Ve, el del vértice separado de la Pirámide estatal, está con nosotros: lo llevamos en el saco: nos observa desde dentro y nos controla desde afuera.

Espero que esto sea solo una pesadilla.

He aquí, en todo caso, el género próximo y la diferencia especifica de mi Tractatus oeconomico-politicus.

Co-inspirar con amigos

Del libro, del marrano sefardí Jacques  Derrida, Políticas de la amistad, retengo su hermoso título (el resto es una cantinfleada erudita). Ante tal decepción, recurro a los estoicos: los maestros del Vivir Bien en Occidente, y, he aquí, que el chasco es menos decepcionante pero, por ello mismo, da mucho que pensar. Parece que me he topado con un pequeño agujero negro en nuestra civilización. Ya no estoy, empero, en edad para escribir mi De amicitia o mi Peri filias. Me deseo, más bien, una senectud luminosa y cálida, aprendiendo y jugando con mis nietos y bisnietos.

Voy a seguir la juntura cuerpo/alma (peligrosa cuando es pensada como separación). Desde las relaciones de consanguinidad, conocemos lo que es la fraternidad[63], las relaciones de parentesco, los vínculos del compadrazgo; un poco más allá se ubican las relaciones de camaradería, compañerismo, colegiatura. Todo ello: bueno y necesario. La amistad, empero, es otra cosa: tiene que ver con el alma: no-sangre: no-cuerpo; se las ha con energía, no con masa. Es una vibración donde dos o más almas resuenan en la misma frecuencia, por afinidad y concordancia; no es una resonancia de complementariedad, tampoco busca la utilidad, menos aún es erótica; tampoco tiene que ver con agápē, ἀγάπη. Sospecha: el Amigo es un alter ego corpuscular (que en otras dimensiones fue, probablemente, un doble ondulatorio: Jean Pierre Garnier Malet). Primer flash.

Segundo flash. Me da que pensar el contexto en el que Cicerón escribe su Laelius de amicitia. Primer anillo hermenéutico: el Círculo de Escipión: un grupo de amigos filósofos, poetas y políticos, convocados y atendidos por Cornelia; los unía el amor por la cultura, la literatura y el humanismo de los griegos, así como el interés por incidir en política pública. Segundo anillo: durante las agitaciones de los Gracos, Lelio recuerda al amigo fallecido, y diserta sobre el valor y los fines de la amistad. La situación política que había de fondo era extremamente tensa. En el año 44 aC, en que se redactó el diálogo, se asesinó a César y Cicerón intentaba recuperar posiciones en la escena política romana. Es decir, la amistad tiene que ver con lo político, en el nivel energía, en el de la co-inspiración mutua que se puede desdoblar en el de una conspiración más amplia. En la dimensión masa, para activar las fuerzas fermiónicas, se llama camaradería; en la dimensión energía, para activar las fuerzas bosónicas, se llama amistad.

Tercer flash. Si respetamos la distinción energía/masa; la conspiración amical se debe dar en el festejo, no en lo pugnaz: masa. Es más, la amistad, φιλία, en su plétora, es la comunidad en un estilo de vida, κοινωνία βίου; implica un acuerdo espontáneo, συμφωνία; una concordancia de opinión, ὁμοδογματία, en lo que se refiere a una actitud general frente a los hechos de la vida. Se da o no se da; no se construye voluntarísticamente. Este es el espacio del festejo, en modo Orden. La Fiesta es otra cosa: es el perfume de los frutos de la Reciprocidad, en Modo Caos.

Cuarto flash. De las Cartas a Lucilo, del cordobés Séneca, recojo la idea de que, al sabio, lo que le interesa es vivir bien, no simplemente vivir. Éste es un motivo platónico que evoca un muy citado pasaje del Critón. Lo relevante, pues, no es vivir, sino vivir bien, donde “vivir bien” significa vivir una vida de calidad, y esa calidad no está garantizada por los bienes corporales, corpusculares, sino por los anímicos, ondulatorios. Relatio, no relata.

Cuatro énfasis son necesarios  este respecto.

El primero tiene que ver con lo que, en un momento inicial, he llamado afinidades electivas, para oponerlo a la inexorabilidad de la sangre: nadie elige a sus padres y hermanos. En este caso, el de la amistad, aparentemente, uno elige. Aunque, mejor visto, como enseña el I Ching: “Hay fuerzas ocultas que unen a los que tienen que estar unidos”. El término Attractionis electivae se lo debemos a Torbern Olof Bergman que explica que “muchos dan el nombre de afinidad a lo que nosotros llamamos atracción”. La afinidad es un caso particular de la atracción, que se distingue por una intensidad específica de las energías de la conjunción, gracias a las cuales, dos o más cuerpos producen un Tercero incluido que incrementa la potencia de incidencia y de alegría, por mor del bien común, no del propio contento. Al efecto de esta resonancia llamo Amistad.

El segundo énfasis tiene que ver con Criarse mutuamente entre iguales. La igualdad la entiendo políticamente: iguales ante la ley; pero, sobre todo, socialmente: iguales en circunstancias: arte de la localidad. Este sería el modo monoteísta, del concepto animista de Criar la Vida, sobre el que ya he abundado en la primera parte de este Tractatus. No se trata de un criar biológico, sino espiritual: cuidarse, apoyarse, resonar, afinarse: la salud acaece, cuando el acorde es perfecto; esto no se logra solo.

El tercer énfasis tiene que ver con ingeniarse nuevas Nanotecnologías de economía doméstica que complementen y, poco a poco, vayan sustituyendo la esclavitud voluntaria del salariado, becariado, esponsoriado, proyectorado. Hoy, casi todos los urbanícolas están presos, por la hipoteca. Acerca de qué sean las Nano tecnologías de una economía doméstica, a modo de inspiración, voy a dar a conocer los modos cómo los aymaras urbanos se las arreglan. Claro, a medida que salen de la pobreza y Bolivia se convierte en un País de Renta Media, estos pobres de diseño: subsistir con un dólar/día, se van convirtiendo en empleados públicos y entonces el sueldito mensual va haciendo desaparecer esas nanotecnologías económicas, con las que tradujeron el Ayni a un contexto urbano.  Simplificando, seria así: una fuente para proveer la comida del día: la tiendita que atiende la abuelita; otra fuente para proveer el pago del alquiler: la hermana mayor sirve emolientes en la esquina, de siete a nueve; otra fuente, los chicos salen a vender salteñas de 10 a 12; para costear la matrícula y los útiles escolares: la familia vende artesanías en Alasitas; para uniformes y zapatos: la mamá  va a traer mercadería de Desaguadero; para comprar un lotecito, los varones se van a los yungas o al valle de Azapa: sus antiguos yungas secos, en la costa pacífica; para hacer estudiar a los mayorcitos y, de paso, zafarse del patriarcado, algunas mamás se van a España, por un par de años; muchas veces, el ahorro alcanza para construirse una casita, al regreso; si algún miembro de la familia consigue pega en el gobierno, pues hay que aprovecharlo mientras dure; entre tanto, se ha aprendido que la militancia política tiene que ver con pegas; no con ideología, como insisten Analistas políticos, Consultores en Marketing Político o en Desarrollo Democrático (así se presentan, ahora, los ideólogos e intelectuales de ayer nomás); para un emprendimiento algo más grande: se da en anticrético un cuartito; en temporada de siembra y/o cosecha se vuelve a la sayaña del ayllu para garantizar la despena básica del año. En pocas palabras: diversificar, como familia, las fuentes de ingresos para cubrir el presupuesto mensual y/o anual. El resto del tiempo es libre, para cultivar exclusivamente las relaciones (reciprocidad positiva y negativa) y festejar: ensayos, convites, entradas, bautizos, matrimonios, velorios, novenas, fiestas patronales, efemérides cívicas, como Residentes, organizar algo para el Ayllu, etc. Estas nanotecnologías económicas son relacionales. Sólo los perspicaces economistas del BM, el FMI y la CEPAL, tienen la capacidad intelectual para decodificar, como pobreza, esta estrategia.

Un cuarto énfasis que debemos empezar a cultivar es que los Amigos empiecen a mirar más allá de lo intersubjetivo. Para ello, la legislación boliviana, Ley 1551 y Ley 777, tiene previstos los canales para que éstos: los amigos, se puedan convertir en los Think Tanks de sus OTBs: organizaciones territoriales de base. Tenemos, como país, una gran oportunidad de incidencia global, en la lógica de la regeneración celular. En efecto, el SPIE: Sistema de Planificación del Estado, entiende, pioneramente, el territorio como un ser vivo y, a través de la Ley 300, de la Madre Tierra, regula cuatro Derechos: primero, el de la Madre Tierra, luego el de todos los bolivianos al progreso y al desarrollo, después el derecho de los pueblos indígenas a sus cosmovisiones y culturas, y, finalmente, el derecho de todos a vivir armónicamente, que coinciden con las Cuatro ecologías de la Laudato Si´ y la Carta de la Tierra y, ahora, con la Exhortación apostólica Amada Amazonia. Toda esta nueva visión convivial de un vivir bien, como complementario del desarrollo (que, así, quedaría relativizado: co-relacionado) lo podemos plasmar en la herramienta administrativa para alocar los recursos públicos a nivel local: los PTDI: Planes territoriales de desarrollo integral[64]. Esto, sin embargo, es un ritual que se celebra cada cinco años. Entre tanto, está el espacio que los Amigos pueden pensar, estudiar, imaginar, para inspirar a sus OTB en el diseño colectivo de los Mapas energéticos de sus Sistemas de Vida, de modo que el Vivir Bien pueda visibilizarse en el presupuesto de los PTDI de sus municipios. Sobre esto, ya me referí, cuando traté la Forma Oikos.

Este primer paso hacia un cambio de paradigma, espera del concurso de los miembros activos de la comunidad. Pienso que la Amistad, así, puede transcender políticamente e incrementar  la alegría de convivir en mutualidad. Si todos los que impulsamos las Áreas Protegidas, la Participación Popular, el Vivir Bien y la Ley de la Madre Tierra, volviésemos a conspirar, desde los barrios, las ciudades intermedias, los pueblos y las eco aldeas, en las que estemos viviendo nuestra senectud, estoy seguro que lo volveríamos a lograr. Los jóvenes necesitan de mayores conscientes; los mayores necesitan de  jóvenes entusiastas, para cambiar el paradigma.

Ahora bien, he aquí que, la quintaesencia de esta tetralidad, se nutre de algo muy básico que no aprendimos, ni en nuestras casas,  ni en la escuela: la Respiración. Esto, y no los grandes sustantivos abstractos de la filosofía, es lo que nos hace universales y nos hermana con el Universo entero. La creación, para usar la hermosa metáfora del monoteísmo, es, en realidad, un inmenso Pensamiento que se expande y se contrae sempiternamente. Inspirar es el primer acto con el que encarnamos en esta dimensión y expirar, será el último. Lo que llamamos vida, luego, es una incontable sucesión rítmica de respiraciones que ocurren entre esos dos momentos. En la inspiración, tomamos oxígeno, que es energía vital, y en la exhalación expulsamos el 80 por ciento de las toxinas, que son las que, en realidad, nos enferman. Aunque se trata de un acto involuntario, realizado inconscientemente, la mayoría de nosotros solo usa el 30 por ciento de su capacidad respiratoria. Eso, obviamente, baja las defensas de nuestro sistema inmunitario. Inhalar y exhalar, profunda, calmada y consistentemente es el primer paso para vivir bien. Para empezar, reduce el estrés, la ansiedad, la hipertensión, calma el dolor y controla el ritmo cardiaco. Pero he aquí que la Respiración: ser consciente de ella, es también la forma básica de la Meditación. Al inhalar, el vientre se hincha; al exhalar, el vientre vuelve a su posición original. El método consiste en tomar consciencia del movimiento del vientre, subiendo y bajando. El vientre, como sabemos, está muy cerca de la fuente de la vida: el ombligo. Por tanto, cuando el vientre se eleva, es realmente la energía de la vida la que se eleva y desciende con cada exhalación. Meditar, en este primer nivel, es tomar consciencia del vientre, de su movimiento de expansión y contracción. Este es el Sitz im Leben del Tsimtsum de la Cábala luriana. A medida que nos hacemos más conscientes de nuestro vientre, la mente se hace más silenciosa, el corazón se vuelve más empático y los estados de mal humor desaparecen.

Un segundo nivel de meditación consiste en prestar atención a los vaivenes  de nuestro cuerpo, de nuestra mente y de nuestro corazón. Por ejemplo: al caminar pon atención simplemente en tu pisada. Al mover la mano, muévela conscientemente. Al comer, estate alerta a los movimientos del ritual. Al ducharte siente el frescor del agua y agradece a la Madre Agua. Con pocas palabras: estate alerta, simplemente. Lo mismo ocurre con la mente. Sé un observador de todo pensamiento que pase por la pantalla de tu mente. Sé un testigo de cada emoción que atraviese por el ecran de tu corazón. No te involucres, no te identifiques con nada y, sobre todo, no juzgues. Tu meditación ha de ser una atención sin elección, como dice Osho. Sólo sé un Observador, un testigo. No pienses. Simplemente observa. En esto difieren la meditación occidental y la meditación oriental.

Una tercera forma de meditación es tomar consciencia de la respiración, focalizando la atención en la Nariz, a la entrada, cuando el aire penetra en las fosas nasales, refrescándolas. Al salir, cuando tus fosas nasales acusan el calor del cuerpo. Entra el aire, sale el aire y, así, hasta que sientas que tú y el universo son una misma Respiración. Estoy describiendo, groseramente, la Meditación Vipasana. Mil disculpas.

Como somos occidentales, como soy un Marrano sefardí, las Obras, de las que tanto hablaron e implementaron, organizacionalmente, Teresa, Ignacio, Josemaría, brotan mejor: son más eficaces, cuando emergen de este fondo sin fondo, que mejor atisbó el Oriente. La tradición europea también la llamó Ora et labora: Benito de Nursia.

Así, pues, las políticas de la amistad, para ser eficaces y eficientes, deben emerger de este humus, cuyo primer brote es el cultivo de la virtud de la Colaboración. Colaboración en lugar de competencia. Juegos de no-suma-cero, lógica del Tanto lo uno como lo otro. Los aymaras combina los opuestos, colaboración y competencia. Simón Yampara la traduce, por eso, como Emulación y acaece como  un juego. Nadie gana: todos se divierten.

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Cultivar el propio Huerto

Nos encontramos, como humanidad, ante un gran desafío: ¿cómo mejorar nuestra calidad de vida, sin dejarnos esclavizar por el Capitalismo, ni manipular y controlar, mental y emocionalmente, por los mass media, ni seguir abusando de los dones de la Madre Tierra? Hemos transitado los caminos de la Revolución y de la Reforma que han producido desarrollo material y subdesarrollo emocional, desigual y combinadamente, y, como efecto de ello, el planeta ha profundizado su desequilibrio, que se iniciara con la irrupción del patriarcado, la expansión del monoteísmo y la invisibilización del animismo.

La geometría fractal y la teoría holográfica, en especial, nos sugieren algunas pistas que condenso en esta Pragmática. La idea es que podemos empezar a recrear nuestras rotas relaciones con el universo, a partir de nuestro propio huerto. Hasta la FAO, que alentó la Revolución Verde, está, ahora, promoviendo la horticultura urbana y familiar. No voy a entrar al manejo técnico que, sobre ello, la información en internet es abundantísima. Me concentraré en el software.

