DIARIO del Círculo Achocalla: ¿Comida o gasolina?
En el año 2008, ya empezó la discusión sobre los pros y contras de la producción del agrodiesel, es decir la gasolina producida en base a productos agrarios. Los más conocidos de estos productos son aquellos fabricados en base a la palmera de aceite o al maíz, dentro de ese rango también se encuentra la producción de etanol en base a caña de azúcar.
En esa época, las organizaciones a favor del tercer mundo argumentaban, que los precios de los alimentos subirían, si se transforma el maíz en gasolina en lugar de tortillas, lo que si es evidente que en general habrá una competencia entre sembrar para comida o para gasolina. Por otra parte, la Unión Europea pensaba que el agrodiesel ayudará a proteger el clima y por esta razón permitía mezclar la gasolina con un 10% de agrodiesel.
Ahora la Unión europea se da cuenta, que el agrodiesel realmente pone en peligro la seguridad alimenticia en muchas regiones del mundo, porque influye negativamente en los precios de la comida. Especialmente en México el precio de harina de maíz se multiplicó en los últimos años. Aparte que acelera en forma alarmante la degradación de los suelos y fomenta la deforestación.
Por esta razón, recientemente la Comisión de la Unión Europea (el órgano ejecutivo) propone bajar el porcentaje de mezcla al 5%.
¿Y cómo votaron finalmente los gobiernos sobre esta propuesta? Bueno, como siempre a favor de la industria, en este caso la industria agrícola. No hubo consenso entre los gobiernos, y por eso la regla de mezclar hasta el 10% queda en vigencia.