Cuando el Marrano ashkenazí Karl Marx, en los Grundrisse, 1858, introduce el concepto de metabolismo, Stoffwechsel, como elemento clave para comprender la interacción naturaleza-sociedad, tiene a la vista, justamente, los problemas producidos por la agricultura capitalista industrializada en Inglaterra. Siglo y medio más tarde, estamos repitiendo ese mismo error en las Tierras Bajas de Bolivia, en especial en Santa Cruz, con el concurso de los socialistas del MAS. Tratemos de comprender la siguiente cita, pensando simultáneamente en la Inglaterra de 1850 y en la Santa Cruz de ahora mismo: “Por otra parte, la gran propiedad sobre la tierra reduce la población agrícola a un mínimo, en descenso constante, y le opone una población industrial en constante aumento y concentrada en grandes ciudades; y de este modo crea condiciones que abren un abismo irremediable en la trabazón del metabolismo social impuesto por las leyes naturales de la vida, a consecuencia del cual el vigor germinativo de la tierra se dilapida y esta dilapidación es transportada por el comercio hasta mucho más allá de las fronteras del propio país”. El patrón es claro.

En el primer tomo de El Capital, sugiere una solución al problema de esta ruptura del metabolismo hombre naturaleza: “Al crecer de un modo incesante el predominio de la población urbana, aglutinada por ella en grandes centros, la producción capitalista acumula, de una parte, la fuerza histórica motriz de la sociedad, mientras que de otra parte perturba el metabolismo entre el hombre y la tierra; es decir, el retorno al suelo de los elementos de ésta, consumidos por el hombre en forma de alimento y de vestido, que constituye la condición natural eterna sobre la que descansa la fecundidad permanente de la tierra. Al mismo tiempo, destruye la salud física de los obreros. A la vez que, destruyendo las bases primarias y naturales de aquel metabolismo, obliga a restaurarlo artificialmente, como ley reguladora de la producción social”.

Pues bien, la política de cultivar el propio huerto busca restaurar el Stoffwechsel, el metabolismo de las energías hombre naturaleza, a escala doméstica y urbana. Cultivar el propio huerto debe convertirse en una suerte de Meditación Zen, más bien individual. La crianza ritual de la chacra es más bien comunitaria.[65] Ambas vías.

Cuatro énfasis, sin embargo, son necesarios a este respecto.

El primero tiene que ver con una comprensión energética y espiritual del Huerto. Tomar consciencia de que el suelo, el agua, el aire, el sol, la luna, las estrellas son seres vivos que participan de la generación y regeneración de la vida[66]. Cultivar el Huerto es conversar con los elementales: metabolizar cariño y empatía meta personales. Solaza y recarga energías. Además de la crianza andina de la chacra[67], podemos enriquecernos informándonos acerca de dos casos que conozco: la obra científica de Hildegard von Bingen, 1098-1179, Liber simplicis medicine o Physica, un libro sobre medicina, divido en nueve libros sobre las correspondientes propiedades curativas de plantas, elementos, árboles, piedras, peces, aves, animales, reptiles y metales. El más amplio de tales capítulos es el dedicado a las plantas, tanto medicinales como comestibles: Hortus deliciae. Es un ejemplo inspirador de horticultura holística femenina. El siguiente caso es más reciente y tiene un enfoque más bien masculino; se trata de la agricultura biodinámica basada en las teorías de Rudolf Steiner, 1861-1925. Este tipo de agricultura considera la granja como un organismo complejo. Hace hincapié en la interrelación entre suelos, plantas, animales y también los astros, en especial, las fases de la luna, tratando el conjunto como un sistema vivo en equilibrio. Recomiendo su know-how práctico: calendarios, rotaciones, descansos, dosis, etc.

El segundo énfasis recupera el dicho de Hipócrates: Que tu alimento sea tu medicina, pues, como civilización, hemos arribado a la orilla opuesta: la comida (procesada industrialmente para su conservación de largo alcance y que se vende en los Supermercados) es veneno puro. ¿Quién, en su sano juicio, hubiera imaginado que esta clase de comida estuviera concebida para tenernos enfermos, por diseño, pues la industria alimentaria está articulada a las corporaciones químicas y farmacéuticas y a un sistema médico sintomático y recetario? Estamos enredados y presos de un sistema perverso, del cual únicamente un subidón de conciencia nos puede liberar. Cualquier rincón de la casa sirve para empezar a cultivar nuestros propios alimentos; de este modo, podremos reducir de manera exponencial los riesgos de enfermedades propias y ajenas. Es muy importante, para obtener el 100% de la riqueza vitamínica y enzimática de las verduras,por ejemplo, comer los alimentos justo acabados de cosechar, cosa que difícilmente podremos hacer, si no disponemos de nuestro propio huerto familiar.

El tercer énfasis tiene que ver con construir un entorno político más amplio a la horticultura urbana y familiar, para que ésta no se ahogue. Tenemos que minimizar la comodidad traicionera del Supermercado. Los Think Tanks barriales (véase el acápite anterior) deben activar en la agenda local el tema alimentario; luego, cuando sean convocados a  los talleres de planificación participativa, para preparar los PTDI de la siguiente gestión municipal, deben introducir las necesidades locales, previamente conversadas, formateados como proyectos, en los presupuestos municipales. Hay que pensar un sistema, no proyectos puntuales. Eso implica alocar recursos para fortalecer circuitos de ecotambos; fomentar los Huertos escolares, los Huertos barriales y los Kioskos Verdes, como maneras concretas de unir teoría y práctica e ir reeducando a las nuevas generaciones. Los bolivianos no nos alimentamos sanamente, desde que, hace siglos, las Reducciones toledanas rompieran el Control vertical de varios pisos ecológicos de las economías andinas: la Simbiosis interzonal, y la Reforma Agraria nos urbanizara compulsivamente en función de don Dinero y desmedro de Doña Ayni. Tenemos que ser conscientes de ello.

Las OTB tienen que invitar, proactivamente, al Gobierno Municipal a repensar el espacio urbano, destinando más espacios públicos, extra domiciliarios, para la agricultura familiar y repensar la relación urbano-rural para, desde el consumidor consciente: Pago, luego exijo, obligar a desmontar  el uso de agroquímicos en la agricultura campesina. Los departamentos, en los que la modernización inmobiliaria nos tiene presos y hacinados, deben ser ampliados, utilizando las plazas y calles peatonizadas para celebrar grandes Apthapis barriales, para lubricar las relaciones de Comensalidad: el mesón donde se metaboliza lo Político, como empatía, desde Platón:El banquete o El simposio Συμπόσιον. Compartir, sirviéndose, es el modo más efectivo de minimizar la Violencia social, de viralizar las buenas ideas e incidir políticamente: desde abajo.

El cuarto énfasis tiene que ver con el hecho de que, cultivar el propio Huerto, es una manera simple y efectiva de volver a conectar con la Madre Tierra. Debido al estilo urbano de vida actual, estamos completamente desconectados de la naturaleza. Pues bien, el Huerto, en su día a día, nos ofrece la posibilidad de reconexión ya que, una vez en él, tomamos consciencia experiencial de la tierra, las semillas, la lluvia, el viento, el sol, la luna, los cambios de estación. También volvemos a aprender la ligazón del tiempo al espacio: Pacha; no es que siembras hoy y cosechas mañana; todo conlleva un proceso orgánico, biológico; se aprende a ir despacio, se ejercita la paciencia, se practica la observación y se cae en la contemplación. Equilibramos el aprender por fe (lo que sirve la Forma Escuela) con el aprender por propia observación y experiencia: hacemos ciencia doméstica (para relativizar la ciencia militar de la globalización). La vida cotidiana empieza a ir pari pasu con la naturaleza, con todo lo que ello conlleva de cambios en la holoarquía de nuestros Sistemas de Vida: la persona, la familia, el barrio; quien sabe, el municipio. Hasta ese holón podemos ser eficaces e incidir El resto es Resonancia mórfica de estos pulsos: ifotones, emitidos desde el hogar[68]. Sin esto, el Vivir Bien se queda en la sola retórica.

En Bolivia, la Ley 300 de la Madre Tierra prescribe la complementariedad de dos caminos de vida, que los occidentales percibimos como contradictorios: Desarrollo y Vivir Bien. El desarrollo se hace visible en las ciudades y el vivir bien en los ayllus. Desde la Reforma agraria la ciudad ha tratado de llevar el desarrollo al área rural. A partir de la Participación Popular (que entiende el desarrollo rural como municipalización[69]) la implantación del Microcrédito y el Programa Evo Cumple, el Desarrollo llega al campo y, con ello, la suficiente infraestructura para el Vivir Bien está puesta; sólo hace falta la superestructura: el software, para que terminemos bordando su coherencia. Entiéndase este Tractatus como una modesta contribución a este diseño.

Ahora, hace falta completar el diseño con el movimiento contrario: el suma qamaña tiene que instalarse en la ciudad. Lo medular de este enfoque es la noción de Criar la vida y dejarse criar por la Vida, como ya vimos, ¿Cómo implementarla? Un primer paso podría ser cultivar el propio Huerto en la ciudad. Hay que experimentar y aprender haciendo.

En este impulso, dos énfasis me parecen oportunos.

El primero tiene que ver con la actividad física que, casi, hace desparecer la vida de oficina/usina y la fuerza hipnótica del televisor. Ambas rutinas nos enferman inadvertidamente y engordan la industria alimentaria, farmacéutica, hospitalaria y de entretenimiento. Los cuatro jinetes del apocalipsis. Estar y mantenerse sanos, en realidad, no cuesta plata: es gratis. Cuidar y criar el propio Huerto ya nos pone en movimiento y nos expone a los elementales: las fuentes primarias de la salud. Enumero los beneficios más importantes del ejercicio físico. En primer lugar, reduce el riesgo de cardiopatías y accidentes cerebrovasculares; baja la presión arterial alta y mejora el equilibrio del colesterol. En segundo lugar, ayuda a prevenir lumbalgias y reduce el dolor causado por la osteoartritis. En tercer lugar, protege contra el cáncer de colon y de mama, además de prevenir la diabetes. En cuarto lugar, ayuda a tratar la depresión y la ansiedad; reduce el nivel de estrés y ayuda a dormir mejor.

El segundo énfasis tiene que ver con lo que llamamos, en los Andes, los rituales de producción. Esta simple tecnología hace que un trabajo mecánico se convierta en algo sacramental que interconecta todas las dimensiones de la realidad, tanto tangibles como intangibles, recargando de energías al Ayllu. Un desafío de nuestra generación  será recrear y adaptar esta tecnología energética a contextos urbanos y domésticos: la familia se llenará de energía, alegría y entusiasmo[70]. Como nos recuerda Stephan Rist: “si estamos de buen corazón, siempre habrá producción”.

El cultivo, cuidado y crianza de nuestro propio Huerto nos llevarán a practicar algunas nanotecnologías de reciclaje: convertir los desechos orgánicos de la cocina en humus, cosechar el agua de lluvia, criar e intercambiar nuestras propias semillas, es decir, ir minimizando la dependencia de las empresas monopólicas de semillas que persiguen otros fines.

Algunas recordaciones son pertinentes a este respeto

La primera tiene que ver con reconstituir el Circulo de la Vida, cuyo primer circuito ha sido roto por la urbanización del mundo: el out put debe volver  convertirse en in put. Por decirlo breve y corto: la bosta, out put, nutre el suelo que hace creer los alimentos: in put. La tecnología de vivir en ciudades ha roto este circuito. Por cierto, el verbo recordar proviene del latín recordari, formado de re, de nuevo, y cordis, corazón. Recordar, por tanto, quiere decir: volver a pasar por el corazón. El neo sustantivo Recordación me lo saco de la galera para connotar el sentido complementario de recuerdo: su lado masa. Estamos, pues, hablando de nanotecnologías cordiales.

La segunda recordación tiene que ver con hidráulica, en el nivel nano. La civilización andino/amazónica ha producido una Sociedad hidráulica integral. En las Tierras Altas, donde el agua es escasa, ha generado una gran variedad de técnicas de cosecha de agua: qochas, waruwarus, andenes, zanjas de infiltración, atajados, galerías filtrantes, etc. En las Tierras Bajas, en Moxos, donde sobra el agua, ha generado técnicas de gestión de su exceso: canales, lagunas, camellones, montículos artificiales, terra preta, etc. En el ámbito mediterráneo y del medio oriente, el sistema de cosecha de agua ya fue usado en Sumer y generalizado por griegos y sobretodo romanos en toda la región. Los árabes lo siguieron utilizando. De hecho, a ellos les debemos el hermoso nombre de aljibe. Muchos edificios antiguos estaban dispuestos de tal forma que el agua que caía en los tejados se canalizaba a un gran depósito subterráneo. Hay muchas técnicas para optimizar su uso: regar por goteo, por ejemplo, hidroponía, o reciclar las botellas PET y utilizarlas como compostadoras de maceta, semilleros o sembrar en ellas, cerradas, para crear un circuito interno que recicle el agua: se evapora con el calor del sol y vuelve a caer, humedeciendo las plántulas, etc. Me remito al internet. Si no lo han hecho, se sorprenderán al volver a comprobar cómo el ser humano es tan creativo en lo grande, en lo meso, como en lo nano. El Arte de la localidad debe recordar, honrar y agradecer ese legado tecnológico.

Una tercera recordación tiene que ver con la crianza de las semillas. Esta, en los Andes, es una tecnología absolutamente femenina. La describo brevemente. Para las genetistas andinas, las semillas son seres vivos y siguen el mismo camino que todos los seres vivos: son engendradas, nacen: brotan, emergen, crecen, maduran: fructifican, se cansan y se renuevan. Sin un manejo de las energías bosónicas: cariño, cuidado, conversación, agasajo y agradecimiento, no viven. Eso es muy obvio en los rituales de crianza andinos. Lo importante es que la semilla cumpla su ciclo vital. Así, por ejemplo, cuando se están hibridando las especies, requieren de la oscuridad, silencio y afecto del útero materno; durante su período de emergencia, la semilla requiere los cuidados de una wawa; en  momentos de fructificación, en cambio, tiene la capacidad de alimentar a toda una comunidad; cuando, finalmente, está cansada, pide otro suelo para reponer energías. En todos estos casos, se requiere que los cuidados de la semilla sean llevados a cabo en armonía con todos los componentes del Ayllu cósmico: waka: ancestros: memoria tecnológica, sallqa: campo unificado no cultivado y jaqi, la comunidad humana, porque la Semilla, en un universo paralelo, tiene su propio ayllu, sus ancestros, sus autoridades, su familia y está emparentada con un tipo específico de suelo, temperatura, humedad, con la vecindad de determinados cultivos, con un microclima particular y un cuidado especifico, que hacen que ella florezca en un lugar y no en otro[71]. El cuarenta por ciento de las plantas comestibles, que consume la humanidad actual, las criaron así las mujeres indígenas. Quiero aprovechar, esta oportunidad, para agradecérselo públicamente en nombre de la humanidad.  

La virtud que floree en este  campo unificado es  la Convivencia cosmo biológica. Leamos, con atención y fervor, como se lee un Fragmento de los Pre socráticos, comentado por Heidegger, el siguiente fragmento de Simón Yampara.  “Los comunarios de los ayllus andinos han sabido guardar en el disco duro de su corazón e inteligencia, las prácticas de la ritualidad agropecuaria y social (…) En nuestro criterio se trata de un ayni a uraq-pacha, para la qamaña; es decir, un sistema de emulación / ayni con la comunidad biótica natural del contorno / muyta y entorno / muyt’a. Una manera de conversar y ponerse de acuerdo en cada ciclo / estacionalidad agropecuaria, con la comunidad física natural y las deidades, en un proceso de convivialidad, pues cada miembro de la comunidad biótica tiene su espíritu o deidad natural. La ritualidad es una manera de hacer encontrar y armonizar esas energías de la pacha. Eso es convivialidad eco biótica de la comunidad de seres bióticos. Entonces, el mundo de la gente de los ayllu-marka, procesa / condensa permanentemente, a lo largo del calendario agropecuario y el ciclo de vida social, las energías materiales con las espirituales:  ajayu / qamasa, eso hace que, prácticamente, se convivan armónicamente los miembros de la comunidad biótica natural. Convivialidad cultural y biótica orientado por leyes naturales.

Dicho de otra manera, el mundo de la gente, emite, cosecha y procesa las fuerzas y energías de alax-paxha / arriba / altura, como de manqha-pacha / abajo / profundidad, en un tercer o taypi espacial de akax-pacha / jicha-pacha: espacio presente de la vida. Este es el espacio de interacción y armonización de las fuerzas y energías – ajayu / qamasa – de la profundidad y la altura, haciendo una unidad de factores. Donde el ayni jaqicha (matrimoniar fuerzas-energías, materiales-espirituales en una unidad/totalidad), es la qamasa (combustible energético) de la qamaña (vivencia de la vida).

En este sentido, el ayni, no debe entenderse solamente como una forma de solidaridad, de reciprocidad, ni de ayuda en trabajos con un enfoque economicista o etnicista. El ayni metafóricamente, es un tejido de la textileria andina, del telar andino, donde el quqi (genero de especies de la naturaleza), el qalqu (expresión de los cálculos de la matemática andina) la qulqa (el almacén de los recursos naturales se moviliza), el pa-qalqu de la kurmi (siete colores del arco iris macho-hembra) sintoniza y armoniza la celebración de las qhachwas y tinkhus (competencias emulativas). Es una especie de “motor” de energía humana condensada, donde se generan y fabrican, valores humanos de prestigio comunitario, paralelo o invisible, pero complementario a la materialidad, en ella. Se diseñan paradigmas cosmológicos de vida, donde se gestionan y administran espacios, territorios, recursos y acciones políticas, articulando e interaccionando las dimensiones materiales-espirituales, sobre todo, velando el bienestar y la armonía de los miembros integrantes de la comunidad eco-biótica natural”[72].

Cocinar los propios alimentos

En la primavera de 1237 un monje budista, llamado Dogen escribió un libro que el Tiempo no ha hecho sino que gane una siempre nueva actualidad: Instrucciones al cocinero de un monasterio Zen[73], cuyas enseñanzas más importantes voy a condensar a continuación.

Escribe Dogen: utiliza tu mente-que-se-mueve-hacia-el-sendero: el Tao, de manera cuidadosa para variar los menús, de tiempo en tiempo, y ofrecer así bienestar y alivio a tus comensales.

Recomienda: cuando laves el arroz y prepares los vegetales, debes hacerlo con tus propias manos y con tus propios ojos, haciendo un esfuerzo sincero. No te distraigas ni siquiera un momento. No tengas cuidado sobre una cosa y descuides otras. Atención.

Dogen recuerda que si los seis sabores no están bien logrados y la comida carece de las tres virtudes, el don del cocinero, del tenzo, a sus comensales no estará completo. Los seis sabores son: amargo, agrio, dulce, picante, salado, neutro; las tres virtudes de los alimentos son: limpieza, delicadeza y formalidad.

Recomienda que cuando limpies el alimento, prepares el arroz y los vegetales, tu ayudante debe cantar un sutra para el espíritu guardián del fogón.

El consejo más importante es el siguiente: Sobre todo, debes evitar enojarte y quejarte. Debes hacer de tal forma que las cosas lleguen a residir en tu mente, y tu mente regrese y resida en las cosas, a lo largo del día y de la noche. Observa, pues, con ojos atentos; no gastes ni siquiera un grano. Límpialo con prolijidad, colócalo en los recipientes con delicadeza, haz un fuego, hiérvelo. Un antiguo maestro dijo: «Cuando hiervas el arroz, sábete que el agua es tu propia vida».

Otro consejo no menos importante es el siguiente: Cuando prepares la comida, no veas con ojos ordinarios y no pienses con mente simple. Toma una hierba y construye con ella un bosque sagrado; entra en una partícula de polvo y haz girar con ella la gran rueda del dharma. No generes una mente desdeñosa, cuando prepares un caldo de hierbas de temporada; no te ufanes cuando prepares una fina sopa de crema. Donde no hay discriminación, ¿cómo podrá haber mal sabor? Así, no seas descuidado cuando tengas ingredientes simples, y mantén el nivel de tu esfuerzo, incluso cuando éstos sean complejos.

Tomando un vegetal verde, transmútalo en un cuerpo dorado; tomando un cuerpo dorado conviértelo en una hoja de vegetal verde. Esta es una transformación milagrosa: la labor de buda que beneficia a los seres sensibles. 

Cuando hayas cocinado la vianda de la mañana o la de la tarde, acorde con las reglas, coloca el alimento en las bandejas, viste tu kashaya, despliega el mantel con reverencia, mira hacia los comensales, ofréceles incienso y haz nueve reverencias. Cuando las reverencias hayan sido completadas, empieza a servir la comida. Si hay conciencia en tu forma de preparar los alimentos, lo que sea que hayas cocinado, nutrirá nuestro ser entero. Esta es la vía del bienestar y de la alegría.

En el arte culinario, la consideración esencial es cultivar una mente respetuosa y empática, más allá de las cualidades, finas o gruesas, de los ingredientes. ¿Acaso no es verdad, que al ofrecer al Tathagata un tazón con agua, en la que había lavado el arroz, una mujer obtuvo un  mérito inimaginable en su siguiente vida? Incluso una ofrenda muy grande al Buda, si no es sincera, no es tan buena como una muy pequeña que sí lo es.

Al llevar a cabo tus tareas con los demás, debes mantener una mente alegre, un ánimo generoso y un corazón grande. Una mente alegre surge de darse cuenta de la gran suerte y oportunidad que es saberse vivo. Un ánimo generoso es paternal: debes cuidar al agua y a los granos con compasión, como si estuvieras cuidando a tus propios hijos. Un corazón grande es como una gran montaña o un gran océano. No debes considerar un gramo como ligero o una tonelada como pesada.

Cuatro acotaciones son pertinentes a este respeto

La primera es tener siempre presente que somos lo que comemos. Lo que se ingiere entra a formar parte del ser, e influye en la personalidad. Como dijera Najmánides, el gran cabalista catalán del siglo XII: “Las aves y muchos de los mamíferos prohibidos por la Torá son rapaces, mientras que los animales permitidos no lo son. Nos ordenan que no comamos esos animales de naturaleza cruel, para que no absorbamos estas cualidades”.

La segunda acotación es una variación de la anterior: debemos ser conscientes que los animales producidos industrialmente son torturados y maltratados cruelmente, como si no fuesen mamíferos sensibles como nosotros. La idea del lucro ha trastocado absolutamente el orden de la naturaleza. Alimentarse del Supermercado es envenenarse, lentamente, el cuerpo y el alma con el sufrimiento y el miedo de nuestros hermanos menores. Esto es barbarie absoluta.

La tercera es también una variación de la anterior: los vegetales también son seres vivos e  inteligentes, como nos lo vuelve a recordar la ciencia biológica más actual. La agricultura industrial, por mor del lucro, ha terminado cosificando el mundo y envenenándonos a todos, por diseño. Arribado a este punto, uno no puede evitar resucitar la vieja cuestión acerca del Mal.

La cuarta acotación es ser conscientes que la comida es energía, información y comunicación, metabolizada por nuestro organismo, al punto que, incluso, la forma de ingerir los alimentos refuerza nuestra predisposición y forma de actuar. Así, quien come sosegada o ansiosamente, actúa de forma similar en la vida diaria.

Así, pues, la cocina es el espacio alquímico de las transformaciones, a nuestra medida, que corresponde, en el cuerpo, al estómago. Con el proceso alquímico no solo se busca la transmutación de los elementos, sino también la propia transmutación del alquimista, de modo amable y placentero. Dicho en clave política: una buena Mesa reconcilia adversarios; posibilita alianzas por el bien común; aviva el fuego de la colaboración; disipa los prejuicios y los miedos mutuos. Y, lo más importante, aprendemos a dosificar los ingredientes de la vida; nada, ni nadie, es bueno o malo al cien por ciento. Cocinar y comer juntos es el modo más sutil, cordial e inteligente para de-construir la dictadura del principio de identidad y no contradicción que está por detrás de las malas prácticas de la política actual. Si los gobernantes dejaran de tomar decisiones en los War Room e hicieran política en el Comedor del Palacio de Gobierno/Casa del Pueblo, grandes cambios serían posibles, ya.

La otra dimensión que atañe a este proceso alquímico es todo lo que tiene que ver con ayunos, limpias y limpiezas: es decir, con desintoxicar el cuerpo para que la salud y el vivir bien puedan colmar nuestras vidas.

Ayunar es el opuesto complementario del yantar. Van juntos. El Ayuno, como sabemos, es tan antiguo como la misma humanidad. Los animales lo practican. Las religiones lo siguen recomendando. Lo inteligente es revalorizar y practicar este quantum energético, pues produce el equilibrio metabólico del organismo y minimiza la necesidad de pasar por el ambulatorio. Ayunar es aplazar de forma voluntaria la ingesta de comida. El ayuno intermitente es quizá la práctica más antigua y efectiva que se pueda imaginar. Pero hemos olvidado su formidable efectividad e ignorado sus posibilidades terapéuticas. Una modalidad amable podría ser la siguiente: el almuerzo es la última comida hasta el desayuno del día siguiente. Básicamente, ayunar permite al cuerpo utilizar la energía guardada, quemando el exceso de grasa corporal que es energía almacenada. Si no comes, el cuerpo simplemente comerá su propia grasa para obtener la energía requerida; en casos extremos devorará hasta nuestras células cancerígenas: ¡!. El cuerpo se auto regenera y sana cuando está en equilibrio. Si no estás comiendo, estás ayunando.  Si hay un equilibrio entre comer y ayunar, estamos sanos. Algunos beneficios conocidos del ayuno son: pérdida de peso y de grasa corporal, disminución de los niveles de insulina y azúcar sanguínea. Posible corrección de la diabetes, mejora de la lucidez y de la concentración, produce entusiasmo, disminuye el colesterol,  previene el Alzheimer y, como cree mucha gente, alarga la vida. Hay varios tipos de ayuno: intermitente, de un día, tres días, una semana, cuarenta días…

No me voy a referir a la Ch´alla del Martes de Carnaval, que todos llevamos a cabo para limpiar de energías pesadas nuestras casas. Referiré, a modo de ejemplo, un caso más bien individual que practican los quechuas, para limpiar su aura. Antes de acudir al Especialista ritual, los interesados se van a purificar, sumergiéndose en vertientes, ríos o lagunas señaladas. El ritual empieza con una conversación entre el sabio y la persona, que dura unos 10 minutos, similar a una confesión católica o una sesión psicoanalítica: logoterapia. La palabra libera las cargas emocionales. Primer hito. Luego, el yachak se persigna frente a iconos católicos y un cuadro que muestra una enorme cascada. Diálogo de civilizaciones. Dice que Yaku, el Agua, es nuestra madre y que ella nos da la vida y es la esposa del padre Fuego. Luego le rocía  con agua de rosas y con un atado de ramas verdes de laurel y romero le limpia el aura del cuerpo; termina esta limpieza exterior mojándole las sienes y haciéndole oler la fuerte fragancia del Agua Florida. Segundo reseteo del cuerpo, esta vez más bien energético. A continuación, el curador danza alrededor del paciente, para reimpulsar al spin levógiro y destrógiro de las chakras del Toroide que también somos, acompañando esos giros de palabras en quechua y castellano: oraciones a Pacha Mama y al Padre nuestro: conecta universos paralelos. Posteriormente, con yerbas frescas, bien verdes y húmedas, frota a la persona de pies a cabeza. Termina la sesión del Agua. Empieza la sesión del Fuego. Riega un poco de alcohol en el suelo. Con ayuda de un cigarrillo, enciende el piso mojado. El paciente danza sobre las llamas, con el objetivo de expulsar las energías fermiónicas más sutiles. El curandero toma un trago de alcohol y con la boca lo escupe a una distancia de un metro de la persona y lo enciende con ayuda de una vela. El fuego se consume totalmente en el aire. Con el fuego se ha terminado de limpiar la persona.

Otra forma, muy física de desintoxicar el cuerpo, es la ingesta de la Ayahuasca. Esta es una tecnología más bien amazónica, con una antigüedad de más de cinco mil años. Este brebaje es una combinación de dos plantas que tienen Dimetiltriptamina natural. El nombre de la primera es Banisteriopsis caapi y de la segunda  es Psychotria viridis chacruna. La limpia por Ayahuasca empieza, en realidad, un mes antes. Lo primero de todo es apartarse de la civilización e internarse en la Selva. Soledad y silencio: hay que  empezar a oírse a sí mismo y oír a la Madre Naturaleza. Este aislamiento va acompañado de una dieta radical, de sexo, comida y olores artificiales: solo arroz, yuca y plátano hervidos,  sin sal, y mucho agua y bañarse en el rio o mojarse bajo la lluvia. El Agua, al ser un hiper conductor vivo, es lo más sanador que existe. Al ingerir el brebaje de Ayahuasca, el cuerpo va a expulsar todas las toxinas del cuerpo/alma. El día señalado, los neófitos (del latín neo- que significa nuevo y phyto que significa planta)  se reúnen, al anochecer, en una terraza de madera, por ejemplo, con sus bolsas de dormir. Para iniciar el ritual, el Taita da una introducción de lo que va a suceder. Una vez ingerido el brebaje, hay que esperar sus efectos. El Terapeuta (θεραπευτής del verbo θεραπεύειν: cuidar, atender, aliviar y el sufijo -της, agente) cuida, vigila, acompaña, atiende, está atento a los desvaríos y desmayos que van a sobrevenir, mediante el contacto físico, la palabra cálida y, sobre todo, el canto: los icaros: la vibración del sonido modulado por la voz del terapeuta y sus diáconos (διάκονος: servidores y ayudantes). El canto: la modulada vibración del sonido es, en realidad, el que cuida y conduce el cuerpo energético que se está encabritando y las heces del cuerpo corpuscular van a salir expulsadas escatológicamente: se buitrea, suda, caga, entre estertores, si la intoxicación es muy grave. De pronto se empieza a sudar frio: el vientre se ha vaciado. ¡Qué digo!: el ser se ha vaciado. Se entra en un sopor donde todos los límites van desapareciendo. Después de unos 20 minutos, ¿?, se empieza a sentir que se amplía el ancho de banda de la conciencia… inconmensurablemente. No se transitan senderos, sino autopistas multinivel de doble vía. En un clic, uno se percibe como solo Conciencia, como un gran Pensamiento. Desaparece la escisión sujeto/objeto. En algún  momento se entra en trance; el sonido y la vibración del icaro suscitan una suerte de volatización del ser: cesa la sensación del cuerpo y de pronto uno se percibe como solo  vibración: pulso: el ser pulsa de consuno. El siguiente salto cuántico: las cuerdas que vibran, de las que uno es solo un filamento, tienen color, sabor, olor: tu eres ese color-sabor-olor ondulante que cimbrean, se mezclan, engullen,  como millones de culebras copulando. Siguiente salto: ves lejos. Los amazónicos se refieren a la Ayahuasca como la televisión de la selva. Efectivamente: observas a tus seres queridos, por ejemplo, desde otra dimensión. Podrías modificar sus derivas pasadas, presentes o futuras. No estás, empero, preparado para sacar el jugo a tu Poder, que es el del universo. Se ha activado tu ser ondulatorio; se sale de la prisión del espacio-tiempo en 3D; no hay pasado-presente-futuro. ¿Sólo presente? Parece que es otra cosa. La pócima de Ayahuasca, en tanto  alcaloide, ha producido alteraciones en los receptores del sistema nervioso central. La explicación racionalista es pobre. Mil disculpas. En cualquier caso, el rebobinado de nuestro hardware y el reseteo de nuestro software han culminado. Estamos chalinga.

Esto es una limpieza energética animista. Lo más semejante, en modo monoteístico, vendrían ser los Ejercicios de San Ignacio. Quien sabe, la experiencia de Port-Royal de Pascal[74]. No conozco, empero, otra tecnología que sea capaz de trastocar, absolutamente, a un hijo de Abraham, Isaac y Jacob, y trascenderlo.

Ahora sabemos mejor que las relaciones entre el cerebro, las emociones y el aparato digestivo son muy estrechas, tanto, que muchos científicos se refieren al intestino como «segundo cerebro» o «cerebro intestinal», ya que el tubo digestivo contiene una red neuronal de más de 100 millones de neuronas, distribuidas en un sistema nervioso propio: el sistema entérico, que secretan las mismas sustancias que las que se encuentran en nuestro sistema nervioso central. Existen vías nerviosas que conectan las áreas cerebrales relacionadas con nuestras emociones y pensamientos, con el sistema inmune, el sistema endócrino y el sistema nervioso entérico. Cuando esta conexión se ve perturbada, podemos presentar síntomas gastrointestinales e, incluso, emocionales. Un neurotransmisor fundamental, por ejemplo, es la serotonina, que es la hormona relacionada con el bienestar, el comportamiento, el sexo y el sueño. Si bien la tenemos en el cerebro y está muy asociada a los trastornos de ansiedad y depresión, también está en el intestino. De hecho, el 90% de la serotonina corporal total se sintetiza en el intestino y tiene implicancia directa en síntomas gastrointestinales. En este sentido, nuestra dieta es importante, porque esta serotonina se forma a partir de una sustancia que se llama triptófano, un aminoácido esencial, que solo se obtiene a través de la alimentación. Ahí empezamos a vislumbrar la relación entre el cerebro, el intestino y la dieta.

La dieta, la cocina y el huerto tienen también una  estrecha relación que nos lleva a conectar, todo esto, con el Cuidado de la Casa común. El arte de lo Político es encender,  dar off, a toda esta red, que ya está conectada, pero que el Monoteísmo patriarcal la desenchufó, como condición de posibilidad para ser. La pandemia de diseño y Bandera falsa, al mismo tiempo: el arma biológica del COVID-19, marca el punto de inflexión, civilizacional, de esta larga deriva que ya no se sostiene más. Vemos, en tiempo real y por televisión, cómo se construye, compulsivamente, la Realidad y cómo se controla a la población global, mediante el Miedo y la Ignorancia: una Gripe de temporada fría, mutada e hiper magnificada (también se puede escapar de control), para reconducir una Deriva que se había escapado de las manos, aprovechando la gran Conjunción de Saturno y Urano. Hay que bajar a 110 voltios, por las buenas o por las malas. Este Tractatus sugiere una vía posibilista, por las buenas y, además, con gozo.

El 13 de agosto de 2015, según los científicos de Gaia, fue el Overshoot Day, el día en que se constató la superación de la biocapacidad de la Tierra para atender las demandas humanas, que se han tornado insostenibles, debido al Dominad la Tierra. ¿Cómo, entonces, relacionarnos de otro modo con ella? Reintroduciendo el Animismo, para reequilibrar un sistema ch´ulla. Para empezar, hay que considerarla como una Madre: Pachamama. Es decir, como un ser vivo con el que se mantienen relaciones interpersonales de cariño. En segundo lugar, concienciar que es una totalidad sintiente y sistémica, en la que todas las partes son interdependientes y están inter-relacionadas. En tercer lugar, criar y ser criados por la Madre Tierra es comprender las singularidades y la complementariedad de los ecosistemas: la simbiosis interzonal de nuestros Sistemas de Vida. En cuarto lugar, cultivar su capacidad de reproducción, colaboración y mutualidad y darse cuenta de los desequilibrios que ocurren por interferencias del Monoteísmo: progreso y desarrollo, no permitiendo, por ejemplo, que biomas enteros sean deforestados, incendiados, alterando el régimen de lluvias, para exportar carne o producir biocombustibles, para beneficio de una docena de familias.

Criar y dejarse criar por la Tierra es cuidar de los bienes y servicios comunes: agua, tierra, nutrientes, semillas, fibras, aire, climas etc. Estos bienes comunes no pueden ser privatizados y convertidos en mercancías. Criar la Tierra es cuidar de su belleza, de sus paisajes, de su biodiversidad. Es también criarnos mutuamente, como hermanos, y cuidar de lo que nuestro ingenio ha producido en culturas, lenguas, artes, ciencias, espiritualidades. Criar la Tierra es implementar los sueños que ella suscita en nosotros, de cuyo material nace todo. Criarnos mutuamente es, finalmente, mantener la Llama viva de la Lattice: Jacobo Grinberg, que nos inunda e implica: en la que somos. Entonces la Tierra podrá devenir  en la Casa Común del Ser.

La virtud que floree en este  campo unificado es  la Hospitalidad  que debemos  interpretar desde la afectividad, el don y la reciprocidad para que, efectivamente, la Tierra pueda devenir en la Casa común de todos. Dar, recibir y devolver: esta es la lógica del don. Sugiero este cambio de énfasis, porque la vía kantiana, Zum ewigen Frieden, § 358: la hospitalidad es un derecho de todos y un deber para todos, porque todos los seres humanos están en el planeta Tierra y todos, sin excepción, tienen el derecho de estar en ella y visitar sus lugares y los pueblos que lo habitan. La Tierra pertenece comunitariamente a todos, con ser buena, a la vista está que ha sido inoperante históricamente y tampoco funciona ahora. Observemos nomás, a día de hoy, la crisis de los Refugiados y lo que está haciendo y sucediendo en Alemania, la patria de Kant.

Dominique Temple llama Hospitalidad a la obligación positiva de recibir. Así, la primera recepción es la de los dones de la Madre Tierra. Si tomamos consciencia de este hecho, el automatismo que le sigue: devolver, abrirá un espacio ético no mercantil a este metabolismo que vincula hombre y naturaleza, Stoffwechsel: quitamos, de este modo, agua al Capitalismo, que se cuela con la Ley (que fatigan Kant y Derrida, por nombrar los cabos de este debate). Toda Ley es patriarcal: regula, encubre y activa, taimadamente, la violencia sacrificial. La segunda Recepción es la del Otro. El que recibe al extranjero es honrado por los dones del forastero, incluso si éste no tiene nada porque, sencillamente, él es la oportunidad y posibilidad de la Reciprocidad. El Principio Reciprocidad (a diferencia del Principio Capitalismo)  no es autista: precisa del Otro y de la circulación de las energías: no acumula: comparte. Ulises es honrado, como a un dios, porque él es el otro que posibilita el ser recíproco. Es por ello que, en la Grecia arcaica, el término hospitalidad significa reciprocidad. El Otro, pues, es bienvenido en la medida que es quien inicia la dinámica generadora del sentimiento de humanidad. Si no recibo, comparto y cobijo, no soy humano, sencillamente. Es por ello que se espera todo de él, el Otro: el forastero, el diferente, incluso si no tiene nada. Posibilita el Ser.

Comer en Familia

Ha sido muy importante, para la historia evolutiva de la humanidad, la activación de las relaciones por afinidad: ¿Quién es mi madre y mis hermanos? Todo aquel que hace la voluntad de mi Padre. Ese Pulso ifotónico ha desatado unas energías tremendas, en desmedro del nodo relacional que la posibilita: las relaciones de consanguinidad. Hoy, en la civilización urbana, estas relaciones de parentesco están totalmente atomizadas y son causa de la baja calidad de vida de la modernidad, que enfatiza el punto y no la red. En el mejor caso, de este diseño político: el Estado Benefactor, éste, empero, no puede remplazar “lo que puede el sentimiento”: Ineke Dibbits.

La Cuarentena global del COVID-19 está forzando a la humanidad entera a estarse quieta en Casa y volver a hacer la experiencia de comer en familia y de criarse mutuamente. Va a ser difícil, en general, porque la infraestructura urbana familiar ha sido reducida al mínimo y los bienes públicos que complementan estas modernas Reducciones: calles, plazas y parques, están interdictos y, ¡oh desmesura!, resguardados por el ejército y la policía. Toda esta puesta en escena, desproporcionada para los que no manejamos las Cifras Mayores, dará que pensar a todos, por angas o por mangas.

Como la Realidad no es simple y lineal, siempre habrá Efectos colaterales no previstos e imprevisibles y siempre se activará la lógica de la Mano invisible: provoco el bien que no pretendo. Rige, en efecto, el Principio Contradictorio, no el de Identidad. Debiéramos tenerlo siempre en mientes. Este colapso se veía venir pero, como humanidad: Ley de Inercia, nos rehusamos y culipandeamos al modo como, por ejemplo, respecto de la salud bucal: vamos al dentista, sólo cuando ya no queda otra.

Dentro del cambio de énfasis que sugiero: lo privado es político, lo pequeño es hermoso, el comer en familia, el sentarse a la mesa y compartir una comida, es algo básico y fundamental en la regeneración de lo político. Por aquí comienza la diástole a la demolición controlada, en curso; a saber, la reedificación, lúcida y cordial, de lo social y comunitario.

Comer en familia es un fractal, amable y a la mano, de reingeniería social, manejada por nosotros mismos. Activa tres dispositivos básicos: organización, planificación e inclusión. En efecto, para crear una rutina y lograr reunir a todos los integrantes alrededor de la mesa, una primera idea es organizar los horarios y una vez establecidos, respetarlos. Es muy pedagógico, también, dedicar un tiempo, en la semana, para planificar lo que se va a cocinar y plasmarlo en una lista, que luego puede adherirse en la puerta del refrigerador. Que los niños participen en la preparación de los alimentos es una buena manera de fomentar el hábito de comer juntos, sano y rico; también es preciso involucrarles en las rutinas de poner la mesa, juntar los platos sucios, ayudar a lavarlos, sin distinciones de género. Una manera lúdica de desmontar el patriarcado desde la infancia. ¡Ah! Hay que apagar los teléfonos y la tele.

Cuatro acotaciones son pertinentes a este propósito.

La primera, sentarse a la mesa asegura comer sano, mejorando la calidad de la dieta. Así, se evita el consumo de comidas rápidas y se favorece el de semillas, germinados, verduras, frutas, legumbres, agua… Por este motivo, los adolescentes que comen en familia son menos propensos a padecer obesidad y diabetes.

La segunda es que, comer en familia, desarrolla hábitos comunicativos; enseña a hablar y a escuchar, facilita el decir lo que se siente, alimenta la empatía; también enseña a argumentar e, incluso, a saber cuáles son los trucos para ganar una discusión. La palabra vincula energéticamente. De paso, mejora el rendimiento escolar, ampliando el vocabulario. El mundo tiene el tamaño con el que es proferido.

La tercera es que fomenta  la adquisición de lo que se llama los buenos modales que hacen amable la convivencia, al crear un punto intermedio entre los extremos de la soledad y el abigarramiento. Enseña también a agradecer a los elementales y a todos los que ha participado en este ejercicio de metabolismo social básico: nos hace conscientes, en dosis homeopáticas, de que vivimos en una misma trama de relaciones multidimensionales.

La cuarta  acotación  es que, cultivar los propios alimentos, ora en el propio huerto, ora en la terraza, en el alfeizar, en los rincones de la cocina o el comedor y también, en la medida de lo posible,  adquirirlos en los circuitos cortos, de tienditas y ecotambos de barrio, supone un ahorro considerable de dinero y, sobre todo, un incremento de autosuficiencia. La Cuarentena en curso está poniendo de manifiesto la absoluta vulnerabilidad y dependencia de los urbanícolas. “Controla el petróleo y controlarás naciones; controla los alimentos y controlarás pueblos; controla el dinero y controlaras los estados”, es un conocido deslenguado de Henry Kissinger. Por cierto, este Encierro global es también para controlar el litio, el oro y la biodiversidad… y repartírselo entre las estrellas de la NBA, con derecho a veto en la ONU: Todo ello, en alevosía y nocturnidad, mientras nos dicen que les preocupamos mucho.

Pero he aquí que la Familia tiene también un lado Onda y un lado Partícula. Veamos, ahora, su función ondulatoria, lo que podríamos llamar Constelaciones familiares: la relación con los antepasados. Los monoteístas hemos sido formateados para minimizar estas relaciones exopolíticas. Herr Professor Ratzinger, alias Benedicto XVI, tras el infierno y el limbo, ha eliminado la dimensión física del purgatorio. He aquí, empero, que, un rediseño de lo Político, en tiempos de Tesla, Castaneda, Grinberg, ya no de Aristóteles, Maquiavelo y Hobbes, amerita esta ampliación del ancho de banda de nuestra percepción hacia lo político infrarrojo y ultravioleta.

Como botón de muestra, me referiré a la Familienaufstellung de Bert Hellinger, 1925-2019, que, en castellano, se traduce como Constelaciones familiares. Bert, a la tierna edad de diez años, fue separado de su familia y enviado a un noviciado menor benedictino. Ordenado sacerdote, fue enviado como misionero a Sudáfrica entre los Zulúes. A diferencia de sus confratres, que hacían sus pinitos y mostraban pequeños éxitos, el Padre Hellinger no daba puntada con hilo: no logró convertir a un solo nativo. Averiguadas las causas, los anglicanos de Durban le dieron una pista: el culto a los ancestros de los animistas africanos. Ni corto ni perezoso, dejó de querer convertirlos al monoteísmo católico y se arriesgó, pioneramente, a un diálogo interreligioso: a un diálogo de civilizaciones. Estaba claro que, con ello, se puso, entonces, fuera de lugar; tuvo que abandonar la Orden y regresó a Alemania, donde empezó a procesar, académicamente, sus experiencias y conocimientos animistas, aprendidos de los Zulúes. Las Constelaciones familiares son una adecuación y traducción homeomórfica: Panikkar, de las tecnologías animistas del Culto a los Ancestros. Por eso los buenos monoteístas, la consideran una pseudo ciencia. Vean la entrada en la Wikepedia

¿Qué le enseñaron los Zulúes? Que la red familiar corpuscular, de esta dimensión en 3D, en la que estamos encarnados, ahora, se prolonga en la red familiar ondulatoria de nuestros antepasados, de tal suerte que las energías que vinculan ambos hemisferios siguen fluyendo e interviniendo en nuestras vidas actuales y que las asimetrías y disfunciones que ahora podemos sufrir, se pueden corregir, si tomamos conciencia de su mutua resonancia y volvemos a conectar los filamentos desconectados; de este modo acaece la sanación. Puede ser que un antepasado haya infringido una ley cósmica y sus repercusiones nos alcancen varias generaciones después. Por tanto, si la familia quiere conservar la salud, incrementar su bienestar, tiene que mimar y criar esas relaciones energéticas trans generacionales, que les conectan a sus ancestros. Si te olvidas de estas relaciones (y el cristianismo lo que hará, será, justamente, tratar de que esas relaciones sean interrumpidas: extirpación de idolatrías) cesará el flujo energético que, en los Andes, como sabemos, son nutridas a través de la gran metáfora de la Comida: para Todos Santos, los “vivos” y los “muertos” se sientan a la Mesa para servirse mutuamente sus platos preferidos. En Agosto hay que dar de comer a Pachamama y, en todas las ch´allas, a todos nuestros sosías, Doppelgänger, que habitan la dimensión ondulatoria.

Comer en familia incluye, pues, comer con la gran Familia cósmica que, en un holón, más complejo es compartir con la gran Familia cosmobiológica. No hay vivos y muertos; todos estamos vivos y latimos en distintas dimensiones

Así, pues, ahora, toca referirse a la neurona cardiaca. Son apenas unas 40,000; pese a ello, son las que mandan. En realidad siempre lo supimos: las llamamos Corazonadas. Hoy, desde la racionalidad de una ciencia, más cuántica y menos newtoniana, sabemos que el corazón envía más señales al cerebro de las que recibe de este. Para pena mía, no es cierto lo que dijera Blas Pascal y, en su tiempo, me dejara cartesianamente pensativo: El corazón tiene razones que la razón ignora.

Cuatro puntualizaciones, pues, son aquí pertinentes.

La primera tiene que ver con los mecanismos neurológicos. Las neuronas cardiacas influyen en la percepción de la realidad y, en consecuencia, en las respuestas que damos, en nuestras reacciones.

La segunda refiere a los mecanismos bioquímicos. Un pequeño péptido de 28 aminoácidos, denominado péptido natriurético atrial (ANP), se sintetiza en el músculo cardiaco y es el modulador de la homeostasis: el equilibrio dinámico que nos mantiene con vida.

La tercera acotación tiene que ver con los mecanismos biofísicos. Los cambios en el ritmo cardiaco modulan la comunicación, mediante ondas de presión enviadas al resto del cuerpo.

La cuarta, el corazón genera un campo electromecánico cinco mil veces más potente que el del cerebro. Este campo se modifica según el estado emocional. Es más armónico en estados de satisfacción, confianza y tranquilidad y es más caótico en estados de alerta, temor, frustración, peligro. Este campo electromagnético llega hasta cuatro metros fuera de nuestro cuerpo.

¿Cómo, pues, poner de acuerdo al estómago, al cerebro y al corazón? Ahora sabemos que el ritmo cardiaco, las ondas cerebrales y una buena digestión, pueden sincronizarse de modo que sea el corazón quien arrastre a la cabeza y al estómago, si las armonizamos a través de pulsos de energía bosónica, bombeados desde nuestras emociones y pensamientos positivos. Es decir, podemos  modular un estado de conciencia que hemos llamado Inteligencia Espiritual que subsume y trasciende la Inteligencia emocional que, a su vez, subsume y trasciende la Inteligencia racional desde una perspectiva neurocientífica. La minimización de sentimientos como el miedo, la desconfianza o la ira, es posible desde algo tan elemental como la sincronización del ritmo cardiaco con las ondas cerebrales que se producen cuando, por ejemplo, cultivamos conscientemente nuestros alimentos, los cocinamos meditativamente, los ingerimos alegremente en familia y nos solazamos y holgamos con los amigos; por decir, prosaicamente, lo poético de la vida.

La virtud que floree en este  campo unificado es, pues,  laComensalidad. Comer y beber juntos alrededor de la misma mesa es una de las referencias más ancestrales de la familiaridad humana. Cuando nuestros antepasados antropoides salían a recolectar frutos, verduras y semillas, a cazar y pescar, no comían solos; llevaban la cosecha al grupo y compartían. Eso, Compartir, el corazón de la Reciprocidad, es lo que nos permitió dar  el salto de la animalidad a la humanidad. Eso, Lucrar, el disparador del Capitalismo, es lo que nos vuelve bestiales. Por eso importa criar la Mesa y por eso también es un ritual sagrado que genera conectividad: conversaciones, comentarios y chimentos. Los alimentos son sacramentos. El Capitalismo ha sustituido la Mesa familiar por las cadenas de fast food y el delivery: llenan el buche solamente; no nutren. Que el único lugar del mundo, donde McDonald ha fracasado, sea Bolivia, dice mucho y bien de nosotros.

Las disposiciones intangibles

Para redondear este Tractatus oecologico-politicus voy a resaltar la dimensión Onda, del quatum conceptual Bosón-Fermión, con el que tenemos que corregir la antigua forma positivista de entender lo Político y la vida misma, como algo solamente material.

Para mostrar los distintos nombres y enfoques de esta dupla complementaria, voy a proferirlo desde la tradición tolteca que nos regaló dos palabras iluminadoras: Nahual y Tonal. Las crónicas del siglo XVI ya las nombran, sin entenderlas, empero: no podían comprenderlas, esos monoteístas, focalizados solo en el Oro. Para suerte nuestra, don Juan Matus y Carlos Castaneda, nos las volvieron a servir, para nutrir una nueva visión energética del mundo.

Voy a condensar (puliendo una narrativa más bien dialógica) un célebre passus de Relatos de Poder. Siendo ecuménicos, intelectualmente, es sano, para nosotros, proferir el mundo en castellano y en lenguas amerindias. Nos coloca, en un tris, en la nueva frontera donde convergen la ciencia y la consciencia y, por ende, la espiritualidad.

“Voy a hablarte del tonal y del nagual, dijo, y me dirigió una mirada penetrante. (…). Explicó que cada ser humano tenía dos facetas, dos entidades distintas, dos contrapartes que entraban en funciones en el instante del nacimiento; una se llamaba «tonal» y la otra «nagual». (…). «El tonal no es el animal que custodia a una persona. Yo más bien diría que es un guardián que puede representarse como animal. Pero eso no es lo importante.» (…). El tonal es, y con derecho, un protector, un guardián: un guardián que la mayoría de las veces se transforma en guardia. (…)

El tonal es el organizador del mundo (…) Quizá la mejor forma de describir su obra monumental, es decir que en sus hombros descansa la tarea de poner en orden el caos del mundo. No es un absurdo sostener, como lo hacen los brujos, que todo cuanto sabemos y hacemos como hombres, es obra del tonal (…) Yo diría, pues, que el tonal es un guardián que protege algo muy, pero muy valioso: nuestro mismo ser. Por lo tanto, una cualidad nata del tonal es la de ser astuto, y celoso con su obra. Y como lo que hace es efectivamente la parte más importante de nuestras vidas, no es del nada extraño que al fin y al cabo se convierta, en cada uno de nosotros, de guardián en guardia. (…). Un guardián es magnánimo y comprensivo explicó. Un guardia, en cambio, es un vigilante intolerante y, siempre, un déspota. Yo diría que en todos nosotros el tonal se ha hecho un guardia insoportable y déspota, cuando debería ser un guardián magnánimo. (…)

El tonal es completamente todo lo que somos, prosiguió. ¡Nombra cualquier cosa! El tonal  es todo eso para lo cual tenemos palabras. Y como el tonal está hecho de sus propios hechos, todas las cosas, por lo visto, tienen que caer bajo su dominio. (…) El tonal es todo cuanto conocemos, dijo. Yo creo que esto, por sí solo, es razón suficiente para que el tonal sea un asunto tan imponente. Y eso no sólo nos incluye a nosotros, como personas, sino a todo lo que hay en nuestro mundo. Puede decirse que el tonal es todo cuanto salta a la vista.

Lo empezamos a cuidar desde el momento de nacer. En el momento en que tomamos la primera bocanada de aire, también ese mismo aire es poder para el tonal. Así que, es muy apropiado decir que el tonal de un ser humano está ligado íntimamente a su nacimiento. Debes recordar este punto. Es de gran importancia para entender todo esto. El tonal empieza en el nacimiento y acaba en la muerte. (…)

El tonal es lo que construye el mundo. (…). El tonal construye el mundo sólo en un sentido figurado. No puede crear ni cambiar nada y, sin embargo, construye el mundo porque su función es juzgar, y evaluar, y atestiguar. Digo que el tonal construye el mundo porque atestigua y evalúa al mundo de acuerdo con las reglas del  tonal. En una manera extrañísima, el tonal es un creador que no crea nada. O sea que, el tonal inventa las reglas por medio de las cuales capta el mundo. Así que, en un sentido figurado, el tonal construye el mundo. (…).

El tonal es una isla, explicó. La mejor manera de describirlo es decir que el tonal es esto. Pasó la mano sobre la superficie de la mesa. Podemos decir que el tonal es como la superficie de esta mesa. Una isla. Y en la isla tenemos todo. Esta isla es, de hecho, el mundo. Hay un tonal que es personalmente para cada uno de nosotros, y hay otro que es colectivo para todos nosotros en cualquier momento dado, al cual llamamos el tonal de los tiempos. (…). Podemos  decir que el tonal de los tiempos es lo que nos hace semejantes, en la misma forma en que hace semejantes todas las mesas en este restaurante. No obstante, cada mesa por separado es un caso individual, lo mismo que el tono personal de cada uno de nosotros. Pero el factor importante que hay que tener en cuenta, es que todo cuanto conocemos de nosotros mismos y dé nuestro mundo está en la isla del tonal. (…).

Si el tonal es todo cuanto conocemos de nosotros mismos y de nuestro mundo, ¿qué es entonces el nagual? El nagual es la parte de nosotros mismos con la cual nunca tratamos.(…). El nagual es la parte de nosotros para la cual no hay descripción: ni palabras, ni nombres, ni sensaciones, ni conocimiento. (…). ¿Diría usted que el nagual es la mente? No. La mente es un objeto encima de la mesa. La mente es parte del tonal. Digamos que la mente es la salsa picante. (…)

¿Es el nagual el alma? No. El alma también está en la mesa. Digamos que el alma es el cenicero. ¿Es el nagual los pensamientos? No. Los pensamientos también están en la mesa. Los pensamientos son como los cubiertos. Cogió un tenedor y lo puso junto a la salsa y el cenicero. ¿Es un estado de gracia? ¿El cielo? Tampoco es eso. Eso, sea lo que fuera, también es parte del tonal. (…) Seguí proponiendo formas de describir aquello a lo que él aludía: intelecto puro, psique, energía, fuerza vital, inmortalidad, principio vital. Por cada cosa que yo nombraba, él hallaba en la mesa un objeto que servía de contraparte y lo ponía frente a mí, hasta que todo cuanto había en la mesa quedó apilado en un montón. (…).

¿Es el nagual el Ser Supremo, el Omnipotente, Dios? pregunté. No. Dios también está en la mesa. Digamos que Dios es el mantel. (…). -Pero, ¿dice usted que Dios no existe? No. No dije eso. Sólo dije que el nagual no era Dios, porque Dios es un objeto de nuestro tonal personal y del tonal de los tiempos. El tonal es, como ya dije, todo lo que creemos que es parte del mundo, incluyendo a Dios, por supuesto. Dios no tiene otra importancia que la de ser parte del tonal de nuestro tiempo. Según yo lo entiendo, don Juan, Dios es todo ¿No estamos hablando de lo mismo? No. Dios es solamente todo aquello en lo que puedes pensar; por eso, propiamente hablando, Dios no es sino otro objeto en la isla. Dios no puede ser visto cuando uno quiere; sólo podemos hablar de Él. En cambio, el nagual está al servicio del guerrero. Puede ser visto, pero no se puede hablar de él.

Si el nagual no es ninguna de las cosas que he mencionado, dije, quizá pueda usted decirme el sitio donde se encuentra. ¿Dónde está? Don Juan hizo un amplio ademán y señaló el área más allá de los confines de la mesa. Movió la mano como si, con el dorso, limpiara una superficie imaginaria que rebasara los bordes de la mesa. El nagual está allí, dijo. Allí, alrededor de la isla. El nagual está, allí, donde el poder se cierne.

Desde el momento de nacer sentimos que hay dos partes en nosotros. A la hora de nacer, y luego por algún tiempo después, uno es todo nagual. En ese entonces, nosotros sentimos que para funcionar necesitamos una contraparte a lo que tenemos. Nos falta el tonal y eso nos da, desde el principio, el sentimiento de no estar completos. A esas alturas el tonal empieza a desarrollarse y llega a tener una importancia tan absoluta para nuestro funcionamiento que opaca el brillo del nagual, lo avasalla; y así nos volvemos todo tonal. Desde el momento en que uno se vuelve todo tonal, no hacemos otra cosa sino aumentar esa vieja sensación de estar  incompletos; esa sensación que nos acompaña desde el momento de nacer y que nos dice constantemente que hay otra parte de nosotros que nos haría íntegros.

A partir del momento en que somos todo tonal, empezamos a hacer pares. Sentimos nuestros dos lados, pero siempre los representamos con objetos del tonal. Decimos que nuestras dos partes son el alma y el cuerpo. O la mente y la materia. O el bien y el mal. Dios y Satanás. Nunca nos damos cuenta, sin embargo, de que sólo estamos haciendo parejas con las cosas de la isla, algo muy semejante a hacer parejas con café y té, o pan y tortillas, o chile y mostaza. Somos de verdad animales raros. Nos creemos tanto y, en nuestra locura, creemos tener  perfecto sentido.

Don Juan se puso en pie y me apostrofó como un orador. Me señaló con el índice e hizo temblar su cabeza. El hombre no se mueve entre el bien y el mal, dijo en un tono hilarantemente retórico, tomando el salero y el pimentero en ambas manos. Su verdadero movimiento es entre lo negativo y lo positivo. (…). ¡El hombre es sólo mente!

Sentimos que en nosotros hay otro lado. Pero cuando tratamos de precisar cuál es ese otro lado, el tonal se apodera de la batuta y, como director, es un fracaso. Es tan mezquino y celoso que nos deslumbra con su astucia y nos fuerza a destruir el menor indicio de la otra parte del par verdadero: el nagual. (…)”.

Hasta aquí, este Fragmento de Poder. Los conocidos Cuatro Acuerdos de Miguel Ruiz hay que entenderlos desde este trasfondo. Nos serán útiles para que la Pragmática, de este breve tratado, por un lado, no sólo sea cultivar el propio huerto, cocinar los alimentos, comer en familia y solazarnos con los amigos: la dimensión tonal, sino también, por el otro lado, para que anime una oportunidad para refundar el ethos de otra forma de hacer política. After Covid-19, va a empezar, en serio, la demolición controlada/reconstrucción creativa, de la civilización. Es una gran oportunidad que nos debe llenar de entusiasmo. El Ángel de la Historia frenó, en seco, la locomotora desbocada: nos está facilitando la regeneración del planeta.

Este Tractatus es una primera contribución en ese sentido.

Cuatro acuerdos son aquí pertinentes.

El primer Acuerdo político dice así: Sé impecable con tus palabras. Toda palabra está henchida de poder: poder creador y poder destructor, pues agita las energías del universo. Si decimos a nuestros hijos: “Eres muy lindo y te quiero mucho” o no le decimos nada o solo le rezongamos, les habremos encarrilado en una u otra dirección: una persona segura de sí misma o una persona acomplejada e insegura, con las repercusiones político-sociales que ello implica. Otro tanto ocurre con las palabras solo pensadas, pues con esos  pulsos de energía nahual o tonal, podemos crear entusiasmo y esperanza o duda y miedo, en nosotros mismos y, por resonancia mórfica, en los demás. Ser, pues, conscientes del Poder de la Palabra, nos obliga a ser impecables con ellas. “Si eres impecable con tus palabras solo podrás engendrar belleza, amor y el cielo en la Tierra”. Por eso, un día sí y el otro también, debemos decirnos palabras como estas que, por ejemplo, recomienda Miguel Ruiz: “Declaro mi intención de cuidar, honrar y usar sabiamente mis palabras, realizando solo aquellos acuerdos o promesas que sé que voy a cumplir.”.

La puesta en escena de la política, en la Forma Estado y sus rituales acompañantes: elecciones, debates parlamentarios, comparecencias públicas…, que alimentan la Pirámide sacrificial del patriarcado monoteísta, se basan, justamente, en lo contrario de este Acuerdo: mienten, engañan, se agreden, manipulan, roban… por diseño; si no lo hicieran, porque han sido bienparidos, no se mantendrían en esa carrera y no llegarían nunca al Poder. Este  esquema político, debiera avergonzarnos como seres vivos[75].

El segundo Acuerdo dice: No tomes nada personalmente. Nadie podrá evitar recibir, de su entorno, pulsos de energía fermiónica; pero sí podemos y debemos minimizarlos, por mor de nuestra salud emocional. La trampa, aquí, es el Ego que, por un lado, es imprescindible al modelo monoteísta de Separación y, por otro lado,  es superfluo al modelo animista de existir en el Continuum. Entre estos dos extremos conceptuales/culturales, el Camino del Medio aconseja, minimizar el yo, darse cuenta que no todo gira en torno nuestro, ni somos el centro del universo. La ilusión, por cierto, más pelotuda que existe. Si reaccionas mal a la estupidez humana, cedes tu poder, te descentras y te haces daño a ti mismo: te auto intoxicas. No tomar nada personalmente, te hace inmune al veneno del otro; es una extraordinaria vía hacia la paz interior, la ecuanimidad y la dicha. El modo marrano sefardí dice: “Aléjate del camino de los necios”.

Ser político, en el modo de la Forma Estado, no funciona, si no se tiene un gran Ego, que se amplía a la Forma (de su) Partido. Es el reino de las susceptibilidades y de los miramientos, de las sospechas, las intrigas y las traiciones.

El tercer Acuerdo dice No hagas suposiciones. Cuando la cabeza se ha separado del corazón  y  la escritura se ha impuesto sobre la oralidad, aparece la necesidad lógica de suponer, para poder comprender e interpretar un texto y, a fortiori, la realidad. Cuando el suponer permanece en el ámbito de la filosofía hermenéutica y de la exégesis, Vorverständnis, está bien, ayuda a comprender; pero cuando salta (lo cual es casi inevitable en una sociedad letrada) a la vida cotidiana, esa programación neurolingüística agita a la “loca de la casa”: Teresa de Ávila, y se arma una joda mental que nos intoxica la existencia. Una manera sencilla de conjurar ese peligro es el que recomiendan los toltecas y que Miguel Ruiz lo traduce así: Manifiesto la intención de dejar de suponer. Elijo verificar los hechos y pensar positivamente.”

El cuarto Acuerdo dice Haz siempre lo mejor que puedas. Una primera lectura de este Acuerdo hay que hacerla desde la lógica del don: da siempre lo que puedas, pues el otro se verá en la inexorabilidad de devolver: se sentirá obrigado, como se dice gracias en portugués. De este modo se tejen y alimentan y retroalimentan las redes de sociabilidad. Esta es la base de una buena gobernanza. La segunda lectura es más bien individualista: haz lo mejor que puedas, según tus capacidades y talentos. Lo importantes es que tú te sientas bien y que tu actuar no dé lugar al Uno gana y los otros pierden.

Tercera parte: Moralejas

Semillas para pensar después de la Cuarentena global

He sido educado en el positivismo científico. Me cuesta hacer proposiciones sin que pueda, al mismo tiempo, ofrecer referencias, evidencias empíricas y datos. Pero también me doy cuenta que este supuesto de mi programación neurolingüística, se puede convertir en una trampa que me deja, voluntariamente, atado de pies y manos, mientras los Pendejos hacen de las suyas a plena luz del día. Así, pues, si la Razón muestra sus limitaciones, es señal de que hay que activar la Intuición para saber a qué atenerse. También soy consciente de sus limitaciones intelectivas por parte de los demás. La idea es que muchísimos juegos de intuición compartidos, enriquezcan el consciente/inconsciente colectivo y, como humanidad,  podamos reaccionar como un solo organismo, tal como una bandada de golondrinas en los cielos o un cardumen de peces en los mares.

Primera idea. Recordemos que, salvo en la geometría euclidiana, nada es lineal en la vida humana y que todo parece obedecer a una geometría variable y que por mucha tecnología que pongamos, lo que hagamos se nos escapará siempre de las manos. Ahora se nos ha escapado la Economía por su línea de fuga especulativo-financiera. Me temo que ya es tarde para poner otro parche más; el último plazo fue 2008.

La segunda idea, a tener en cuenta, es lo que enseña el apotegma de la Mano invisible: hacemos el bien que no pretendemos y provocamos el mal que no queremos, como ya lo formulara Pablo de Tarso en su carta a los Romanos, 7:19-25. Vale la pena, en Tiempos  del Virus,  recordarla  entera: “Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí. Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. (…). Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado”.

Dos ejemplos conocidos son: la Mano invisible smithiana: promuevo el egoísmo y cosecho altruismo y la Mano invisible marxiana: siembro una sociedad comunista y cosecho una sociedad capitalista. A estos dos ejemplos, habría que añadirle una tercera mano en plena gestación: la Mano invisible covidiana: implemento una Demolición controlada del viejo Orden monoteísta-patriarcal  y provoco una regeneración matríztico-animista de unas nuevas bodas con la Tierra.

Tercera idea: las operaciones encubiertas de bandera falsa. El nombre se deriva de la táctica militar de izar la bandera de un país diferente al propio, para engañar al enemigo. Explicitemos. Los banqueros son los que, en realidad, están detrás de esta Cuarentena, que han encargado montar a sus fuerzas de seguridad e inteligencia, para que(mientras la humanidad está recluida en sus casas: no quieren gente en las calles) puedan arreglar el entuerto, con alevosía y nocturnidad.

La cuarta idea es que el mundo acaece en diferentes velocidades, diversos niveles, combina múltiples agendas, propósitos contradictorios y, todo, simultáneamente. Es decir, se puede llevar a cabo una guerra económica entre países, construir una pandemia, cerrar bancos largo tiempo ya quebrados, repartirse los recursos naturales del mundo, afianzarse en el poder con tan oportuno pretexto, desplomar mercados, ajustar cuentas, implementar una campaña electoral utilizando todos los insumos anteriores, ralentizar al adversario político, desmontar una sociedad industrial, hacer desaparecer a las clases medias, mermar poblaciones enteras, cerrar el ciclo monetario financiero abierto por los acuerdos de Bretton Woods​​… pero también se están  agitando las energías opuestas: este golpe de fuerza: todo se acalla, puede dar el empujoncito, que faltaba, para que las ganas de despertar a una nueva conciencia de la humanidad, tenga la calma necesaria para formar la masa crítica necesaria para poder nacer y dar un salto cuántico. Solo un cambio de consciencia nos puede hacer trascender a una nueva realidad. La gente, ahora, tiene tiempo de más, para empezar a saborear y valorar la interioridad, las relaciones, los afectos, la simplicidad de la vida, vuelve a cocinar en casa y a disfrutar de una mesa de mantel largo, a conversar con los hijos y la pareja, a contar historias, a jugar cartas, a cantar desde la ventana …también pueden estallar las relaciones domésticas si es que estaban apuntaladas con alfileres.

Dos salidas son posibles: o empiezan a limpiar el planeta  de 7,500 millones de personas, para que la distopía transhumanista pueda operar con mil millones de personas y el Capitalismo se siga reciclando; o comienza una eutopía en el que masa y energía, onda y partícula, nahual y tonal, bosón y fermión, yin y yang…  diseñan y empiezan a vivir la gestión participativa de la Casa común planetaria. Tampoco, en este punto, estamos en punto cero: tenemos la Hoja de ruta de la Laudato Si´.

El error que hemos cometido, hasta ahora, es encarar las soluciones desde el Principio de No contradicción. En el juego corto de una sola Polaridad, eso se traduce en la dicotomía excluyente: capitalismo o comunismo. Este es un falso planteamiento; por eso no pasa nada. En el juego grande de la complementariedad de las dos Polaridades Bosón Fermión, tanto el monoteísmo como el animismo, tanto el capitalismo como la reciprocidad… se complementan mutuamente, dosificándose, empero, los ingredientes de tal suerte que, ahora, toca enfatizar las energías bosónicas para equilibrar la biosfera.

Así, pues, desde el Principio Contradictorio y no desde el Principio de Identidad (para no seguir equivocándonos) y con solo estas cuatro ideas simples: Nada es lineal, Mano invisible, Bandera falsa y Multidimensionalidad, analicemos la Cuarentena que estamos viviendo, como la piedra de toque para testear si la sugerencia de este Tractatus es una propuesta posible, sensata y realista, cuya Hora ha llegado.

Voy a ser simple adrede, para poder ver lo esencial.

El Covid-19 es una gripe común mutada que, obviamente, por retoalimentación negativa, se puede escapar de las manos. Precaución obliga. Sin embargo, las defunciones que ha provocado hasta ahora son muy inferiores a los que causó el año pasado. Estadísticamente, entonces, no debiera llamar la atención, sin embargo, nos tiene confinados a todos. Esta sobreactuación desproporcionada es lo que da que pensar. Hay gato encerrado, como dice el refrán.

En lo que atañe al diseño: éste ya sido desarrollado y probado en el mundo de la computación: los conocidos y familiares virus informáticos y sus correspondientes vacunas. Es, pues, un producto de laboratorio, un arma biológica y la posibilidad de un gran negocio. Este momento es también la oportunidad para que las grandes transnacionales del sector tecnológico, visibilicen su poder político real tras bambalinas. Es conocido el caso de Bill Gates, famoso también por sus ideas eugenésicas. Hoy, desde su Fundación, está pontificando como el verdadero Jefe de Gobierno del mundo. BG: Sigan esa pista.

En lo que atañe al contexto político global: se está librando una guerra por la supremacía tecnológica entre Estados Unidos y China acerca de quien lidera la transición hacia el Transhumanismo de la Inteligencia artificial. El virus estalla en Wuhan y los chinos vuelven a mostrar su supremacía tecnológica, política y social. Ya no quedan dudas al respecto.

En lo que atañe al Virus, éste ya ha sido propalado. Ahora hay que esperar la Vacuna que nos va a curar a todos. El circo de las farmacéuticas ya ha empezado[76].

El Estado de alerta, alarma, de sitio… en un abrir y cerrar los ojos, ha desmontado, de facto, el Estado de Derecho de la Democracia liberal, ensayado masivamente desde el 11S. De soslayo, observamos  que la Democracia popular confuciana china es más eficiente…

Se ha generado una paralización de la economía mundial, con la ralentización de la producción industrial, el desplome de los mercados, el cierre de las fronteras, la caída de las bolsas de valores, el desempleo generalizado que va entrando con vaselinita, la baja del precio del petróleo y con países enteros puestos en cuarentena. Desde, no sabemos dónde, un sistema económico que precisa de expansión y crecimientos infinitos (mal diseño) es frenado drásticamente, a nivel global, con un simple chasquido de dedos.

El mensaje, más fuerte y obvio, es que produce la muerte de los más vulnerables. Los tecnócratas ya llevan décadas hablando de la superpoblación mundial y de que habría que bajarla drásticamente. La pregunta era cómo. Ahora están empezando a ensayar una respuesta: inocular a todos con una Vacuna obligatoria, que solo dios sabe qué contendrá. Con una humanidad, intimidada y acorralada, es más fácil llevarla a cabo. Claro, siempre habrá salvajes, que comen chuño y quinua, que se rehusarán y outsiders que no se dejarán intimidar. Nunca, en efecto, la oportunidad de un subidón de Conciencia ha estado tan a la mano: todo el mundo con tiempo de sobra para meditar, ver claro y reubicarse.

Ahí la pararemos. Solo eso, ya da para pensar. Más información nos llevaría a la confusión y nos hundiría en un chenko mental.

Jalemos la pita a cuatro señales fuertes:

+ Cuarentena: se anuncia un Estado global autoritario

+ Todos fuera de la fábrica y la oficina: se esboza un desmantelamiento de la sociedad industrial

+ Sin salariado: irán desapareciendo las clases medias urbanas

+ Reseteo monetario: dios habrá desparecido en una planilla digital

Jalemos, ahora, el caito latente a estas cuatro señales fuertes:

+ No necesitamos Estado para vivir bien. Puesto que ya está, empero, la mejor manera de neutralizarlo es relativizarlo con otras formas de gobierno. He sugerido otras tres: para el gobierno de sí mismo, de la casa y de la naturaleza.

+ Precisamos reinventar un sistema productivo que no necesita de crecimiento infinito para ser sostenible. Debe explorarse la permacultura, los manejos agro-silvo-pastoriles, las artesanías, las artes y todo modelo productivo que pueda detenerse, cuando ya no sea necesario y pueda reactivarse, cuando lo vuela ser. Un primer paso puede ser cultivar su propio huerto.

+ Tenemos que activar, al mismo tiempo, la chrematistiké y la oikonomiké: el capitalismo y la reciprocidad; así mismo, generalizar las Monedas complementarias locales y regionales. De este modo la noción de clases medias se habrá universalizado. Todos tendremos lo necesario y suficiente para poder cultivar la colaboración, la hospitalidad, la comensalidad, la amistad.

+ Habrá que cerrar el Banco Central de Bolivia, que no es de Bolivia sino de los Rotschild y cambiar su modelo piramidal que, a través de las Tasas de Interés, drena la riqueza social hacia su cúspide, por un modelo reticular multinivel, manual o digital, según la escala.

Estamos, pues, como humanidad ante una encrucijada: o vamos hacia una civilización trans humanista  modulada por la Inteligencia artificial, la automatización y la robotización, que torna superflua a la  mayoría de la población: hay que deshacerse de ella ex ante, o vamos hacia una civilización ecológica y convivial, sobre las infraestructuras hasta ahora logradas por el progreso y el desarrollo industrial y tecnológico, en la que la humanidad monoteísta vuelve a restaurar las conexiones animistas básicas: con el Ain Sof  y con la Madre Tierra, que el patriarcado cortó de cuajo con dos tecnologías básicas: la escritura (que hace desparecer a las Diosas Madres e instaura la Abstracción esencialista) y con la tecnología de vivir en ciudades. Tenemos que drenar las ciudades hacia el campo y ocupar el espacio más racionalmente. Las Luces de la ciudad ya pueden llegar a todos los rincones del planeta, gracias al trabajo de Nicola Tesla. Su hora ha llegado. NT: sigamos esa huella.

Por razones de software cultural, no puedo no pensar en que la palabra clave: Corona, alude a Kéter, כתר,  y que el agente principal, el Virus, apunta hacia las Plagas de Egipto y que para arribar a la Tierra prometida, que anuncia toda esta Demolición controlada en curso, es preciso pasar cuarenta años por el Desierto y que esta generación extrañará las cebollas de Egipto y no cruzará el Jordán.

Cuando eligieron el Nombre Covid-19 (19: כוביד) eligieron un Nombre que comienza con un Nombre de Dios. Comienza con כו o26, como en el Tetragrammaton: יהוה, y termina en Yad: יד, Mano, como en la Mano de Dios. De hecho, dividido en 28 y 14, Covid-19 refleja las 3 manos de Dios que acabamos de ver en la última palabra de «la escritura en la pared» en Daniel 5: 25: וּדְנָה כְתָבָא, דִּי רְשִׁים: מְנֵא מְנֵא, תְּקֵל וּפַרְסִין. En la traducción Reina Valera dice así: Y la escritura que trazó es: MENE, MENE, TEKEL, UPARSIN.  Esta es la interpretación del asunto: MENE: Contó Dios tu reino, y le ha puesto fin. TEKEL: Pesado has sido en balanza, y fuiste hallado falto. PERES: Tu reino ha sido roto, y dado a los medos y a los persas”. Luis Alonso Schökel traduce así: “Lo que está escrito es: ‘Contado, Pesado, Dividido’. La interpretación es ésta: ‘Contado’: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha señalado el límite. ‘Pesado’: Te ha pesado en la balanza y te falta peso. ‘Dividido’: Tu reino se ha dividido y se lo entregan a medos y persas’.

A buen entendedor, pocas palabras.

Locus elocutionis

Soy un sefardí católico que se sabe parte de la tradición abrahámica, entendida como una sola vibración, en la que, en mi caso, resuenan más fuertes las energías bosónicas desatadas por ese personaje literario llamado Jesús de Nazareth. Mi nombre sefardí es Todros Halevi.

Nací en el Ayllu altiplánico de Waita y viví arrullado por un entorno animista hasta entrada la edad de razón. Illapan sut´awallan yuqapa es el nombre con el que los aymaras se referían a mí.

Mi adolescencia lasallista estuvo marcada por Guillermo Dagnino, Noé Zeballos. Romano Guardini y Jaques Leclercq. Mi juventud  jesuítica por los hermanos Rahner, Jean Danielou, Urs von Balthasar y, sobre todo, Erich Przywara. Mi nombre católico es Javier Ignacio.

Me sé y siento parte de la resonancia de vidas como las que van, desde Fernando de Rojas a la de Fernando Pessoa, pasando por Cervantes, Teresa, Vives, Spinoza y los Alumbrados de todos los tiempos.

Agradecimientos

Agradezco las observaciones, comentarios y sugerencias de Sergio Medina y Rossy Jaldín, que contribuyeron a que este texto tenga el formato y el tono que tienen.

Agradezco, igualmente, a Ineke Dibbits y Javina Medina por su soporte técnico y afectivo.


[1] El estado del arte, a este respecto y por lo que a mi concierne, en lo que atañe a los datos arqueológicos, está marcada por la obra de Israel Finkelstein  y Neil Silberman, La Biblia desenterrada. Madrid; Siglo XXI, 2009. En lo que atañe a los datos literarios está pautada por la obra de Llogori Pujol, Érase una vez… Jesús, el egipcio: las fuentes egipcias del Nuevo Testamento. Setme II  2015. Por lo que atinge a los datos ideológicos, por la obra de Shlomo Sand, La invención del pueblo judío. Madrid; Akal, 2011.

[2] En Observaciones. México: Siglo XXi, 1981.

[3] Desde una lectura energética, este Miedo, que alimenta al Holón superior de la Pirámide invisible de Poder, se está extendiendo a producir terror, mediante los incendios provocados, también a las plantas y a los animales … de Australia, ahorita mismo, la Amazonia, ayer, la Patagonia hace poco. No es que la Madre Tierra “está reaccionando a los cambios climáticos”; es el proyecto de smarth city´s y redes ferroviarias, de soya y pasturas para exportar carne, y limpiezas étnicas ex ante, lo que está detrás de estos incendios provocados. Das Kapital, por lo visto, no se nutre sólo del Miedo producido en la Granja humana y sus Mataderos, también se alimenta con el Miedo, ante el fuego, de plantas y animales. Estamos viviendo un holocausto que incluye a la natura naturata. Véase: Cleve Backster, Primary Perception: Biocommunication with Plants, Living Foods, and Human Cells. Amazon, 2003. Ahora que repàso el texto, ese Miedo es producido, a escala global, por la Pandemia del Corona Virus. Siempre Miedo.

[4] Los occidentales hemos tenido un daimon griego; bueno para tiempos ontológicos. Para Tiempos, basados en energía, Carlos Castaneda nos ofrece el remplazo: las enseñanzas de don Juan y Jacobo Grinberg las enseñanzas de doña Pachita. Este Jaqi energético debiera ser la base de nuestra cosmología; ahí convergen género, ciencia, conciencia y espiritualidad.

[5] Las religiones incluyen entre sus mitos un papel central a la unión carnal entre dioses. Por ejemplo, para limitarnos a las dos raíces de nuestra civilización: en la religión egipcia, menta las bodas entre Isis y Osiris. En la religión mesopotámica: la unión carnal de dioses o diosas con mortales era un tema muy repetido, tanto en la literatura, Epopeya de Gilgamesh, como en ritos específicos que tenían lugar en sus Pirámides sacrificiales, llamadas Zigurat, donde el dios, encarnado en un sacerdote, copulaba con una mujer. Esto es lo que sucedía detrás del Velo de Isis.

 

[6] Todros Halevi / Javier Medina, Abraham / Sarah. Regreso a las semillas del Monoteísmo patriarcal con contrapunto animista. Edición de autor, Amazon, 2019.

[7] Sin S&S no hay Forma Casa: ¡Obvio! Tampoco Forma Ayllu: en el tinku fluyen los dos; uno de día, el otro de noche. Menos aún la Forma Estado: Hollywood / Casa Blanca: JFK/MM. Recomiendo mi texto Abraham/Sarah, donde abundo sobre ello, arqueológica y etnológicamente.

[8] Para los conceptos, sugiero que consulten mi libro Mirar con los dos ojos, Garza Azul, 2010.

[9] Javier Medina, Pasos hacia una Biosofía del Vivir Bien, Tres tomos, Edición del autor.

[10] Las Instrucciones prescritas: Goce, Deseo, Amenaza, Violencia, como disparadores del Algoritmo, son recientes, como formulación: Pedro Bustamante, Hierogamias y sacrificios, pero vienen de lejos como materiales para pensar. En mi caso, las referencias son las siguientes: Genos und Geschlecht, debido a mi maestro Franz Karl Mayr; Triebstruktur und Gesellschaft (Estructura pulsional o libidinal y Sociedad) debida a Herbert Marcuse; sus editores americanos lo tradujeron por Eros y Civilización; El orgón y La función del orgasmo: Wilhelm Reich. Luego: El erotismo y la parte maldita de Georges Bataille y, en general, la escuela francesa de sociología. También, los Eranos-Jahrbücher, del Círculo Eranos que, por goteo, me siguen nutriendo,

[11] Para más detalle, véase el tomo 3 de Pasos

[12] En el ritual hierogámico Evo-Gabriela, se sacrificó, por ejemplo, un Niño imaginario. Es curioso, igualmente, cómo sus ministros desenvainaron sus espadas para salir en defensa del honor de la bragueta presidencial y cómo los medios mintieron, ofendieron y llenaron las redes sociales de noticias truchas y, lo remarcable, el Gobierno no les censuró. Véase: Carlos Valverde, Santa Zapata: el zapatazo que hirió al poder. Santa Cruz: Editorial El País, 2018 y Reymi Ferreira, Caso Zapata: la confabulación de la mentira. Santa Cruz: Editorial El País, 2016.

[13] Véase: Fernando Giobellina Brumana, El lado oscuro. La polaridad sagrado/profano y sus avatares. Buenos Aires: Katz Editores, 2014.

[14] Un ejemplo actual de ello es la Bolivia contemporánea. Es, formalmente, un Estado, por tanto con un ordenamiento jurídico que debe propiciar un Orden abstracto de las cosas pero, informalmente, la Bolivia real funciona caóticamente  en un chenko simpático en el que prevalecen el tinku de energías antagónicas que siempre encuentran un punto relativo de acuerdo, que dura lo que dura, pues no se quiere ir a ningún lado: por ejemplo, hacia las u-topías desarrollistas o las dis-topías postmodernas, sino que, simplemente, se trata de pasarlo bien nomás. No ganar; sino participar, compartir y festejar; como en el fútbol: el tinku simbólico, con el que Genaro Flores y Evo Morales, por ejemplo, han hecho política. No con el Manifiesto comunista o con el Programa de Gotha.

[15] A los curiosos les recomiendo: Moshe Idel, Cábala y Eros. Madrid: Siruela, 2009.

[16] Las teorías del Caos comenzaron con la observación de fenómenos aleatorios, como la formación de las nubes y, particularmente, lo que se vino a llamar el «efecto mariposa» y la constatación de la creciente complejidad que está en la raíz de la emergencia de formas de vida cada vez más altas. El sentido es el siguiente: detrás del caos presente se esconden dimensiones de orden y viceversa. Ilya Prigogine estudió las condiciones que permiten el surgimiento de la vida: siempre que exista un sistema abierto, haya una situación caótica y esté en vigor una no linealidad, es la conectividad entre las partes la que la genera un nuevo orden vital. Este proceso conoce bifurcaciones y fluctuaciones. Por eso el orden/caos nunca se dan a priori. Depende de varios factores que lo llevan a una dirección o a otra. El caos nunca es sólo caótico, ni el orden, sólo ordenado.

[17] Por ejemplo, ahora, toda la civilización industrial, basada en el cada vez más escaso petróleo, está luchando a muerte por apropiarse de este recurso, a como dé lugar. (En otro nivel, claro, están buscando tecnologías anti gravedad, portales inter dimensionales… como en el caso de la ocupación militar americana de Irak/Sumeria. Paralelamente a ello, la civilización está enfilándose hacia el Litio como un recurso importante en el siglo XXI. En la Revolución de colores boliviana, se habla de todo, menos de eso. El enmascaramiento mediático del robo y el pillaje se hace, ahora, en nombre de la Democracia y la Lucha contra el Terrorismo, con lo que los Estados filibusteros han terminado por volver irrisorio uno de los grandes avances políticos de la historia de la humanidad: el Estado de Derecho moderno. El Capitalismo subordina y manosea a la política y al derecho internacional. Nunca olvidaremos a Donald Trump.

[18]Actualización / Potencialización. Lupasco caracteriza la dinámica de todo fenómeno físico o biológico, polarizado por la no-contradicción, como una actualización que se manifiesta como la realidad. Luego, interpreta, lo que se potencializa, como la conciencia elemental de lo que se actualiza. Ahora bien, el Principio de Antagonismo liga, a toda actualización, la potentialización de su contrario. Así, por ejemplo, la actualización del monoteísmo, potencializa el animismo, y la actualización del animismo potencializa el monoteísmo. Por tanto, la relativización de uno por el otro, pone de manifiesto la tercera conjunción, cuyo resultante es, en sí mismo, contradictorio. La interculturalidad pone en escena lo contradictorio.

[19] Remito a mi libro Economías de la Madre Tierra y, dentro de él  a la bibliografía, en especial a la obra de Bernard Lietaer.

[20] Por eso, el intento del Gobierno boliviano actual de forzar a los pueblos indígenas (que quieren ejercer el derecho constitucional que les asiste de convertirse en Autonomías indígenas) a pasar por el tubo de la escritura y no respetar la oralidad  y la ritualidad, como tecnologías de gestión propias, representa el último capítulo de la Extirpación de Idolatrías, que inaugurara nuestro patriarca Abraham y prosiguiera la Inquisición en el siglo XVI. La Escritura y el Dinero son las armas con las que los están violando y, para mi estupefacción, parece que lo consintieran… ¿resignadamente? ¿masoquistamente?

[21] Sobre estos protocolos de gestión andinos, véase el capítulo La crianza andina del clima en: Pasos…tomo uno.

[22] Remito a mi texto: Diálogos Marranos: Qabbalah, próximamente por Amazon.

[23] El modelo monoteísta precisa, por diseño, controlar: emocional, fiduciaria, racional y socialmente a su gente, para lo cual, antes, los ha convertido en fieles y, ahora, en ciudadanos. La tecnología desarrollada para ello es la liturgia (diaria o semanal) en sinagogas, mezquitas e iglesias (que van siendo sustituidas, últimamente, por los estadios, los conciertos y, sobre todo, la televisión y el smartphone); una carga más fuerte de control interno, la proporcionan las peregrinaciones (a Tierra Santa, Meca, antes Compostela; quien sabe, Copacabana, Cotoca…). Una dosis más concentrada aún la ofrecen tecnologías de control integral, como, por ejemplo, los Ejercicios espirituales de San Ignacio y otros menos sofisticados: como los que implementan todas las sectas. Este diseño se aplica, ahora, urbi et orbi, desde el dispositivo libidinoso-sacrificial: Wallstreet-Pentágono/Casa Blanca-Hollywood/Disney-Sillicon Valley, a todo el mercado globalizado. Este Gestell es monoteísmo esotérico químicamente puro.

El modelo amerindio, en cambio: la vía chamánica: la expansión de los niveles de conciencia, comunica con universos paralelos y campos inteligentes en el continuo de la masa-energía; por tanto, no producen trauma, ni dependencia, ni adicción y, por ello mismo, no precisan de “templos” (del Templo de Abidos a Hollywood) ni “especialistas” (de Faraón a H Weinstein y J Epstein). Véase, para una visión analítica y crítica: Pedro Bustamante, El imperio de la ficción: Capitalismo y sacrificios hollywoodenses. Barcelona: Ediciones libertarias, 2015.

[24] De ahí que, siempre, el efecto del Secreto sea la Corrupción y el Sacrificio de los inocentes: lo que, justamente, clama al cielo (Génesis 6, 12-13). Ambos: corrupción y sacrificio, son sistémicos; no anomalías extirpables. Si no entendemos ésto, estamos perdidos. Y, efectivamente, estamos perdidos: nos seguimos escandalizando por la corrupción de los poderosos. Su generación no debe seguir siendo ingenua adrede. Ahora bien, afortunadamente, esto es sólo la mitad  del todo. La otra mitad es el modelo político del Ayllu que no produce corrupción, ni hecatombes, igualmente, por diseño: no acumulación, no concentración, no secreto, no separación, no disociación. El Poder-dominación: el Politicum monoteísta, es fruto de la transgresión, por los iniciados: las elites, de lo que se prohíbe, mediante la Ley, la Constitución, a los demás: ahora: a los ciudadanos; los que están en lo profano. La democracia es la puesta en escena, actual, de este ritual sacrificial perpetrado por Abraham a su hijo Isaac: el solve, y las elecciones son el ritual hierogámico: el coagula del quantum socio-político. Votar es meter el pirulín de la papeleta por la rajita de la urna. Ni más ni menos. Este es el objetivo, no dicho, de la separación sagrado/profano.

[25] La información está disponible en internet. Los invito a leerla, critica y empáticamente. Todos somos un Maciel en potencia.

[26] Los tres, por cierto, (Alejandro VI, Sabbatai y Maciel) Marranos sefardíes. Este es un punto que me tiene intrigado, como Marrano sefardí que soy. Otro inquietante aporte Marrano sefardí, en esta misma dinámica, son la Compañía de Jesús, al comienzo de la edad moderna, y el Opus Dei, al final de la edad moderna. Espero compartir pronto mis perplejidades intelectuales así como mis hipótesis hermenéuticas, a partir de una revisión historiográfica de la América marrana-sefardí ocultada ¿adrede?

[27] Cf. Lively, Scott y Abrams, Kevin, The Pink Swastika: Homosexuality in the Nazi Party. Founders Publishing. Corporation, 1995.

[28] De ahí, también, la importancia y significación epocal del Papa Francisco: Laudato Si´ y su aplicación, paulatina, desde la Amazonia: primer paso para el gran cambio de paradigma en curso: las bodas del Monoteísmo y el Animismo.

[29] Para más detalle, remito a: Leonard Shlain, El alfabeto contra la diosa. El conflicto entre la palabra y la imagen, el poder masculino y el poder femenino. Madrid, Debate, 2000.

[30] La Paz: Instituto Boliviano de Medicina Tradicional Kallawaya, 2007.

[31] “La realidad física y social en la cosmología andina”, en: Actes du XLIIe Congrés Internacional des Américanistes. Paris, 1976, p. 304.

[32] Grabitobiology: A New Biophisics, Amazon; Resla Book, 1991.

[33] La vasta Obra de Ina Rösing, sobre los Andes, ha sido recogida en Mundo Ankari. Tristan Platt ha tratado el tema en Espejos y Maíz. Temas de la estructura simbólica andina. La Paz: CIPCA, 1976.

[34] Ahora bien, también hay que decir que, more monoteistico, este modelo se auto recorta de modo antropocéntrico y, more animista, se extiende cosmogónicamente.

[35] Este concepto axial del Animismo andino nos lo descubrió a los occidentales Gabriel Martínez, con su texto: El sistema de los Uywiris de Isluga, editado en Bolivia en: Espacio y Pensamiento. La Paz: HISBOL, 1989. Le dio otro hervor François Greslou, Visión y crianza campesina de los animales  andinos, 1989. Un enfoque, desde la tecnología y en diálogo con la teología cristiana, nos lo ofrece: Juan Van Kessel, Dionisio Condori Cruz, Criar la vida: trabajo y tecnología en el mundo andino,Santiago: Vivarium, 1992. Luego el PRATEC lo mostraría en toda su amplitud; por ejemplo, en la Compilación debida a Eduardo Grillo et alt. Crianza andina de la Chacra. Lima: PRATEC, 1994. Otra recopilación que recomiendo son las Actas del Simposio del 49º Congreso Internacional de Americanistas, Quito, julio de 1997, editado por Juan van Kessel y Horacio Larraín Barros, Manos sabias para criar la vida. Tecnología andina. Quito: Ediciones Abya Yala, 2000.

[36] Gabriel Martínez, Humor y sacralidad en el mundo autóctono andino. Edición mimeografiada. Universidad de Chile, Iquique, 1974.

[37] Jan Douwe van der Ploeg, Sistemas de conocimiento, metáfora y campo de interacción: el caso del cultivo de la patata en el altiplano peruano.  Seminario sobre “Sistemas de conocimiento y sistemas de ignorancia”, School of Oriental and African Studies, de la London University, 1989.

[38] Véase: Pedro Bustamante, El imperio de la ficción. Capitalismo y sacrificios hollywoodenses. Madrid; Ediciones libertarias, 2015. Recomiendo sobre todo sus Referencias: http y www que ofrecen fuentes de información pertinente, para hoy, que no ofrece el establishment académico: CIES; CIDES; FLACSO; CLACSO.

[39] El Kharisiri es una suerte de monstruo, de tipo vampírico, que en vez de sangre se alimenta de la grasa que sustrae a sus víctimas, ora degollándolas, ora durmiéndolas. Es un ser intersticial. Kha es una sílaba, oclusiva fricativa, que menta un tipo de energía densa, representada por la grasa, el cebo, la manteca. Este ser, una suerte de Leviathan, existe en una dimensión holónica superior y es la representación por antonomasia del Otro occidental.

[40] Sobre esto me remito a Ina Rösing, Los diez géneros de Amarete, en: Denise Arnold (Compiladora) Más Allá del Silencio. Las Fronteras de género en los Andes. La Paz: CIASE, ILCA, 1997.   

[41] Cf. William Sullivan, El secreto de los incas. Barcelona: Grijalbo, 1999.

[42] Me inspiro en la obra de Javier Roiz, Sociedad vigilante y mundo judío en la concepción del Estado, Madrid: Editorial Complutense / Asociación Foro Interno, 2008.

[43] Ha llegado hasta nosotros, gracias a la edición de Jesús Viscarra Fabre, Copacabana de los Incas. Cuya segunda edición debemos a la Fundación  Flavio Machicado Viscarra, La Paz, 2010.

[44] Para una lectura filosófica del término, recomiendo: José Yánez del Pozo, Yanantin. La filosofía dialógica intercultural del Manuscrito de Huarochiri. Quito: Abya Yala, 2002.

[45] Actualización/Potencialización.Lupasco caracteriza la dinámica de todo fenómeno como actualización y, por extensión, podemos decir que todo fenómeno físico o biológico polarizado por la no-contradicción es una actualización que se manifiesta como la realidad. Lupasco interpreta lo que se potencializa como la conciencia elemental de lo que se actualiza. El principio de antagonismo liga, a toda actualización, la potencialización de su contrario: la actualización de la homogeneización potencializa la heterogeneización, y la actualización de la heterogeneización potencializa la homogeneización. La relativización de uno por el otro pone de manifiesto la tercera conjunción cuyo resultante es, en sí mismo, contradictorio. Son las conjunciones contradiccionales de base, de la lógica de lo contradictorio.

[46] Es el modelo opuesto al que ha elegido la tradición occidental: el del Ser: lo que dura. La Forma Estado es estática, justamente. La Forma Ayllu es energética, no ontológica.

[47] Véase Ineke Dibbits y Ximena Pabón. Granizadas, bautizos y despachos. Aportes al debate sobre el aborto desde la provincia Ingavi. Conexión Fondo de Emancipación, 2012.

[48] Véase, por ejemplo, Pierre Duviols, “La dinastía de los incas: ¿monarquía o diarquía?”, en Journal de la société des americanistes, 66(1079)67-83; R.T. Zuidema, The Ceque System of Cusco, Leiden, 1964; Nathan Wachtel, Structuralisme et histoire: a propos de l´organization sociale de Cusco, en Annales E.S.C, 21(1966) 1-23.

[49] Lean, por ejemplo, las líneas y las entrelineas de los casos, Weinstein, Epstein, para que verifiquen por ustedes mismos, lo que sostengo. Como entrada en materia sugiero; Trance Formation of America. The True Life Story of a CIA Mind Control Slave, by Cathy O´Brien with Mark Philips. Amazon, 1995. Para una visión de conjunto, mi Abraham/Sarah: la semilla fractal de toda esta historia.

[50] Para una explicación más minuciosa, remito al texto de Pedro Brunhart, sobre Las Tasa de Interés, en la web del Circulo Achocalla.

[51] Una información básica la provee G. von Rad, Der heilge Krieg im alten Israel. Zürich, 1951.

[52] Véase: Pierre Clastres, La sociedad contra el Estado. Caracas: Monte Ávila, 1978.

[53] Si no sabes, averigua qué son los Fraudes piramidales de hoy en día. Ahí está la quintaesencia perversa del Monoteísmo. Si quieres compararlo con el Animismo, averigua qué es un Pasanaku. En Bolivia casi todos la conocen. Su vigencia nos salva de que el otro modelo nos trague atados de pies y manos.

[54] Véase: Pedro Bustamante. El imperio de la ficción: Capitalismo y sacrificios hollywoodenses. Madrid: Ediciones Libertarias. 2017.

[55] Para ms detalle, remito a los interesados a mi texto, Pasos hacia una Biosofia del Vivir Bien.

[56] Jeremy Narby, La Serpiente cósmica. El ADN y los orígenes del saber. Lima: Takiwasi y Racimos de Ungurahuí, 1999.

[57] Para una visión de cómo hemos ido avanzando en este diseño, recomiendo mi texto: El concepto de Pusisni en el Programa Biocultura; otros dos textos que sugiero a los curiosos intelectualmente son. Pusini / Tawantin en el pensamiento andino y La noción de Pusini en el último Heidegger, todos en: Pasos hacia una Biosofía del Vivir Bien, Tomo I.

[58] La Ley 300 de la Madre Tierra se deja comprimir en los siguientes derechos: Derechos de la Madre Tierra, Derechos de los bolivianos al desarrollo y el progreso, Derechos de los pueblos indígenas a sus culturas y cosmovisión y los Derechos de todos a una vida armónica y equilibrada.

[59] Esperamos dar el segundo hervor a esta metodología en la preparación de los PTDIs 2020-2025. Pero esta es, grosso modo, la Hoja de ruta.

[60] La crisis actual, ecológica y social, obliga a indagar cuándo, cómo y dónde se atrofió la capacidad de compasión y empatía del homo occidentalis monoteisticus por sus semejantes: explotación capitalista, y la naturaleza: expoliación de sus recursos. Esa indagación es mi próximo desafío intelectual. Sospecha: la circuncisión, el sistema biomédico actual y el régimen alimenticio urbano.

[61] Véase mi texto, Abraham/Sarah. Regreso a las raíces del monoteísmo patriarcal con contrapunto animista. Vide supra.

[62] Para los indígenas de las Tierras Comunitarias de Origen, son dos cárteles que compiten y colaboran mutuamente, mientras sus soldados les han arruinado la vida. Los campamentos militares que resguardan los cultivos implantados  y protegen el tráfico de sus derivados, les han enmerdado, literalmente, el territorio. Se, de una base militar de ochocientos efectivos, que ocupa un antiguo Internado misionero, con una sola batería de baños, que ha cubierto de heces y orines varios kilómetros a la redonda, el poblado indígena, contaminando el sotobosque, los suelos y, sobre todo, las aguas. Una desgracia verdaderamente escatológica.  Eso es Occidente, el Capitalismo y el Cristianismo para esos hijos del bosque amazónico (Comunicación de Roger Chávez; moseten, al Circulo Achocalla. 6/3/2020).

[63] Cuando una relación de consanguineidad, fraternidad, se  la trastoca  en una relación política, fraternit.e, se la convierte en un señuelo cínico para engañar inconscientes.  En la Forma Estado: una Pirámide sacrificial, solo pueden existir los Intereses. Los ciudadanos y los países no tienen amigos, tienen intereses, ora personales ora colectivos. El Capitalismo, que es su sistema operativo, lo impide por diseño.

[64] Para más detalle, tanto conceptual como metodológico e, incluso con un cajón de herramientas energético, para ello, lo pueden consultar en mi texto: Pasos haca una Biosofia del Vivir Bien.

[65] Mientras no pensemos y decidamos una nueva reforma agraria, que redistribuya la tierra a todos los bolivianos, tanto urbanos como rurales, los urbanícolas tendremos nomás que hacer de tripas corazón. Hay que volver a pensar la tierra y el territorio de modo descampesinado. No solo los campesinos y los pueblos indígenas tienen derecho a la tierra. En un contexto de globalización, sin tierra, no hay matria. Las corporaciones transnacionales se adueñarán del planeta, como, de facto, ya lo están haciendo. La Patagonia, por ejemplo, ahora mismo, no es ni de Chile ni de Argentina y menos aún de los Mapuches. Estudien ese caso para curarnos en salud, ¡Qué digo! Ya lo han hecho. Las Transnacionales petroleras y mineras son dueñas ya  de nuestro subsuelo: los guaidó de turno ya se las adjudicaron  legalmente. Observen donde están ubicadas las bases militares americanas en el mundo. Están jugando un Go geopolítico. Sospechen y atinarán. Hay que espabilar.

[66] Véase el libro Mensajes del agua de  Masaru Emoto, donde demuestra la capacidad del agua: 95% de la composición de los vegetales, de ser un vehículo de  conciencia. Asimismo: Bertus Haverkort et alt. Antiguas raíces, nuevos retoños. El desarrollo endógeno en la práctica. La Paz: COMPAS/AGRUCO/Plural, 2003.

[67] Recomiendo el hermoso libro de Stephan Rist, educado en una Waldorfschule suiza, Si estamos de buen corazón, siempre hay producción. Caminos en la renovación de formas de producción y vida tradicional y su importancia para el desarrollo sostenible. La Paz: AGRUCO7CDE/Plural, 2002

[68] La modernidad pretendió operar desde el holón estatal (desde el Vértice invisible de la pirámide sacrificial, para ser más exactos) y terminó frustrando las expectativas, tanto de la Ilustración como del Romanticismo. Cuando todo se le fue de las manos, tuvo que sacar , alocadamente, el Corona Virus para volver a tomar el control. Demasiado tarde.

[69] Véase todo el proceso en Javier Medina, Poderes locales. Implementando la Bolivia del próximo milenio. Protocolos de gestión de un Subsecretario. La Paz: FIA/Semilla/CEBIAE, 1997; Javier Medina, Manifiesto municipalista. Por una Democracia Participativa Municipal. La Paz: G-DRU, 2001. Javier Medina, La vía municipal hacia la vida buena. La Paz: GTZ-FAM, 2002.

[70] A modo de inspiración les remito a un caso concreto: Manuel Mamani, El rito agrícola de Pachallampi y la música en Pachama, precordillera de Parinacota; en:  https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0716-27902002019800003. Es importante la bibliografía consignada que les podrá ser muy útil. Para una lectura de estos rituales de producción andinos, desde el nuevo paradigma científico occidental, sugiero mi texto: Crianza andina del clima, en Pasos hacia una Biosofia del Vivir Bien

[71] Sobre este tema es indispensable  que conozcan  la obra del PRATEC. Véase: Eduardo Grillo et alt.: Los caminos andinos de las semillas: Núcleos de vigorización de la chacra andina; experiencias de los núcleos de vigorización de la chacra andina en la crianza de la biodiversidad. Lima: PRATEC, 1997.

[72] Se puede acceder al texto de Simón Yampara, Qhathu–Qulqa : Cosmo-convivencia indígena matricial, en http://dominique.temple.free.fr/reciprocite.php?page=reciprocidad_2&id_article=27.

[73] http://www.librosbudistas.com/descargas/Instrucciones-al-cocinero-de-monasterio-zen.html 

[74] “FUEGO. Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob, y no de los filósofos y sabios. Certeza, certeza, sentimiento, alegría, paz. Dios de Jesucristo. […] Alegría, alegría, alegría, lágrimas de alegría”.

[75] Como se avergüezan los amazónicos y  prefieren ser una Nación Culebra. Tal el título del hermoso texto de Pablo Cingolani, editado por la Expedición Madidi y FOBOMADE, en 2012: La Paz.

[76] La cocina de la abuela cura estas gripes invernales con infusiones de Artemisa y las boticas tradicionales ofrecen el dióxido de cloro. Así y con aceite de hígado de bacalao, los niños, y con un huevo fresco vaciado en un vaso con pisco, los abuelos, las generaciones pre consumistas han pasado las temporadas frías. ¡Ah! y un copetín de ajenjo en la sobremesa de la cena: los mayores..

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